El Fénix [En edición]

CAPÍTULO 1

No estaba en mis cinco sentidos, aún no podía creer que esto estaba pasando, me habría desmayado por el shock si él no me hubiese llamado.

Pose mi mirada en él y de a poco iba bajando para encontrarme con una herida de bala en el pecho. Las lágrimas comenzaron a caer sin control y cada segundo deseaba que esto fuera una maldita pesadilla, una de la cual despertaría en unos minutos.

— Alix, necesito que me escuches — Dice mientras levanta su brazo lentamente para tocar mi rostro. — Es demasiado tarde y necesito decirte algo importante.

— No, no permitiré que mueras así, no lo permitiré — Comencé a tratar de hacer algo para detener el sangrado, pero esta seguía saliendo — Esto no funciona, esto no está funcionando.

Poco a poco me hundí en la desesperación, no podía ver a mi amado morir frente a mí, no lo permitiría, pero nada funcionaba.

— ¡Alix, escúchame! — gritó mientras escupía sangre de la boca. — Tienes que vivir, tienes que ser fuerte y olvidarte de mí.

Sus palabras solo herían mi corazón

— No — negué con la cabeza — Max, no me dejes, no puedes morir. Me prometiste que te quedarías conmigo, dijiste que nos casaríamos y tendríamos una hermosa familia. No puedes dejarme así.

Max solo me dedicó una triste mirada, él estaba en mis piernas y poco a poco su blusa empezó a teñirse de un rojo intenso.

— Lo siento, Mi chica de invierno. No podre cumplir mi promesa, y discúlpame por ser tan egoísta — Su respiración era cada vez más corta — Yo no sería capaz de vivir sin ti, pero sé que tú podrás superarme, disculpa por dejar que seas tú la que sufra.

— No digas nada, espera un poco más, los doctores llegarán pronto. — Estaba desesperada y tomé su mano con fuerza.

Él seguía dedicándome esa mirada tan dulce.

—Te amo tanto. — Max sonrió.

Su sonrisa me lleno de impotencia y rabia.

—¡No seas tan amable! ¡Dime que es lo que sientes en realidad! ¡No trates de hacerte el fuerte! — grité eufórica, yo sabía que solo trataba de hacerme sentir mejor.

Vi como empezaron a brotar lágrimas de sus hermosos ojos cafés.

— No quiero morir, quiero vivir muchos años contigo, quiero despertarme cada mañana y ver tu rostro a mi lado, quiero que me desees los "buenos días", quiero poder acariciar tu barriga y sentir a mi bebe dando pataditas, yo deseo tener una familia contigo. — Tomó un poco de aire para intentar calmarse — Quiero poder decir "Acepto" en el altar y convertirnos en la pareja más feliz del mundo.

Trate de pronunciar palabra, pero la tristeza no me dejaba hablar. Escucharlo rogar por un futuro juntos era tan desgarrador. Y más aún cuando en el fondo sabía que eso no podría ocurrir.

— Prometo buscarte en la próxima vida y así podremos tener nuestro felices por siempre — dice mientras levanta su mano y vuelve a tocar mi rostro — Tu cara es tan hermosa, sonríe para mí... por favor. — Suplica con todas sus fuerzas.

— Yo también te buscaré, en la próxima vida te buscaré y no pararé hasta encontrarte —le dedique una sonrisa, aunque no sé de donde saque las fuerzas para hacerlo. — Lo prometo.

Max paro de llorar y me devolvió la sonrisa

— Lo repetiré por si no lo escuchaste — pronuncia entrecortado — Te amo, Alix.

Eso fue lo último que dijo, fue lo último que escuche. Mi corazón se llenó de ira y solo podía pensar en acabar con la persona que me arrebato al amor de mi vida.