I fell in love unintentionally [Hackyo]

CAPÍTULO 5. Bajo las estrellas.

Me quedo inmóvil pensando en qué demonios diría si Hacker llegaba a despertar, de todos modos el simple hecho de verlo dormir sin que él lo sepa ya es algo bastante turbio, entonces, al intentar justificar mis acciones podría empeorar las cosas.

Espero unos cuantos segundos, a ver si se despierta.

Nada. Profundamente dormido. Sustos que dan gusto.

Salgo de ese lugar lo más rápido que puedo, realmente no me imaginaba explicándole la razón por la cual estaba ahí, observándolo descansar...

Cierro bien la puerta y ahora sí me dirijo hacia mi habitación con el único propósito de dormir, aunque... creo haber visto a alguien verme desde la oscuridad salir de la recámara donde está Hacker...

Dios, espero que no, ¿qué es lo primero que pensarían?, ¿y si ese alguien fue Víctor?

Tal vez solo fue mi imaginación por los nervios, pero de verdad deseo que no haya sido así. Las cosas se pondrían tensas en la Mansión si se llegan a enterar...

Narra Hacker:

Despierto, son las 3 de la mañana. Me había quedado dormido, lo sé porque aún tengo mis tenis puestos.

Me levanto y me siento en el sofá cama en el que estaba. Volteo hacia donde se supone que estarían Raptor y Sparta dormidos, pero no están ahí.

A través de la ventana puedo observar a lo lejos un hermoso lago que en sus aguas reflejaba a la enorme Luna... hace mucho que no veo un paisaje así de hermoso.

Creo que iré allí un rato.

Saco mi teléfono y chamarra que traigo en mi mochila, después abro la puerta con mucho cuidado de no hacer ruido para no despertar a los demás y se diesen cuenta que iba a salir, bajo con cuidado las escaleras y lo primero que observo es a Raptor y Sparta dormidos en el sillón más grande. De todos modos me acerco para verificar, y en efecto, están en su quinto sueño.

Abro la puerta de la Mansión y salgo, el cielo está lleno de estrellas, hace un poco de viento así que me pongo mi chamarra negra e inicio mi camino hacia aquel lago.

Al llegar, me siento en un tronco que hay a la orilla del agua, prendo el móvil y observo algunos mensajes de Mikecrack.exe, Nightmare y Señor X.

Realmente me da pereza leer los mensajes y responderles, así que decido llamarlos. Es casi seguro que los 3 estén despiertos, pendientes a que yo los contactara para informales cómo va la misión.

- Hola Hacker, ¿estás solo? – comenta Mike.exe.
- Hola, sí, lo estoy, sino no los hubiera llamado.
- Vale, cuéntanos, ¿cómo va la misión?
- Va muy bien, la mitad del grupo ya confía en mí, de hecho, ya me dieron alojamiento en su Mansión ¿puedes creerlo?
- Vaya, y yo pensaba que eran menos estúpidos, jaja. – dice Señor X.
- Pobrecito de ti Hacker, tener que estar soportando a esos imbéciles no debe de ser nada sencillo. – comenta Nightmare.
- Pues... te diré, no son tan "malos" como aparentan, Night.
- ¡Qué estupideces dices, Hacker!
- Cálmate Night. – lo regaña Mikecrack.exe. – No te dejes influenciar por ellos, Hacker, ten en cuenta la única razón por la que estás ahí.
- La sé... no te preocupes por eso.
- ¿Y qué hay del tal Mayo? – cuestiona Señor X.
- Oh, pues... e-emm... yo... aún estoy tratando de ser su amigo, solo q-que me es difícil acércame, es como si él provocara raro algo en mí que...
- Hacker... - me interrumpe. Se forma un silencio bastante incómodo y eterno para mí antes de que él diga otra palabra – suenas como si te empezaras a enamorar de Mayo. – me dice en un tono serio.
- ¿Eh?... ¿enamorar? ¿ qué es eso?
- Agh, nada Hacker, nada. – responde el Señor X.
- Es difícil de explicar, Hacker, pero en resumidas cuentas estar enamorado es querer ser dueño de una parte de la otra persona. Es la creencia de que esta persona es tan maravillosa que quieres que sea una parte de tu vida, una parte de ti.
- Nightmare... eso fue muy profundo... pero debo decir que qué joto te escuchaste.
- ¿Cómo me dijiste?... ¡Ven acá pequeño mocoso! – escucho las risas de Mike.exe y el Señor X, seguido de gritos del Señor X e insultos por parte de Night.
- Esta vez sí dejaré que se peleen, la última vez que intenté separarlos fui yo el que terminó más golpeado... – dice Mike.exe.

No puedo evitar reírme, algo que me agrada mucho de ellos es que pueden llegar a ser los mejores villanos y la peor pesadilla de alguien, pero a veces se comportan como si fueran niños pequeños, revelando así las personalidades que esconden tras sus terroríficas apariencias.

- No pensé decir esto, pero creo que ya los extraño, chicos. – confieso.

De repente, el sonido de unas pisadas detrás mía dirigiéndose al lugar donde estoy me hacen cortar rápidamente la llamada, apagar mi celular, tirarlo a un lado mío y voltear para saber quién o qué era lo que se movía hacia mí.

Y entonces, la luz de la Luna me hace ver de quién se trata.

Mayo.