Pianista de Seoul | KookV

008

Chico fresa

Un castaño y un pelirosa.

Esas dos cabelleras se veían en los que eran nuestros asientos.

-Por tu culpa nos quitaron nuestros asientos-

-¿Mi culpa?- le mira incrédulo - Yo no fui quien dormía a culo suelto en la biblioteca, tuve que pegarte 5 veces Min, ¡5!-

-¿Culo suelto? deja de juntarte con mi madre, maldición, empiezas a decir las mismas cosas que ella- Min miraba a los dos chicos sentados en las bancas que eran 'especialmente' de ellos.

Alguien que duerme siempre y otro que no habla con nadie, interesante amistad tenían como así tenían las mismas ideas, sentarse al fondo para que nadie los viera ni molestara, increíble idea de los dos pares de amigos...

Lastima que les ganaron sus preciados asientos.

-Podríamos simplemente ir y decirles que se fueran, mood chico rudo - le dice Min poniendo su postura recta y sacando más pecho.

-Eres realmente imbécil cuando quieres- Jeon vio como la chica al lado de los desconocidos les hablaba mirándolos para nada disimulado mientras estos seguían con la mirada baja.

-Quien en su sano juicio se pone el pelo rosa chicle- Min pone una mueca - Parece algodón de azúcar, es ridículo-

-Lo dice quien parece tener una mata de plumas color menta- responde Jeon burlándose.

Los dos pares de amigos miran nuevamente a los desconocidos cuando estos levantan un poco su cabeza, al ver sus rostros cada uno abrió sus ojos quedando realmente sorprendidos.

Cada uno sabía lo que paso la noche del sábado con el contrario, más no conocían el rostro de la persona que puso de buenas a su amigo.

-Es él- dice Jeon.

-Es él- dice Min al mismo tiempo que Jungkook.

Los mejores amigos se miran para después poner una sonrisa en su cara y empezar a caminar hacia los chicos de la fiesta.

Estos aún no los miraban, estaban hipnotizados en la pantalla del celular que tenia el pelirosa, la chica a su lado los miraba con una mueca nerviosa mientras les hablaba a los dos amigos sentados junto a ella. No fue hasta llegar a los asientos delante de ellos para poder hablarles y mirarlos frente a frente.

-Supongo que nos volvemos a encontrar- les dice Min, aunque solo mantenía su vista fija en el chico fresa.

-Pero en mejores condiciones- le sigue Jeon a Yoongi mirando al castaño.

Los dos suben su vista mirándolos, quedándose mudos y sorprendidos, no movían su cuerpo y...

¿siquiera esta respirando? se preguntó Jeon.

Eu, esta que le da un paro respiratorio aquí mismo chico.

¡Si respira!

Movió sus ojos Jeon, no significa que respire.

Y mientras Jungkook seguía hablando con su propia voz interior, Min estaba realmente encantado con la vista.