Parte 3

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Cuando se asoma, ve a Rubí sentada en su cama. Maca se apoya en el marco de la puerta y la admira por unos segundos. El perfil de su cara pensativa, perdida en quién sabe qué; su cabello ondulado, el cual se veía más claro y brillante al ser bañados por los rayos del sol; el aroma de ella, aroma que en este momento también la envolvía en un cálido abrazo como si estuviera dándole la bienvenida. Después de tantos días sin verla (en persona), está segura de que en este momento se acaba de enamorar otra vez. Es tan hermosa... Ok Maca, no seas rara.

La joven tose para llamar la atención de su polola. Al verla saltar, aparece una pequeña sonrisa en su rostro, "perdón, no te quería asustar".

Rubí sabía que ella iba a venir. Su hermana le había contado y estaba esperando la visita con ansias. Desde el día que la vio en el hospital y la historia que le contó, sintió una conexión con la otra mujer.

Controlando su energía para pasar piola, la saluda. "Hola, no pasa nada. ¿Y tú? ¿Cómo estai? ¿Qué te trae por aquí?".

El tono de Rubí la tranquiliza y comienza a sentirse más cómoda. Entra a la pieza y se sienta al pie de la otra cama. "Nada. O sea, quería verte, saber cómo estabas. ¿Cómo te sientes? Asumo que aún no recuerdas nada". Al darse cuenta de lo último que dijo se reta internamente, especialmente cuando ve el rostro de la otra mujer.

Al escuchar sobre el tema de la pérdida de memoria, su sonrisa se cae, baja la mirada y responde con un volumen muy despacio "no".

Maca se siente culpable. Es difícil para ella, pero para Rubí debe ser mucho peor el haber perdido tantos meses. "Perdón, perdón. Eso fue... perdón. De verdad no quise...".

"No, tranqui. Estai en todo tu derecho", la interrumpe, "Erai... erí mi amiga y yo te olvidé. De hecho, cuando volví del hospital había un cartel en a entrada para mí de bienvenida y otros adornos. Así como en toda la recepción, muy bonito. Y también en el living. La Esme me contó que todos habían ayudado a decorar. Igual me hizo pensar... qué tanto han cambiado las cosas desde ese día de la fiesta porque con suerte cacho a la mitad de los que viven acá. Ni siquiera me acuerdo de todos los de la fiesta... solo a ti, al Miguel y al Julián. Y los otros dos son solo porque la Esme no paraba de hablar del Juli", dice este último nombre imitando el tono de su hermana. "Súper agradecía, pero igual me da pena".

Maca agradece su compresión y el hecho de que no recuerda lo que pasó con Miguel. No es que se pondría celosa, pero sí se siente un poco insegura. Nunca pudo entender cómo Rubí se enamoró de ella, todo seguía siendo un sueño, sobre todo en Cajón del Maipo. Si llegase a pasar algo con ese período de sus recuerdos... Maca no quiere ni pensar en ello, la situación ya es lo suficientemente complicada.

Las dos jóvenes se quedan en silencio mirando a la otra. Maca no sabía qué hacer para animar a Rubí y esta, de vez en cuando, bajaba la mirada sintiendo un poquito de vergüenza. No está acostumbrada a tener contacto visual que se sienta tan íntimo.

De repente, tiene una idea y mira a su amiga con nervios. "Tú...", empieza un poco tímida, "¿tú me podí contar un poco de lo que pasó? Qué hicimos, recuerdos graciosos, recuerdos no tan buenos. Igual me gustaría saber un poco de lo que perdí. Y tal vez así me vuelva la memoria".

Maca le sonríe y acepta, dejando un par de detalles fuera. Le cuenta de su historia, de la historia de ambas, de lo que sabe de ella, y de chismes y momentos divertidos en el edificio. Por un momento se olvidan de todos los problemas. Pasaron una buena tarde, riéndose y con Rubí preguntando sobre ciertos detalles, algunos que se podían responder, otros no.

La joven Cárdenas se sentía agradecida por la compañía de su amiga. Disfrutó mucho de la tarde que pasaron juntas y el tan solo estar cerca de ella le producía mucha alegría; lo cual hacía que se preguntara, si junto a los meses, también olvidó a su mejor amiga.

"Tu papá de verdad está loco, aún recuerdo cuando tiro mi celular al jacuzzi", dice recordando molesta recordando la fiesta. Su cara se pone seria y le agarra las manos a Maca "y no puedo creer que hayas pasado por todo eso. Quiero que sepai que mi familia, especialmente yo, vamos a estar aquí para ti. Sé que el accidente borró todos mis recuerdos, pero aún así se que erí lo mejor que me ha pasado en esta cuarentena".

Rubí abraza a su amiga al ver sus ojos llorosos, dándole el tiempo suficiente para evitarlo antes de que sus brazos la rodeen y mantiene una presión leve para que ella pueda alejarse cuando no se sienta cómoda. Maca se demora en responder el abrazo, pero, una vez que logra comprender lo que está pasando, posa sus manos en la parte baja de la espalda de su polola y disfruta del calor que su cuerpo le entrega. Cierra sus ojos, inhala y pide con todas sus fuerzas no derrumbarse en este momento.

Cuando escuchan la puerta de la entrada abrirse, seguida por dos voces, las jóvenes se separan lentamente. Nuevamente hacen contacto visual, cuestión que Rubí siente que es parte de su dinámica con lo seguido que les pasa, y se sonríen. Pequeñas sonrisas llenas de cariño.

Esmeralda entra a la pieza y las saluda con esa gran energía que tiene constantemente "hi sis. Hola Maqui. ¿Cómo lo pasaron?".

Las otras dos mujeres se vuelven a mirar y se sonríen de nuevo. Maca se levanta y le da un abrazo a la otra Cárdenas. "Muy bien", baja la voz y le susurra, "muchas gracias por todo el apoyo". Toma unos pasos hacia atrás y avisa "bueno, yo creo que ya es hora de que me vaya a mi casa. Tengo que ver a la Jose. Será la hermana pequeña, pero se preocupa harto".

Antes de dejar la residencia de las Cárdenas, saluda a Ágata y aprovecha de hablar un poco con ella. Desde que Rubí le contó a su mamá que ella era lesbiana, Ágata ha sido el apoyo paternal que nunca tuvo y de vez en cuando necesita que le de un poco de seguridad nuevamente.

Y cuando se sube al ascensor, por primera vez en un par de semanas, suspira sintiendo satisfacción y felicidad. Fue un buen día.


N/A: Perdón por la demora. A todos los que leen se lo agradezco. De nuevo, no soy muy creativa y tengo que trabajar, así que puede que se actualice muy lento. Pero sí o sí lo termino. Gracias de nuevo.

No Me Olvides (rubirena)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora