MAKE UP FOR LOST TIME | ❝nunca te lo dije pero me estaba enamorando❞
donde una persona que Camryn dejó
atrás se reencuentra con ella
nuevamente.
o
donde una llama de sentimientos
curiosos se enciende en el corazón d...
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𝒞𝐇𝐀𝐏𝐓𝐄𝐑 𝒯𝐖𝐎 ₊ 🂾 ୧﹕▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀▀ 𓅂 ⋆
Una de las ventajas de venir de una familia numerosa, es que tienes parientes que te conocen que son de absolutamente todas partes.
Camryn, Jesper, Inej y Kaz estaban ahora en el carruaje de la prima segunda de Sokolov, que vivía cerca de Dierholm, no dudó en dejar que su prima utilizara el carruaje.
Jesper e Inej estaban en el exterior del carruaje siguiendo las instrucciones de Camryn para una ruta más corta que ellos para llegar a su casa, estaban siguiendo las instrucciones para tomar la ruta más corta a Ketterdam.
━ Entonces, dijiste que tienes gente en Ketterdam que sabe cómo cruzar el Redil, ¿cómo? ━ preguntó Jesper mientras conducía los caballos por el camino junto a Inej, que prestaba atención a dónde iban y a la información que Camryn había anotado en un papel que le había dado.
━ La gente de Ketterdam solía hacer negocios con mi padre, para que les ayudara a cruzar la sombra a cambio de una buena cantidad de dinero ━ Dijo Camryn encogiéndose de hombros ━ Y dijo que conocía a un hombre que sabía cruzar la urdimbre.
━ ¿Están seguros? ━ Preguntó Inej volviéndose a mirar hacia el carruaje, mirando a los ojos de Camryn.
Kaz, en cambio, no lanzaba miradas a Sokolov, evitaba constantemente mirarla y, cuando lo hacía, era de reojo cuando ella estaba distraída.
Fue un viaje largo, debió durar unas cuantas horas en las que Jesper sólo se detuvo cuando la noche se hizo presente casi por completo en el cielo, que ahora era violeta anunciando que en pocas horas caería la noche, por lo que los cuatro pudieron descansar y tomar aire al menos unos minutos.
Camryn se acurrucó en su propio abrigo de pieles, el asiento del carruaje era lo suficientemente grande como para que la chica pudiera tumbarse sin tener que encogerse, pero prefirió permanecer sentada.
Ninguno de los dos estaba completamente seguro de los sentimientos que les invadían cuando estaban juntos, si estaban al menos un poco contentos, tristes o enfadados, era ciertamente confuso ya que, de dos personas que eran las más importantes en la vida del otro, parecían haberse convertido en extraños que constantemente querían darse un puñetazo en la cara, y se empeñaban en dejar ese sentimiento a la vista.
Kaz debería haberse quedado al menos un minuto mirando ese rostro familiar, sin embargo, ahora se cuestionaba si realmente la conocía, vagando en sus propias ensoñaciones, y en recuerdos que debería haber enterrado con la granja que abandonó hace años, pero simplemente no podía, los recuerdos formaban parte de él, de alguna manera, colaboraban para que fuera como era ahora. Eran una parte de él. Ella, era una parte de él, la parte que tanto deseaba poder dejar ir, pero no podía.
