Esta es la guerra "hermana" (#2)

Kelly

Hoy era el día, 23 de diciembre, mi día preferido, ya que mi padre hacía una fiesta con mucha gente rica y era mi momento de brillar con mi ropa y mi belleza.

Me estaba terminando de poner mi bonito vestido azul marino con diamantes blancos y brillantes y mi peinado favorito, un moño con un coletero brillante, cuando unos ruidos de la habitación contigua, la habitación de Rose, atrajeron mi atención.

Abrí la puerta sin llamar.

- Rose, ¿Tienes que hacer tanto ruido para ponerte un vestido? - le dije cuando estaba pasaba por la puerta de su habitación.

Me quedé absolutamente horrorizada, toda la ropa que le habían comprado mis padres para que eligiera para la fiesta de esta noche ¡Estaba esparcida por todo el suelo de la habitación!

- ¡¿Pero Rose qué haces, esa ropa es de diseñador?! - dije gritando

- Esta ropa es muy de pija, no es mi estilo hermana... - empezó a decir susurrando Rose mientras sacaba una camiseta fea y un pantalón corto aun mas feo. - Déjame hermana, pero que pesada, normal que nadie te haga caso.

A mi casi se me sabían llamas de los ojos, de la rabia que estaba acumulado casi se sale, pero me tranquilicé y mi vista se distrajo con la ropa que se acababa de poner.

- Rose, ¡no te puedes poner eso! ¿Qué tipo de gusto tienes?- le dije.

- Si puedo ponerme esto, no soy una pija tonta como tu.- dijo Rose

- ¡Ag! Pero si eso no se ha lavado ¡QUÉ ES UNA FIESTA DE GALA, POR FAVOR!

- Pero qué está pasando aquí - dijo furioso mi padre entrando en la habitación.

- Pues que Kelly me quiere manipular para ponerme una cosa que no quiero - mintió descaradamente Rose lloriqueando.

- Eso no es cierto papi, ella se quiere poner una camiseta y un pantalón feos y sucios. - dije.

Mi padre se quedó mirando a Rose asombrado, pero al ver que la mentirosa estaba lloriqueando le dijo.

- Tranquila Rose, ponte lo que quieras, pero que esté limpio.

Mi padre y yo nos fuimos a la sala, dejando a Rose poniéndose lo que quería, mi padre se giró hacia mí y me dijo.

- No seas celosa Kelly, deja a Rose tranquila, no la manipules porque sea nueva en casa.

- Pero...... - empecé a decir.

- Nada de peros. - me corto mi padre.

Ag, que ignorantes eran todos ¿No ven que Rose era más falsa que mi ex amiga Rebecca?

Después de media hora estábamos mi padre, mi madre y yo esperando a Rose en la puerta de entrada de nuestra mansión.

De repente vino Rose, con una camisa antigua, ag que asco y una falda que parecía que no se había lavado nunca, ag, y además ¡No pegaba!. Mi padre y mi madre se quedaron tan sorprendidos como yo ¡Pero no le dijeron nada! Alucinante.

Como no teníamos tiempo para que Rose se fuera a cambiar de ropa, ya que los invitados venían dentro de 5 minutos, así que, Rose no pudo subir a cambiarse.

Después de 5 minutos, un compañero de trabajo de mi padre entró por la puerta de entrada y se quedó mirando a Rose perplejo.

Pero qué VERGÜENZA.