Capítulo 30: Mi héroe.

3.4K 334 39
                                    

Al día siguiente te levantaste con un dolor de cabeza muy intenso y fatiga. Te costó horrores levantarte de la cama, y bajaste por las escaleras casi sin poder moverte del todo. Tu madre se fijó en esto y empezó a preocuparse.

"(Tu nombre), ¿estás bien? Te ves cansada" Tú le mandaste una sonrisa cansada mientras te sentabas en la silla.

"No te preocupes, mamá. No creo que sea nada" Miraste la picadura y viste que la inflamación había crecido. Notaste un pinchazo de nerviosismo en el estómago. Ni siquiera tú estabas segura de estar bien.

El resto del día apenas pudiste mantener los ojos abiertos, a pesar de que habías dormido las horaas suficientes para una chica de tu edad. Notabas que tu temperatura corporal era muy alta y el dolor de cabeza solo había enpeorado, pero te negaste a mostrarlo.

Lo curioso fue que esa noche no dormiste en absoluto.

Fuiste al instituto sin que tu madre notase el cansancio extremo que estabas sintiendo. (Mejor amiga) se percató de tu estado, y las ojeras que habían bajo tus ojos. Sin embargo, tú seguías negando toda preocupación.

Law también se dio cuenta, gracias al ser observador que era, por tu forma de moverte, comportarte y actuar. Después de clase te mandó quedarte. Ni siquiera fuiste capaz de recoger las cosas de tu mesa, y eso solo preocupó más a Law.

"(Tu nombre)-ya, se ve claramente que no estás bien. Enséñame tu brazo" Con gran esfuerzo lograste mostrarle la picadura de tu antebrazo, que a estas alturas ya estaba formando una gran marca roja en el brazo, además de un gran bulto. Law frunció el ceño, recogió tus cosas de la mesa y te cogió en brazos. No te quejaste dado que apenas podías mantener la consciencia. Viste como te llevaba a la sala de profesores. Allí estaba tu tutora, y su expresión cambió a una preocupada al verte como estabas.

"Dios mío, ¿qué le ocurre?" Se acercó inmediatamente a tí, para verte mejor.

"No se encuentra nada bien, y creo que es causa de esto" Law le enseñó la picadura y tu profesora de música se llevó las manos a la boca. "Voy a llevara al hospital. Di a los alumnos con los que tengo clase ahora que me ha surgido una emergencia y me he ido. También llama a su madre para hacerle saber lo que le ocurre. Si se pone histérica, cálmala. Haré todo lo posible por ayudarla" Con eso salió de la sala corriendo y perdiste el conocimiento por completo.

POV de Law.

Llevé a (tu nombre) al garaje y la puse en el asiento del copiloto, bien asegurada por el cinturón, pero había perdido la conciencia. Me metí en el coche y conducí lo más rápido que pude al hospital. Dados los síntomas, tenía una pequeña idea de lo que podía ser, pero no estaba completamente seguro. Cuando llegué, corrí por los pasillos hasta llegar a mi consulta y la tumbé en la camilla inmediatamente. Hacía tiempo que no sentía mi corazón latir tan rápido. Incluso me costó hacerle una analítica con las manos temblorosas. Esperé, con la tensión construida en el cuerpo, a tener los resultados. Después de una hora llegaron y los observé incrédulo. No puede ser...

Entró la señora (tu apellido) en mi consulta, con una expresión terriblemente preocupada que solo empeoró cuando vio a su hija en cama.

"¿Qué a pasado?" Preguntó con lágrimas en los ojos. Seguí mirando el diagnóstico con expresión seria.

"Me temo que su hija padece Tripanosomiasis africana, más conocida como enfermedad del sueño. ¿Desde cuando presenta síntomas?" Su madre se quedó pensatva un momento.

"El domingo por la mañana actuaba de forma cansada y fatigada. Además, anoche no durmió" Asentí y miré a (tu nombre).

"Creo que la transmisión pudo ocurrir en el zoo. Me dijo que notó algo doloroso en el antebrazo y, según tengo entendido, la picadura de una glossina, o mosca tse-tse, es muy dolorosa" Tu madre solo parecía que iba a romper a llorar en cualquier momento.

"¿Es grave? ¿Se va a recuperar?"

"Aforunadamente, su hija tiene el parásito Trypanosoma brucei gambiense. De haberse tratado del parásito rhodesiense, habría sido una probabilidad más grande de muerte. También, es muy afortunada de que los síntomas hayan aparecido tan pronto, ya que suelen tardar meses, o incluso años" Tu madre, sin embargo, no parecia aliviada en absoluto. "No se preocupe, su hija aún se encuentra en la primera etapa de la enfermedad, que es más fácil de tratar. Solo necesito calcular una cantidad adecuada a su organismo de pentamidina" 

"¿Cuánto tardará?" Negué con la cabeza, mi expresión aún seria.

"No lo sé. Pero (tu nombre) deberá estar hospitalizada una temporada... Por favor, necesito que se vaya para seguir haciéndole pruebas"

"Por favor, sálvala" Dijo antes de salir. Asentí sintió y miré a (tu nomber), si cara tan pacífica mientras respiraba tranquilamente. Me puse manos a la obra con las pruebas. Quería salvarla lo antes posible.

Terminé de hacer pruebas por la noche. De hecho, una de mis enfermeras me dijo que debería irme a casa, pero me negué. No tenía intención de dejar a (tu nombre) sola. La verdad es que nunca había tratado un caso como este, pero debía superarlo, para demostrar se un buen doctor... y salvar a (tu nombre). No pensaba dejar morir a otra persona importante nunca más.

Después de un rato buscando, por fin encontré la pentamidina necesaria para ella. No quería usar un medicamento como ese en ella, debido a los efectos secundarios que podría causar, pero era mejor que dejarla morir. Decidí aplicarla por inhalación. Cuando terminé, la miré afectuosamente y acaricié su mejilla con mi pulgar. Empecé a sentir cansancio y no pude evitar apoyar la cabeza en su regazo, mientras todo se iba volviendo negro a medida que cerraba los ojos...

Volviendo con (tu nombre).

Te despertaste y te diste cuenta de que estabas sobre una cama de hospital. Miraste por la ventana y viste que era de día, las 10 aproximadamente. De repente escuchaste un suave ronquido y bajaste la mirada para ver a Law durmiendo adorablemente sobre tu regazo. Te sonrojaste un poco y empezaste a pasar tus dedos por ese pelo tan suave. Pasó media hora y por fin se despertó con un gran bostezo. Se incorporó y vio como le estabas mirando con una sonrisa que él mismo te devolvió. Tus ojos se llenaron de lágrimas a medida que bas recordando lo que había pasado hasta que perdiste la conciencia e intentaste abrazarle, pero te fue imposoble.

Él, sin embargo, cumplió con tu deseo y se acercó a ti, rodeándote con los brazos mientras inhalaba tu aroma. Le devolviste el gesto con mucho afecto, sin poder ocultar las lágrimas. Aunque no se necesitaban palabras en ese momente tan especial, necesitabas agradecerle apropiadamente.

"Law... yo... gracias. De verdad, muchas gracias" Notaste como te abrazó más fuerte.

"No es nada. Parece que te has empeñado en preocuparme siempre. Sabes que no quiero que te pase nada..." Lo dijo con una sonrisa mientras se separó de ti, y aprovechaste para plantar besos por toda su cara.

"De verdad, no sabes lo agradecida que estoy. Law, eres mi héroe" Los ojos de Law se abrieron de la sorpresa. Jamás le habían llamado héroe, y no tenía intención de que le reconocieran como uno, a pesar de su profesión. Se recuperó rápidamente y te dio un beso en la frente.

"Créeme, es lo menos que haría por tí..."

Hola. Siento si algún término o información sobre esta enfermedad es incorrecto o incompleto. He intentado informarme lo mejor posible sobre la enfermedad del sueño, pero aun así puede que me equivoque. De todos modos, ¡gracias por leer!

¿Me guardas un secreto?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora