El mundo sin Riley

diez.

La tensión podía sentirse a kilómetros de distancia ahora que Josh había entrado en mi habitación y se encontraba parado donde Lucas estuvo minutos atrás. Él, por el otro lado, no se había movido en lo absoluto y permanecía a mi lado mirando a Josh, quien no apartaba la vista de nosotros.

El tiempo parecía haberse detenido para mí pero sólo habían pasado un par de segundos desde que todo había ocurrido: la pregunta, el beso, Josh... y eso explicaba por qué mi corazón seguía latiendo con la misma intensidad que lo hizo desde que Lucas me había tomado del rostro. Quizá ahora más que nunca que sentía el temor comenzar a invadirme.

—Entonces... ¿simplemente no dirán nada? —Josh balbuceó entre el silencio dejando en claro por su tono lo furioso que realmente estaba.

—Esto no es lo que... —exclamó Lucas aproximándose a Josh.

—Lucas, por favor —supliqué, causando que se detenga, insegura de que lo estaba por hacer o decir.

—No, no —Josh intervino de vuelta—. Déjalo terminar. Quiero saber por qué demonios te está besando otro chico en tu habitación.

Dudo mucho que Josh estuviera poniendo siquiera una pizca de esfuerzo en disimular lo furioso que realmente estaba, tan solo su rostro lo dejaba más que claro y ahora la dureza de sus palabras había logrado que tanto Lucas como yo, tragáramos saliva aún observándolo fijamente frente a nosotros.

—T-Tú lo has dicho —Lucas continuó balbuceando—. Fui yo quien besó a Maya. Vine sin decirle nada y le pedí que me escuchara. Ella no tiene la culpa de esto.

A pesar de que cada una de las palabras que salía de la boca de Lucas era verdad, nada podía lograr que mis latidos se calmaran, no luego de ver a Josh apretar su mandíbula al mismo tiempo que sus puños se cerraban dejando en claro que probablemente no estaba creyendo una sola de sus palabras y honestamente, no lo culpaba. No luego de confesarle lo que había ocurrido entre nosotros.

—Entonces... —gruñó Josh—. Déjame preguntarte esto, ¿por qué demonios estás besando a mi novia?

Solo le bastó a Josh escupir aquellas palabras para peligrosamente acortar distancia con Lucas lo cual provocó que inevitablemente intervenga apresurada para quedar en el medio de ambos, antes de que algo remotamente pudiera ocurrir. Sin embargo, mi rápido movimiento no logró que ambos apartaran sus filosas vistas del otro.

—Ella no es tu novia.

—Eso no cambia el hecho de que está conmigo —escupió Josh, apenas y dejando que Lucas terminara su frase.

—Escucha, te estoy diciendo la verdad, ¿de acuerdo? Fui yo quien la besó así que si tienes un problema con eso, el problema lo tienes conmigo.

—Ah, créeme, esto es contigo.

Soltó Josh para acortar mayor distancia con Lucas, lo suficiente para conseguir empujarlo con fuerza, acción que claramente enfureció a Lucas, quien, sin perder un solo segundo, se aproximó de vuelta a Josh causando que sea yo quien los empujara lejos del otro antes que las cosas se salieran más de control.

Sabía que Josh no se molestaba con facilidad, pero también conocía a Lucas, y ciertamente él era conocido por perder los estribos de la peor manera posible, especialmente cuando alguien lo provocaba como Josh había hecho recién.

—Solo lo diré una vez: más te vale alejarte de Maya de una vez por todas si no quieres que este problema sea más grande de lo que ya lo es —amenazó Josh, apuntando con dureza a Lucas.

—No haré eso solo porque tú me lo pides, ¿de acuerdo? Maya es libre de juntarse con quien ella quiera y eso no debería ser asunto tuyo.

Josh rió—. Es verdad, no debería y créeme, no lo sería si esta fuera la primera vez que te pasas de la raya con ella.