Los Días Que Te Amé.

Capítulo 9

~13 años atrás~

Rusia..

Era una noche solitaria donde el frío azotaba con crudeza los barrios más pobres de Rusia, por las calles cubiertas de nieve se observan barriles con fuego en cada esquina unos cuantos vagabundos se juntaban en las brasas  para poder calentar un poco sus cuerpos de aquel frío que cala los huesos.

Los letreros de maderas con pequeñas luces que parpadean alumbran las cantinas y burdeles de mala muerte donde solo criminales van por alcohol y vender su droga y hostigar a las mujeres que trabajan en la vida galante.

Por unas de las puertas de los burdeles más famosos del barrio, una chica de cabello azabache sale soltado risas para nada educadas mientras restriega mas sus pechos en los brazos de aquel hombre, el frío viento provocó que sus mejillas pasaran a un hermoso rojo como su nariz pero poco la importa a la joven que tendría una noche de lujuria.... sus ojos verdes como la esmeraldas no portaban brillo solo esperaban deslumbrar ante alguna emoción.

Aquella chica que reia mientras las manos del hombre recorría su cuerpo sin ningún pudor, apretando bajo la tela de su ropa su piel todo es visto por un hombre de hermosa apariencia y de un largo cabello negro como la tinta misma, frunció los labios con disgusto al ver como maneosaba a la chica a pasos firmes el joven hombre se acerca aquel sujeto no permitiría una actitud así en su área, el hombre gordo sintió como es jalado para ser golpeado en el rostro por un sujeto soltó un quejido y la chica de ojos verdes miró todo sin emoción alguna en su rostro al parecer esa noche no tendría sexo hizo un leve puchero solo pedía que sus hermanos se la estuvieran pasando mejor que ella.

Sus ojos miraron aquel extraño su figura esbelta pero si mirabas bien bajo aquella vestimenta tradicional China encontraría un cuerpo bien formado, cabello largo que caía como una cascada de tinta hasta su caderas, aquella piel tan pálida, su rostro perfilado tallado por algún Dios esos delgados labios entre abiertos cubiertos por un poco de bálsamo que lo hacían ver rojizos, y esos ojos dorados que brillaban con intensidad pareciendo en de una serpiente enojada, Jiang Yanli río un poco no entendía que le molestó aquel extraño que sin preguntar la tomo del brazo y la arrastró hasta la entrada de aquel barrio... Yanli no puso resistencia solo se dejó guiar sus ojos verdes debes encuando miraban sus manos unidas, antes sentiría vergüenza por eso pero ahora esta rota y no siente nada, ni dolor, ni tristeza ni arrepentimiento Jiang Yanli no le importaba lo le sucediera a su cuerpo, a cuantas manos o hombres como mujeres la poseyeran no le hacían sentir ni la pisca de algo.

—¿En donde vives?  -Yanli encontró atractiva aquella profunda y artecipilada voz que sonaba molesta y eso no entendía ella ¿porque mierda ese extraño estaba enojado?.

— Eso que importa guapo deseas que te haga compañía esta fria noche.

Jiang Yanli en tono coqueto le sugiere curvando sus labios en una sonrisa ladina, sus dedos empezaron hacer círculos sobre la vestimenta de aquel hombre. Quien se aleja rápidamente de aquella mujer como si fuera un animal venenoso para su cuerpo, el hombre deja salir un sonoro suspiro el vapor se pido apreciar en el lugar sus dorados ojos miran a la pelinegra que tenia la mirada en el cielo, la nieve empezaba a llenar su cabeza de pequeños copos sus mejillas estaban más rojas pero lo que llamo la atención al chico fue aquella mirada vacía y perdida parecía que la chica frente a el solo fuera un cascarón vacío.

Y cuanta verdad había en eso pero el extraño lo sabría por el momento, solo tiene conocimiento que salvo auna mujer de un horrible sujeto y que debía llevarla a casa. Hau Cheng no sabía lo que significa encontrase con Jiang Yanli le cambiaría la miserable vida que llevaba y le daría la esperanza la cual perdió desde hace mucho tiempo.