holding on

t h i r t y

Por mucho que a Alexandra le encantara ver el lado blando de Tom, sentía debilidad por la parte de él que vivía para impresionar a sus compañeros.

"¿Qué Tom te gusta más?" Preguntó Melissa, notando que Alexandra miraba fijamente a Tom parado frente a la clase demostrando cómo realizar correctamente los hechizos que habían estado aprendiendo en su clase de encantamientos de nivel N.E.W.T.

"¿Qué quieres decir?" Preguntó Alexandra, sin apartar la mirada de Tom.

"Bueno, hay Tom modo intimidación de antes de que empezaran a salir, aunque nunca te intimidó realmente, ¿verdad?" Melissa preguntó, perdiendo el hilo de sus pensamientos por un momento antes de continuar. "Luego está Tom emocionalmente confundido desde el principio de su relación, y Tom confiado. Un chico, tres personalidades muy diferentes".

"No creo que haya cambiado mucho. Creo que todavía es todas esas cosas hoy", se encogió de hombros Alexandra. "Solo depende de con quién esté. Por ejemplo, todavía actúa intimidando con otros estudiantes, todavía se confunde a veces cuando estamos solos, y actúa confiado cuando los cuatro estamos juntos o cuando está cerca de un profesor como él está ahora mismo".

"¿Y no prefieres una actitud sobre las otras?" Preguntó Melissa, levantando una ceja.

"Supongo que reacciono a ellos de manera diferente en cierto sentido, pero eso no significa necesariamente que prefiera uno sobre el otro".

"¿Cómo es eso?"

"Bueno, Tom confiado me hace querer presumir ante el mundo de que es mi novio, Tom confundido me da mariposas y me da ganas de abrazarlo hasta la muerte, y no voy a hablar sobre lo que me hace querer intimidar a Tom.", Explicó Alexandra, reclinándose en su silla.

"Veo tu punto", se rió Melissa. "Escuché que te pidió que vivieras con él después de la graduación. Supongo que estuviste de acuerdo".

"Lo hice", sonrió Alexandra. "Es una verdadera historia de amor, ¿no? Dos huérfanos emocionalmente dañados encuentran un hogar el uno en el otro".

"Alguien debería escribir un libro sobre ustedes dos", bromeó Melissa. "Ustedes dos son un desastre, sin embargo. La trama estaría por todos lados. También tendría que estar escrito en tercera persona ya que ambos definitivamente serían considerados narradores poco confiables, y-"

"Lo entiendo," interrumpió Alexandra.

"¿De qué están discutiendo ustedes dos?" Tom preguntó, acercándose a las chicas cuando fueron despedidas.

"Cuánto dinero ganaría una persona escribiendo un libro sobre sus vidas", admitió Melissa.

"Desafortunadamente, algunos de los momentos más fascinantes de nuestras vidas han ocurrido en privado, por lo que su libro sería bastante aburrido", dijo Tom.

"Para eso es mi imaginación", sonrió Melissa, alejándose de los dos para llegar a su próxima clase.

"Tenemos un descanso antes de las pociones", dijo Alexandra, uniendo su mano con la de Tom. "¿Quieres hacer una parada en el lago?"

"Le prometí a Avery que lo ayudaría con su maldito ensayo de Transformaciones", mintió Tom.

"¿Desde cuándo eres tan generoso? Lo has estado ayudando con su trabajo durante semanas", dijo Alexandra, aparentemente despreocupada. "Eres un buen amigo por ayudarlo. Te veré en pociones."

Tom la besó, dejando que el momento perdurara un poco antes de alejarse. "Te amo."

"Yo también te amo."

Tom se maldijo a sí mismo mientras se alejaba, sin querer nada más que darse la vuelta y volver con ella. Sin embargo, sabía que no podía.

Mientras caminaba, no pudo evitar notar a alguien a quien no había notado en mucho tiempo. Dumbledore estaba parado en su puerta, sin decir nada mientras veía a Tom pasar a su lado con la misma sonrisa de siempre en su rostro y un brillo en sus ojos.