prólogo; despertar

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ㅤㅤEl chico de anteojos se levantó de su cama y reviso su celular; 7:20 a.m, era una hora perfecta para bañarse y hacer su típica rutina diaria. Entonces se bañó y posteriormente se puso su uniforme. Este constaba de un pantalón de poliéster color negro, unas zapatillas de su preferencia, y una camiseta blanca con una corbata negra, aunque el chico solía cubrir ambas ──camiseta y corbata── con una sudadera de una talla mayor a la que a él le correspondía. Era color rojo carmesí con los hilos del gorro de un color negro.
ㅤㅤLuego de eso se miro al espejo, ordenando un poco su pelo negro un tanto rizado, y largo hasta la parte baja de su cuello; despreciando sus ojeras y heridas como todas las mañanas, junto con sus pecas las cuales odiaba porque se notaban demasiado debido a su piel pálida, característica que también odiaba de su cuerpo.
ㅤㅤMientras cubría sus ojos cansados con unos lentes redondos y negros, miró su cuerpo flaco y sus piernas delgadas que eran cubiertas, odiándolos también. Finalmente, agarró su bolso y salió de la casa sin desayunar, como de costumbre.

ㅤㅤSu madre entraba al trabajo muy temprano, poco antes de que saliera el sol, y regresaba justo cuando el ya estaba durmiendo. En cambio su padre entraba al trabajo aproximadamente una hora antes que su mujer, y se suponía que salia a las 7 pm, aunque comunmente regresaba a la 1 am o ──incluso── a las 8 am del otro día. El joven sabía esto ya que se lo topaba mientras se arreglaba para ir a la escuela, y no era nada agradable; se lo encontraba con ese típico olor a perfume de mujer dulce mezclado con alcohol y cigarrillo, mezcla que si no hubiera estado acostumbrado lo haría vomitar; la ropa desarreglada y con marcas de labial en algunas zonas de su cuerpo que resaltaban a la vista por su intenso color. Muchas veces cuando su padre llegaba le dedicaba unas simples palabras, pero que lo dejaban con una sensación desagradable.

ㅤㅤ──Hola campeón ──decía, para luego comenzar a excusarse──. Verás, tuve que quedarme unas horas extras y bueno- ──pero era interrumpido por su hijo, quien ya sabía lo que pasaba.
ㅤㅤ──Si para eso viniste, te hubieras quedado en el trabajo. No regresaste anoche y tu horario de comienzo del trabajo fue hace horas ya ──mirándolo con cara de pocos amigos, continuó──. Vete a dormir, mamá no durmió por estar preocupada.

ㅤㅤSu padre corría del lugar al baño, Shino sabía que no iba a llorar y mucho menos arrepentirse de lo que había hecho la noche anterior; iba a vomitar.
ㅤㅤHarto de la actitud de siempre de su padre salía de su casa dando un portazo, deseando llegar al colegio y que nadie lo viera, porque no estaba de humor y sentía que iba a matar a la primera persona que le dijera una palabra.

ㅤㅤPero hoy no era uno de esos días, parecía que su padre había llegado antes de la hora en la que él se alistaba y agradecía mentalmente eso, hoy era uno de esos días en los que quería hablar con Shikamaru.
ㅤㅤShikamaru era su único amigo, y pese a que él tuviera más amigos, esto no significaba que no iría a pasar tiempo con el Aburame si este se sentía solo. Juntos hablaban de gustos musicales, sobre sus animales favoritos, fantasía y demás cosas que tuvieran en común, no es que le gustara abrirse a la gente de todos modos.

ㅤㅤSegún lo que había escuchado de su amigo, su familia era bastante tranquila; su padre era igual que su hijo, y aunque su madre no tanto, eran una familia feliz y, según el chico de anteojos oscuros, era la mejor familia que podía conocer.

ㅤㅤPensando en todo esto, llegó al colegio. Era algo antiguo, un par de grietas se veían a los lados junto con las firmas de algunos alumnos rebeldes que escribían su nombre allí, y ──tal vez── había incluso algún insulto hacia alguno de los profesores.
ㅤㅤMiró con desinterés una de las paredes y pudo leer de lejos la cantidad de barbaridades que le deseaban al profesor de historia, riendo mentalmente.

ESTIGMA.⸙ (ⁿᵃʳᵘᵗᵒ)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora