SIGUE EL RITMO.

🏆 CAPITULO 19🏆

"EL ¿OLVIDO?"

Harry comenzaba aburrirse dentro de la sala de espera, hoy sería el día en el que le quitarían las muletas cambiandolas por un pequeño tobillero ajustable. Había terminado con Louis hace 1 semana, y gracias al tobillo lastimado no pudo asistir a la escuela, por lo cual tomaba sus clases en línea. Y eso, a la vez pudo haber sido beneficiario ya que no veía a Louis en los pasillos, o en sus clases, o si simplemente con ella...

Todo había resultado fácil, (no los primeros días) pero sus amigos, los cuales se encargaban de ir todos los días animarlo hacían que sus días fueran menos pesados y deprimentes.

Estaba sentado en la gran sala esperando por su hermana, la cita sería dentro de 10 minutos, y Gemma había prometido estar ahí pero no había ningún rastro de ella.

Movía su pie insistente mientras veía su teléfono, le daba miedo los doctores y todo lo que implicaba con la medicina, Gemma perfectamente lo sabía. Ella sabía...

"Hermanito, el jefe me ha pedido un cambio de turno con algunos reportes de juntas. No podré estar ahí en tu cita.

-Gemma."

Harry maldijo en todas las formas posibles, sus pies comenzaron a moverse con más inquietud, su boca comenzaba a tornarse seca y estaba iniciando a temblar.

—No deberías de mover así tú pie, podrías lastimarte —escucha una voz proveniente a su lado, rápidamente voltea encontrándose con la persona menos esperada.

—Bueno, este no es mi lugar favorito así que, tu comprenderás. —dice regalandole una sonrisa tímida.

—¿Puedo saber el por qué? —dice Tommy tomando asiento, su sonrisa ladina hacia un gran reflejo en punto de luz en su rostro.

—Odio los doctores, el medicamento, las jeringas, el olor de hospitales, todo lo que implique en ello. Mi hermana lo sabe y me ha dejado solo en mi última cita. No lo soporto —Harry frunce sus labios tomando con ambas manos sus rizos para jalarlos hacia atrás.

—Si tu gustas puedo acompañarte —dice Tommy con una sonrisa adorable. —No puede ser para tanto, pero si algo te causa malestar puedo mejorarlo.

—Gracias...—dice Harry tímido —¿Puedo preguntar el por qué estás aquí?

—Mis padres son doctores, me han pedido que venga por unos medicamentos, así que pasé por aquí, y te vi...

Harry lo observó unos segundos, sin expresión alguna hasta que por fin sonríe con todo y dientes asintiendo levemente. Esto no era para tanto, pues al parecer una Tommy solo quería ayudar, y traer una mejor paz al rizado, no era de cuestionarse aquello.

—Bien, pero tendré que pagarte de alguna manera el tiempo que perderás en soportarme —sonrie tímido.

—Una cita.

—¿Qué?

—Aceptame una cita y así estamos a mano. Saliendo de aquí podremos ir por un café, al cine, al teatro, ¿Qué dices? —Tommy sonríe aún más, sus mejillas comienzan a calentarse un poco tornando un color carmesí. Harry podría apostar todo por decir que lucía adorable.

—No lo sé...

—Vamos, no hay manera en la que puedas decirme que no. La pasaremos bien, te lo aseguro. O espera, ¿Acaso tú tienes...? —la frase queda corta en el aire observando a Harry con atención.

—Novio. No, Louis me engañó y corté con el. Así que, —Harry después de todo no tendría ningún problema de salir con algún chico. —Puedo perfectamente salir contigo.