𝑪𝒂𝒑𝒊𝒕𝒖𝒍𝒐 𝑽 - 𝑷𝒓𝒊𝒎𝒆𝒓𝒂 𝒄𝒊𝒕𝒂

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Como dije anteriormente, ambos hemos estado conversando bastante por llamada pero creíamos que era el momento de conocernos en personas, así que decidimos volvernos a ver en el mismo parque que quedamos la vez pasada, esta vez nos veremos casi al anochecer, ya que él termina su trabajo a las 6 de la tarde. En esta ocasión, sí les comenté a mis padres sobre nuestra reunión y me dieron permiso, con la condición de llegar a la casa antes de las 10. Ese día después de salir de la universidad, estaba feliz y nerviosa ya que era consciente de mis sentimientos.

Comencé a arreglarme a las 5 de la tarde porque sabía que me demoraría... Después de una larga y agotadora búsqueda de ropa, encontré un outfit que me hacía ver y sentir bonita, formal, quería darle una buena impresión. Me dirigí al parque, veinte minutos antes y me senté frente al monumento "El Tercer grupo de Osuna" y lo esperé aproximadamente por dos horas y media, me empecé a preocupar y lo llamé varias veces pero no me contestó... En ese momento revisé la hora y estaba a nada de las diez de la noche, la verdad estaba muy decepcionada de no poder verlo por segunda vez, camino a casa escuche que varios carros pasaban, tenía la ilusión de que en uno de esos carros esté él.

Cuando de pronto sentí una cálida mano sobre mis hombros, me giré y... ¡Era él!

Sorprendida le dije: ¿Qué pasó? ¿Por qué estás aquí?

Oliver Peters (abatido me dijo) - Eres Alice verdad, discúlpame estaba en una reunión y no pensé que demoraría mucho.

Sinceramente no sabía qué decir, por un lado pensé que al menos se tomaría la molestia de decirme que estaría ocupado y no hacerme esperar por dos horas en el parque, pero por el otro sabía que su prioridad va a ser el trabajo, aparte no somos nada, no tendría el derecho de enojarme, así que le dije que tranquilo, no te preocupes podemos encontrarnos en otro momento, adiós.

Oliver Peters (confundido dijo) - Eh, está bien, pero ¿No estás enojada?

La verdad quería decir que sí, pero me iba a ver muy inmadura así que le dije: no, no tendría porqué estarlo. Si eso es todo me voy, adiós.

Oliver Peters (desanimado dijo) - Está bien, en serio discúlpame ¿Quieres que te lleve?

Me emocionó que me dijera eso, así que le dije que aceptaba.

Oliver Peters (emocionado dijo) - ¡Listo, sube!

Sinceramente no pensé en las consecuencias de mis palabras, en todo el camino había silencio, fue muy incómodo, yo no quería ser la primera en sacar un tema de conversación. Pero a pesar de todo estaba feliz, porque él había sido el de la idea de llevarme a casa sin yo pedírselo...


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