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Mariana Esposito , asì me llamo. Soy una chica argentina que escapa de su país para refugiarse en una nueva vida, llena de esperanza y colores, asì espero. A la edad de cuatro años fui adoptada porque mis padres se separaron y después murieron. Este fui un golpe bajo para mi. Mi mamà siempre fui mi esperanza, mi amor, mi rincón seguro donde podía estar cuando lo necesitaba. Mi papà siempre fui a mi lado, nunca me dejò, nunca dijo una sola palabra que me podìa lastimar. Los dos me amaron muchisimo y yo a ellos. Mis abuelos no quierian saber nada de tener una niña pequena como yo en casa: me detestaban y asi mi tíos y todos mis familiares. No sè porque me odiaban tanto: pues yo siempre me lo preguntaba y decía: porque tengo que sufrir asi? Porque no puedo tener una vida normal como todos los niños de mi edad? A todas estas preguntas no estaba una respuesta. Siempre lloraba y piensaba que nadie me quieria de verdad, nadie quieria jugar conmigo, yo ero de otro planeta.
Mi Historia: Un dia como los otros, estaba dando un paseo en el parque de mi ciudad favorita, como siempre sola, y me se acercaron dos personas con cara dulce y buena: un hombre y una mujer. La mujer, con una sonrisa en su cara, me dijo: "Hola chiquita como te llamas?" "Me llamo Mariana" dije yo con verguenza. "Que lindo nombre! Bueno, a partir de este momento nosotros somos tua tutores y tienes que venir en nuestra casa". Admito que en un primer momento estaba muy sorpresa, no sabía que decir, simplemente dije que si y seguí a los señores.
