Pianista de Seoul | KookV

004

Recuerdos

-Recuerda la siguiente nota, se que puedes aprenderla-

-Se que puedo- responde él pequeño de 12 años - Pero es difícil y son taaantas-

-Tranquilo, tómalo con calma, si realmente te gusta algo y quieres aprenderlo lo harás-

-¡Quiero aprender a tocar el piano igual que tu, padre!-

-Y lo harás, serás el mejor pianista de Seoul, mi pequeño Tae - responde el hombre con una mirada de amor a su niño.

Las primeras veces que toco un piano fue con la persona más especial que a tenido en su corta vida, la que le enseño con tanto cariño y dedicación. Kim realmente amaba recordar esos momentos con tanta nostalgia cuando sus dedos tocaban cada pieza.

Mantenía sus ojos cerrados, tratando de estar en sus recuerdos hasta que acabará la melodía, la última que pudo aprender con su Padre antes de su caos.

De toda las miradas a su alrededor, la gente apreciando como tocaba pudo sentir una mirada mucho más fuerte que las otras.

Al abrir sus ojos solo encontró dos luceros oscuros como la noche, tan profundos como el océano y tan brillantes como la luna. Él observaba tan intensamente, como si fuera capaz de poder leer a través de uno, en sus ojos podías ver las estrellas de una manera en la cual nunca fueron vistas.

Misterioso pensó Taehyung.

Pudo observar el momento que el café que traía en mano caía, pero este aún así no estaba expresivo, solo con su rostro serio, mirándolo y escuchándolo tocar.
Quito su vista de él cuando supo que su melodía iba acabar, toco las últimas notas soltando un suspiro bajo al dejar sus manos en el aíre y la mirada sobre las teclas de este.

Hubo un silencio antes de que empezaran los aplausos hacia su persona, Kim sonrío, claro lo haría, mostrando la sonrisa más grande que pudo, la que con años supo mostrar como si fuera la más real que tenía.
Al acabar de agradecer giro sobre sus talones para mirar al chico de ojos cómo luceros, más sólo vio como este retrocedió hasta irse a paso rápido.

Realmente misterioso murmuró mientras miraba la espalda de él.

Se dió cuenta que era tarde y tendría que volver a su hogar pronto antes de quedar sin autobús y tener que caminar, aunque realmente no era mala idea caminar con buena música. Por lo que saco sus audífonos y puso Ophelia de The Lumineers para empezar a caminar.

🤍

Al estar ya es su hogar encontró la televisión encendida junto a su madre y con esta una botella de cerveza en mano.

-Al fin te dignas a llegar- le dice su madre sin mirarlo.

Kim la mira antes de hacer una mueca más que una sonrisa -¿Te estas preocupando? por favor respóndeme antes de ilusionarme-

-Soy tú madre, me tengo que preocupar por ti, ¿no?- Zara pone la botella en su boca antes de tomar un trago.

-Mientes de manera patética- responde antes de caminar hacia su habitación.