Confesión

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Había pasado un día desde que Fuutarou estuvo charlando con las quintillizas y su padre sobre las cinco pequeñas de las cual ahora era responsables.

Podríamos decir que pasó eso, cuando en realidad fue una cosa totalmente diferente, ya que lo estuvieron insultando por horas intentando que cayera en cuenta de algo. ¿Pero que carajos era?. Literalmente lo estuvieron jodiendo por horas con eso y al final se fueron las hermanas junto a las niñas decepcionadas a su hogar, es cierto que las cinco hermanas repentinamente empezaron a actuar cariñosas en torno a el desde hace tiempo. Pero el jamás le tomo importancia a esos pensamientos.

Su padre solo lo había estado viendo con decepción desde la mañana y eso ya era demasiado molesto.

— (¿Qué carajos hice?) — Fuutarou pensó — (Primero me salen cinco niñas de la nada, segundo me obligan a hacerme responsable y tercero. ¡Me dicen que estoy ciego y sigo sin entender porque!) — Fuutarou volteó hacia la pizarra un poco aburrido — (Es cierto que ese beso fue inesperado, pero meh. Nada que ver con un posible romance, aunque las demás si han estado actuando muy extrañas entorno a mi, ¿Qué será?)...

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— ¿Que dijiste? No te escuché...

Fuutarou le pregunto a Nino mientras lavaba unos trastes, estaban en la cocina de la cafetería en la que trabajaba el chico a medio tiempo cuando no da tutorías.

— Ya me oíste, dije que me gustas...

Nino respondió seriamente, pero con un gran sonrojo en su rostro.

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— (¿Qué será lo que no estoy entendiendo?, Esa Nino piensa que entiendo sus acertijos)...

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— No me jodas Yotsuba, cada vez estás más olvidadiza con estos temas — Fuutarou dijo un poco frustrado mientras le pasaba unos apuntes — Debes esforzarte más...

— ¿Eh?, ¡E-Esto es demasiado! — Yotsuba exclamó abrumada al ver los apuntes — Es demasiado para mí...

— Lo sé, pero debes esforzarte por tus hermanas y por ti...

— Mooo — Yotsuba se encogió un poco abrumada — Oye, ¿Te parece si comemos un postre que hay en la nevera? Tengo algo de hambre y creo que podré estudiar mejor con el estómago lleno...

— Supongo, no veo el problema...

Yotsuba fue a la cocina por el dichoso postre mientras Fuutarou apartaba un poco los libros y cuadernos para no mancharlos, Yotsuba no tardó mucho y volvió con el postre para dividirlo en dos partes.

— Seguro te gustará. ¡Buen provecho!...

— Buen provecho...

Cada quien empezó a degustar su parte del postre, Fuutarou al no tener gran paladar no comento nada sobre el postre, mientras Yotsuba estaba maravillada por el sabor del postre.

— ¡Mmmm, esto está buenísimo! — Yotsuba exclamó maravillada — ¿Qué te pareció Uesugi-san?...

— Supongo que estuvo bueno, muchas gracias Yotsuba — Fuutarou respondió mientras se limpiaba con una servilleta — ¿Podemos continuar?...

— Espera — Yotsuba se acerco a la mejilla de Fuutarou, que tenía un poco de crema del dichoso postre. Inesperadamente se acerco y le beso allí limpiandole de la crema — Tenías un poco de crema allí...

Eso lo dijo totalmente sonrojada, mientras Fuutarou solo tenía una cara de Poker tras la acción de la peli-naranja.

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Fuutarou... ¡Haste responsable de tus hijos!.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora