Cuatro

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Nerviosa, pasé mi mirada de Melanie a Lily, ambas frente a mi, miré de reojo a Chris y tenía su vista en su nieve.

-Sé que es apresurado, aunque en realidad ya lo había pensado, creo que es momento de avanzar...- mi voz se fue apagando, en el momento que Melanie me miró quedé muda, su mirada fue cristalina, y temí haberla herido.

-Hablémoslo en casa- y siguió con su nieve, incluso Lily, comió en silencio.

Chris me pateó ligeramente, lo miré y con un suspiro asintió, le dí una cucharada a mi nieve, y en mi cabeza comenzó a preparase mi discurso, mi argumento del por qué me iba, eligiendo cuidadosamente las palabras, sintiéndome cada vez menos segura de si era lo correcto, si debí haberlo pensado mas, si debí haberlo consultado con ellos primero antes de tomar una decisión por mí misma.

El camino fue tormentosamente silencioso, ni siquiera lograba concentrarme en mis ideas.

-Lily, pondré la bañera lista para que te des el baño tu sola, ¿de acuerdo?

-¿Puedo meter mis muñecas?

-Solo una.

Miré de reojo a Lily y pareció satisfecha, aunque la última vez que se bañó con una de sus muñecas, terminó tirándola por el mal olor.

Trataba de mirar a Chris por algún espejo retrovisor, pero no daba con su mirada.

Al llegar a casa, Melanie se fue de prisa al baño a prepararlo, ordenó a Lily a tomar su ropa para meterse a bañar, Chris tomó nuestros ramos y los colocó en un frasco de vidrio, temía que el peso de las flores terminara por tumbarlo, pero el frasco era lo demasiado fuerte para sostenerlo.

-Sentémonos en la mesa, ¿les parece?- Tomó un vaso de agua y lo puso en la mesa, después se sentó.

Me senté y esperé Chris hiciera lo mismo, lo hizo, lentamente.

-Empecemos de cero. Has decidido mudarte.- Asentí- ¿A qué vino todo esto?

Tomé aire.

-Hace unos días, semanas, me tomé un tiempo para planificar mi futuro, Chris habló del suyo y creí conveniente tener el mío también, me decidí por meterme al School Safety Agents,  está en teoría cercas de donde vivía, y en lugar de desperdiciar la casa, miré conveniente regresar a ella, y no ser ya una carga para ustedes.

-Susan, no eres una carga para nosotros, cuando sucedió lo de tus padres Chris lo habló conmigo, lo conversamos fríamente, lo sopesamos sin sentimentalismo, claro que cambiaría nuestras vidas, no podíamos tomarlo a la ligera, pero accedimos, no eres una carga.-Mi corazón comenzó a latir desenfrenadamente- Por otro lado, si es lo que deseas, si estás segura que estás lista para regresar...

-La verdad tengo miedo.- Mi mirada se cristalizó y mi voz falló, pero debían saberlo- Pero no puedo dejar a mis padres. 

-Pero necesitas tener 21 años Su -Chris tenía el celular en las manos, y por lo visto, el portal abierto.

-Lo sé, pero quiero estar acostumbrada a la casa, para cuando tenga que ir a aprender, practicar y al regresar, cansada de tanto pueda descansar, sin miedo.

-Susan- Su voz nuevamente fue suave y llena de amor, como cuando la conocí- No has dejado a tus padres ni un momento, los llevas presentes siempre en tu mente, en tu corazón, y en la clase de muchachita que eres, lo que eres es gracias a ellos, jamás podrás abandonarlos.

De pronto, mis planes y mis argumentos eran inutiles.

-Aún así, si deseas irte, formar tu vida, lo respeto- y volví a mirar su mirada dolida.

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⏰ Última actualización: Nov 13, 2021 ⏰

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