Tu Nunca Podrías Conocerme - HP ©

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Lentamente, Hade abrió los ojos a la relajante oscuridad, como de costumbre. Así que al principio no notó nada diferente. Debe haberse sentido realmente cómodo para no darse cuenta durante 5 minutos completos. No notar el brazo que lo sujetaba con fuerza a un pecho fuerte y musculoso. No notar el cálido y cosquilleante aliento en su rostro. O finalmente mire hacia arriba y vea las hermosas características de Tom. Aquí. Enfrente de él. En su cama. Finalmente, todos los eventos de anoche comenzaron a volver a él. La fiesta había sido divertida. Había vuelto a ver a madre y padre, lo cual era fantástico. Los Dursley estaban muertos. Ante esto, una sonrisa salvaje cruzó sus rasgos. Los había torturado. Tom los había matado, por él. Una cálida sensación se extendió desde el centro de su pecho al pensar en lo de anoche. Cuando Tom lo besó y le dijo que era perfecto. Lo había abrazado toda la noche y se había quedado como había prometido. Tom no lo juzgó ni le temió. ¡Y eso nunca había sucedido antes! Todo el mundo le tuvo miedo eventualmente. Pronto, la cálida sensación se volvió fría y amarga. ¿Qué pensaría el otro? ¿Empezarían a temerle también a él? "Hade, estás pensando demasiado profundamente para tan temprano en la mañana. Ni siquiera hemos desayunado todavía."

Tom se despertó en una relajante oscuridad. Estaba sorprendido, pero rápidamente se dio cuenta de que no debería estarlo. No cuando Hadrian estaba involucrado. Hadrian, que actualmente se aferraba a él como si pensara que desaparecería en cualquier segundo, con el ceño fruncido. "Hade, estás pensando demasiado profundamente para tan temprano en la mañana. Ni siquiera hemos desayunado todavía." Un largo suspiro y un asentimiento fue su respuesta, antes de que Hadrian lo mirara a los ojos y le diera una hermosa y cegadora sonrisa. Voldemort se adelantó y rápidamente capturó sus labios, soltándolos solo cuando se estaban quedando sin aliento. Aturdido, Hade parpadeó un par de veces antes de mirarlo. "¿Para que era eso?" preguntó. Tom miró profundamente a los ojos de Hadrian y, por primera vez en mucho tiempo, sonrió. "Porque ahora puedo", fue todo lo que dijo. Y esa sonrisa estaba de vuelta. Las posesivas tendencias de Tom asomaron su cabeza con una venganza, y mientras miraba a Hadrian, supo que nunca dejaría que nada lo apartara de él.

Hade miró a Tom y sonrió, sabiendo exactamente lo que estaba pensando. "Tu principal problema es Dumbledore." Se levantó de un salto, tomó algo de ropa y entró al baño. En el segundo en que cerró la puerta, todos sus pensamientos sobre lo que pensarían los demás volvieron a llover. Era gracioso cómo Voldemort podía hacerle olvidar sus preocupaciones, cuando solía ser la causa de ellas. Sacudiendo la cabeza para aclarar sus pensamientos, se lavó la cara y se puso su nuevo atuendo. Pantalón de piel rojo oscuro y deportivas negras. Maldita sea, se había olvidado de una camisa. Caminando de regreso, se detuvo en seco. Tom estaba parado allí, en nada más que boxers. Sí, esta fue una mejora masiva para el rostro de la serpiente. Hade parpadeó y se volvió, agarró una camisa negra y se la puso. Cuando miró a su alrededor, Tom estaba vestido y de pie en la puerta. "¿Listo para ir?"

Tom pudo ver instantáneamente la máscara en blanco caer sobre el rostro de Hadrian. y frunció el ceño. El no quería que Hade se escondiera de él. "No me excluyas. Estás preocupado, ¿qué pasa?" Hade suspiró y lo miró. Tom solo esperó. "¿Qué pensarán los demás de mí? Después de ver lo que soy". Se quedó atrás y Voldemort se dio cuenta de lo que había preocupado tanto a su Hadrian. "Narcissa te ve como un segundo hijo. Draco ni siquiera lo sabe. Y lo más probable es que Severus se sienta intrigado. Todos querrán respuestas, pero no te rechazarán." Ambos ignoraron el hecho de que Lucius muy bien podía reaccionar mal.

Hadrian no dijo nada. Simplemente asintió y bajó las escaleras. Él podría hacer esto.