Volumen I

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《Mondstadt》
Especial de la Revista de Geografía de Teyvat - El viaje de Alice en Mondstadt

Valle Dadaupa

Las tres tribus Hilichurl ubicadas en este valle están densamente pobladas. ¿Qué pasaría si construyésemos una enorme celda giratoria en forma de bola en el centro del valle y tirásemos dentro a todos los Hilichurls? De esa manera, podríamos generar suficiente energía para alimentar todas las fábricas de Mondstadt durante al menos cinco años. Si damos un paso más allá y molemos los Hilichurls que son demasiado viejos o demasiado débiles como condimento para alimentos y se los damos a los más fuertes, ¡podríamos construir una máquina de movimiento perpetuo que podría soportar una fábrica tan grande como Snezhnaya!
Me parece totalmente factible.
Pero cuando le conté esta idea a la señorita Lisa, me miró y reflexionó en silencio durante mucho tiempo. Luego cambió de tema con sutileza.

Acantilado Estrellado

El Arconte Anemo es demasiado indisciplinado para mí. Si yo fuera un dios, no habría permitido que mi reino estuviera tan desorganizado. Con suficientes bombas colocadas en la posición adecuada, incluso el gigantesco Acantilado Estrellado se desmoronaría en un segundo. Con un terreno más plano, Mondstadt estaría mucho mejor organizado. Pero ese astuto Capitán de Caballería rechazó mi propuesta nada más escucharla. Incluso me pidió que me alejara del Acantilado Estrellado.

Levantamiento

Este es uno de los pocos lugares en todo Mondstadt con un terreno algo más llano. En el centro hay un gran roble, y se dice que Vennessa ascendió allí. Busqué por todo el árbol durante mucho tiempo, pero no encontré ningún dispositivo de lanzamiento.
Agarré algunos Hilichurls cercanos para poner a prueba mi teoría. Lamentablemente, la distancia de vuelo más larga fue hasta las cabañas de cazadores cerca de la Aldea Aguaclara. Qué decepción.

Costa del Halcón

Mi experimento fallido causó un gran revuelo en la Aldea Aguaclara, por lo que la señorita Jean de los Caballeros de Favonius ordenó que alguien me vigilara. Lo único que pude hacer durante todo el día fue pasear por la Costa del Halcón. Es un lugar tan aburrido. ¡Esas estúpidas águilas que flotan en el cielo y esos Slimes Anemo hinchados son muy molestos! ¡Y lo peor de todo es que no podía hacer nada para remediarlo!
Por otro lado, la Caballera Exploradora a la que ordenaron que me vigilara se divirtió bastante con los niños.

Bosque Susurrante

Otro bosque más de Mondstadt. Esa Caballera Exploradora llamada Amber parecía conocerse bien el camino por este lugar. El juguete explosivo que llevaba consigo me llamó la atención. Con algunos ajustes, puedo convertirlo fácilmente en algo que podría hacer que este bosque e incluso las montañas cercanas se conviertan en cenizas.
Mi propuesta pareció asustarla. Pero yo creo que la idea de un peluche explosivo es brillante.
Lo probaré sin falta la próxima vez.

Cañón Coronabrillante

Finalmente me libré de esa acosadora de los Caballeros de Favonius. Este valle que encontré en la costa noreste del Lago de Sidra todavía está protegido por unos antiguos mecanismos, pero los soldados responsables de defender el paso para el Rey de la Tempestad no estaban por ninguna parte. Lo único que sobrevivió al viento del tiempo fueron los Hilichurls poco inteligentes y unos silenciosos guardias mecánicos.
Mi experimento de controlar Guardianes de las Ruinas con Hilichurls también falló. El guardían se rompió en pedazos y... Bueno, mejor no hablemos del Hilichurl atado al guardián. Ah, y tampoco de la mitad de las ruinas, que también fueron destruidas.

Guarida de Stormterror

El Cañón Coronabrillante conduce a las gigantescas ruinas de la antigua ciudad construida por el cruel Decarabian, Rey de la Tempestad. La ciudad fue reconstruida en forma de anillo. Al parecer, a cada residente se le asignó su propio lugar entre el anillo interior y exterior. Justo en el centro de la ciudad estaba la alta torre donde residía el Rey.
Las ruinas del cruel monarca, que una vez intentó controlar la vida de su gente, ahora no son más que un lugar desierto.
Volé por los aires algunos pasadizos para que la gente pudiera subir a la torre más fácilmente. Me gusta como ha quedado, porque las ruinas parecen más antiguas ahora.

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