Capitulo 40

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Elijah POV:
Alice...

No dejo de pensar en ella, en sus gritos pidiendo ayuda, llamándonos, desesperada, Stefan y Phoebe se quedaran aquí unos días. Algo que no entendemos es porque estaban esos muebles como un obstáculo, la puerta cerrada con llave, y cosas puestas en el medio impidiendo nuestra llegada rápido a ayudarla.  La policía estuvo aquí anoche, y dijeron que hoy volvían por mas detalles  y querían a toda la familia, pero faltaba Maritza.

Klaus: Hay algo que viene molestándome desde ayer -nos dijo mirándonos a los 5- Eso fue planeado con tiempo. Mira esos obstáculos que habían, la puerta cerrada, la oscuridad en la casa.

 Mira esos obstáculos que habían, la puerta cerrada, la oscuridad en la casa

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Phoebe: Los mensajes que ella recibía a veces, ¿creen que sea el?

Kol: No tengo la menor duda que sea el -Stefan esta lejos en su cara se le ve se esta sintiendo culpable-.

Elijah: Pero ¿Cómo diablos Ángel la encontró? Esta bien ella no cambio tantísimo en 2 años pero si tiene cambios a aquella niña de antes.

Stefan: Alguien lo ayudo a encontrarla, pero Alice no tiene enemigos.

Alice POV:

Me senté al lado de una ventana, que afuera estaba llena de hierros, solo servía para que entrara la luz

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Me senté al lado de una ventana, que afuera estaba llena de hierros, solo servía para que entrara la luz. Ángel se fue y me dejo aquí desde ayer, recuerdo la noche antes de que el me secuestrara, mi baile con Stefan, la noche con mis hermanos, como pudimos ayudar a esas fundaciones, y luego como todo cambio en cuestión de horas.

Elijah, Klaus, Stefan, Kol y Phoebe, ellos iban a mi rescate pero no se que paso que no pudieron llegar, si escuche como algo se rompía en la parte de abajo de la casa, pero lo que mas recuerdo y mas me confunde, la voz de Maritza.

Maritza... la mujer que es esposa de mi papa, y se supone que debería velar por nosotros aunque no seamos sus hijos biológicos como Finn y Kol, pero conmigo nunca fue así. Años de maltrato, solo era una niña cuando comenzó con sus maltratos, uno de los que mas recuerdo era yo siendo adolescente, me entro a una bañera llena de hielos porque había llegado tarde a un permiso que me dio, pero era de trabajo.


Me asusto cuando escucho que la puerta se abre de golpe.

Ángel: Muñeca, volví

Su mirada cínica, como si hace pocas horas no acabo de abusar de mi de nuevo, pero tenia curiosidad así que me arme de valor.

Alice: ¿Por qué volver a buscarme?

Ángel: Porque no hacerlo. -me quede viéndolo, no sabia ni siquiera que decirle-. Además te extrañaba, de la manera que escapaste la ultima vez, y como hiciste que me buscaran durante varios meses para meterme preso, no fue bonito.

Alice: Puedes tener a cualquiera Ángel, por favor déjame ir. -Me miro fijamente, una expresión seria que me lleno de escalofríos-.

Ángel: Desde aquel día que terminaste conmigo, te convertiste en mi única obsesión, no me importaban las demás, solo tu, nunca nadie había terminado conmigo, menos diciendo que estaba loco.

Alice: Tenias mucha mujeres detrás de ti en secundaria.

Ángel: ¿Y? Te quería a ti, odiaba que te miraran otros chicos, que fueras amiga de otros, que convivieras con otro.

Alice: Te encontré con otra chica, también me entere de todas las demás... -Se me quedo viendo fijamente-

Ángel: Yo soy hombre, debiste de entenderlo. Además no querías tener sexo conmigo ¿Qué esperabas?

Hubo unos segundos de silencio incomodo.

Alice: ¿Tu y Maritza? ¿Qué son?

Ángel: Ella es mejor amiga de mi mama desde que yo era niño, así que digamos que mi tía.

Ok eso no me lo esperaba, ósea ella ya lo conocía cuando nos vio juntos la primera vez. Ella sabia como el era ya.

Ángel: Bueno me voy, nos vemos en unos días. -Subió comida y agua a la habitación que estaba- Hay cámaras en la habitación así que no te molestes en hacer algo estúpido.

Mi BoxeadorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora