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Ser atrapado por un estudiante no está bien, mucho peor que ese estudiante sea el chico que lleva dos meses rechazando.

La verdad es que ya había notado a Byun Baekhyun, el chico bajo de la tercera fila hacia la ventana, aquel que a pesar de no querer admitirlo es un chico guapo, inteligente y bien portado.

Cuando escucho su petición, no sabe porqué, pero algo muy dentro de él le hizo querer aceptar, pero sabe que lo único que obtendrá será que el chico se obsesión de más, solo por eso, se negó. La segunda petición no era descabellada, seguía siendo negativo, pero ya besar al chico no era comprometerse a algo, por eso acepto.

Pero después de ese día, no entiende a qué se debe que esta interesado en volver a hacerlo, prestandole más atención del que debería. Descubrió que el menor tiene la mala maña de meter dos dedos a su baca de manera inconsciente, lo que hace que sus pensamientos vuelen de una manera que ni con una de las chicas que a estado tendría. Descubrió que de todas las alumnas con las que a estado, el es más sensualidad y hermoso, que a pesar de las negativas de su parte, no se deja angustiar y sigue adelante, pero lo más preocupante es que a pesar de que no siente nada por el chico y que ya a pasado unos días, no deja de sentir los labios del menor, la inexperiencia y el temblor de su menudo cuerpo. Lo que más le preocupa es que en casa al recordarlo, una erección se hace presente y no debería de ser así.

Un día simplemente ya no lo soporta más, pidiéndole al menor quedarse hasta el final, subiéndolo a una mesa para poder besarlo, sus palmas queman por querer tocar y así lo hace, lo que no se espera es que su deseo crece e intenta frotarse, su cadera se mueve sin aviso y eso es lo que hace que se detenga. Mira al chico, rostro sonrojado, respiración acelerada y labios rojos. Le gusta la imagen.

–No volverá a repetirse - menciona sin mirarlo - tampoco quiero que hables de esto- esta vez si lo mira, pero desearía no haberlo hecho. El chico baja su rostro y asiente, el dolor nublado su rostro, sus labios temblorosos abrazándose a sí mismo, lo que más quiere es abrazarlo y disculparse, pero prefiere tomar sus cosas e irse.

Corre al baño más cercano, porque a pesar de la situación sigue teniendo una erección. Se corre pensando en el beso, en los muslos rellenos del chico y en lo que podría hacerle si no fuese tan cobarde.

Al siguiente día Baekhyun no va a clases, lo que lo hace sentir mucho peor de lo que está. No necesita que se lo digan, él ya lo sabe, por eso, al siguiente día cuando ve al chico lo primero que pasa por su cabeza es hablar con el menor, disculparse y aclarar todo.

Pero no lo intercepta hasta el último periodo, cuando lo ve subir hasta el tercer piso, a la bodega que ya conoce. Se esconde cuando ve que el chico mira a todas partes antes de entrar, pero no lo sigue de inmediato, espera un poco para calmar su corazón y pensar con la cabeza fría. Cuando decide que ya está listo se acerca para abrir la puerta, pero unos leves gemidos lo detienen.
Sus manos sudan y su corazón una vez más se acelera, abre solo un poco para mirar que ocurre y se sorprende de lo que ve. Baekhyun está justo frente a él, mejillas rojas, pantalones abajo hasta las rodillas, una de sus manos masajeando su erección y la otra tanteando su entrada. De repente su boca se seca y sus manos pican por querer tocarlo. El menor ni cuenta se da de que esta siendo observado; decide irse, decide que tiene que actuar rápido, su frustración por el chico se está volviendo en algo sexual y no está pensando con racionalidad, es por eso que cuando llega la hora de darle clases todo su cuerpo tiembla.

–Byun Baekhyun, necesito que te quedes hasta el final, necesito aclarar un término contigo - ve como el chico con aburrimiento vuelve a sentarse.

–Si es por mi falta de ayer, no se preocupe, mamá llamo al director para reportarme enfermo.

Ya una vez todos los alumnos esta fuera se acerca al chico – No es de eso de lo que quiero hablar. Necesito aclarar algo contigo.

–No me interesa aclarar nada con usted, profesor Park. Después de todo no es nuestro titular, no debería de castigarme.

–Puedes al menos mirarme cuando hablas - pide con añoranza.

–Si es sobre... el beso, no se preocupe, no le diré a nadie, no voy a provocarle problemas - susurra el menor, controlando su voz.

–Eso es lo de menos - se frota las manos en el pantalón nervioso y ansioso por lo que quiere hacer – ¿podemos hablar en otro lugar? - pide casi con súplica.

–¿Dónde? Acabemos con esto.

–El almacén del tercer piso, veme allí.

El menor asiente y se despide, jurando ir una vez la última clase se acabe.

Con eso en mente su última clase se hace más larga de lo normal, no se concentra para nada y solo espera la salida de todos.

Cuando está frente a la puerta se queda en blanco, lo que lo impulsa a entrar es un fuerte golpe desde adentro, asustado entra y ve a Baekhyun recogiendo su mochila mientras se frote el brazo.

–¿Estás bien? - pregunta preocupado.

–Estoy bien, se callo esto de aquí y me golpeó, pero es leve yo... - ve como el chico aprieta los labios de repente y suspira en negación - ¿Para que me quería aquí profesor?

–Chanyeol - le urge decir, no quiere que lo trate como al resto - Solo necesito sersiorarme de algo que pueda que cambie mi perspectiva de ver algunas cosas.

–¿Sobre qué? No se que podría comprobar conmigo.

No responde, pero si actúa. Lo toma de la cadera y lo sube a la primera superficie plana que tienen detrás, lo besa desesperado porque a querido hacerlo desde aquella vez, toca sus muslos con gusto y a pesar de que al comienzo el chico se movía para separarse, ahora está abrazándose a él, lo toma de las caderas y lo acerca más, solo para juntar ambas pelvis y comenzar a marcar un paso, siente al chico vibrar en sus brazos, leves jadeos salen de su boca y eso lo anima a frotarse con más intensidad. Toca todo a su alcance, desde sus hombros, hasta el cierre del pantalón del menor. No se detiene y la situación le recuerda lo antes visto, lo que hace que su erección duela.

–Pofesor - gime el chico, pero no le gusta como suena.

–Chanyeol - le anima, antes de comenzar a desabrochar el pantalón del chico.

–Chanyeol - le llama entre jadeos, eso le gusta más - vas muy rápido.

Hace caso omiso a sus palabras, su mente está nublada por querer ver más de cerca, por tocar otros lugares. A pesar de lo que dice el menor, le ayuda levantando las caderas para quitar su pantalón, Chanyeol ya no da más, ve su miembro con hambre y espera poder hacer lo que vio antes. Lo baja del mesón y lo voltea, su redondo trasero se levanta y la boca se le hace agua.

Jamás se imagino en una situación así, jamás se creyó posible el erectarse por un chico, mucho menos por un alumno, pero ahí está, frotando su miembro en el trasero de Baekhyun, el unico chico capas de hacerlo perder la cabeza. Siente el cuerpo del menor temblar y se de cuenta hasta entonces que se a masturbado y ha terminado, al igual que hasta ahora se da cuenta que a estado haciendo presión para tratar de entrar en él.

–Chanyeol, por favor - le ruega el chico.

Lo ve llevar sus manos hacia atrás y separar como invitación, la cual a este punto no puede negar. Con rapidez introduce un dedo en él y lo mueve, no quiere hacerle daño, pero a la vez quiere entrar ya. Después de unos minutos decide que es suficiente y alinea su miembro con la entrada del chico. Entra despacio, atesorando lo cálido, viendo como el menor abre la boca en un gemido silencioso.

Comienza a moverse después de un rato, despacio, con suavidad. Lo toma por las caderas cuando la presión ya no lo deja seguir y golpea con fuerza, observa el movimiento de Baekhyun en su propio miembro, su rostro rojo y boca abierta soltando de vez en cuando gemidos con su nombre. Se corre después de un rato, antes que el menor.

Cuando ya están fuera del salón, terminando de arreglar sus ropas, se arriesga a besar a Baekhyun, jurandole que la próxima vez no será de esta forma.

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Gracias por Leer.

Peticiones peligrosas [ChanBaek]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora