El Bebé De Donghyuck [noren]

Capitulo 3: Pidiendo ayuda al cielo y a Donghyuck

Regresar a Corea del Sur con Minhyuck en brazos se sintió como un gran triunfo para Renjun, sin embargo, sabía muy bien que tenía muchas cosas que resolver, primero su jefe ya estaba dejando mensajes, algunos socios y su secretaria habían llamado... Su vida quería seguir su curso pero el no sabía si estaba listo para eso.

-Asumo que debemos llamar a la guardería de nuevo.-fue de lo poco que le dijo Jeno en el avión sin un tono hostil y se sintió algo bien.

-Supongo que si.-soltó una risita mirando al menor nuevamente sobre su pecho.

El viaje se sintió más corto esta vez, tal vez porque se la pasaron durmiendo en gran parte de el, porque habían muchas cosas pasando por sus cabezas que sabían debían resolver en cuanto aterrizaran. Cuando llegaron a Corea del Sur era muy temprano en la mañana por eso Renjun no podía creer que ya debía comenzar a lidiar con problemas—mejor conocido como su madre—a esa hora.

-¿Qué pasa?-pregunto Jeno cuando se detuvo.

-Mama está en Corea.-susurró mirando su celular.-Esta en el departamento, ¿Estas bien llegando solo? Quiero deshacerme de ella pronto, debemos...

Jeno asintió dándole una mirada.

-Debemos hablar.-completo.-Esta bien, te esperare, tal vez duerma un poco y cuando llegues podemos hablar.

Renjun mordió su labio inferior y los vio tomar un taxi antes de decidir tomar uno para ir a su destino. Lidiar con su madre nunca era algo satisfactorio, antes, cuando era joven e ingenuo tenía una buena relación con ella, pero luego del divorcio cuando tuvo que ir a tratarse su terapeuta le había hecho saber que vivía en una completa manipulación. Renjun jamás le iba a perdonar las cosas que hizo por su presión, la de ella y de su padre. A pesar de haber sufrido el divorcio de sus padres, ahora siendo adulto se daba cuenta de que era lo mejor que le había pasado en la vida.

Había cambiado de carrera, gustos, a su novio, todo por influencia de ellos, lo único real que siempre tuvo fue su amistad con Donghyuck porque incluso con Jeno las cosas se volvieron tensas luego de terminar.

Cómo suponía la mujer estaba ahí para hablarle de su padre, al parecer se iba a casar, nuevamente, y ella necesitaba despotricarlo antes de rechazar o probablemente ignorar la invitación de boda. La escuchó un buen rato pero luego por su cabeza solo pasaban tres cosas; Jeno, Minhyuck y su empleo. No sabía que rayos iba a hacer, prácticamente había aceptado ser padre así que ahora debía lidiar con eso, vivir con eso, encontrar una solución para eso...

Soltó un suspiro cerrando los ojos.

-Mamá, debo irme.

La mujer dejó de caminar de un lado a otro con su gran copa de vino a la que solo le quedaba un poco y lo observó con incredulidad.

-¿En serio volviste con Lee?

Rodó los ojos apartando la mirada.

-No volvimos.-lamentablemente.-Solo tenemos a Minhyuck.