異なる | 𝐃𝐢𝐟𝐞𝐫𝐞𝐧𝐭𝐞
Después de la muerte de su familia, una chica de hermosos cabellos albinos llega a Konoha. Aquella aldea que le trajo recuerdos completamente diferentes a los que ya tenía. Y donde conocería a cierto chico, completamente dif...
En el más alto pico de una montaña cubierta con una hermosa blanca capa de nieve, una chica de unos largos y hermosos cabellos que se confundían con la nieve, una pálida pero hermosa piel, decorada con tonos rosados en la mejilla, y una ropa distinta a la que solía vestir.
Habían pasado más de tres años desde que terminó su entrenamiento como shinobi, el cual era básicamente su sueño. Pero todo había terminado. La chica había crecido y su cuerpo había cambiado completamente.
- ___ ya es hora - una voz masculina inundó el ambiente.
- Tío ... - se volteó lentamente dejando que su largo kimono bailara con el viento que pasaba por el lugar - No quiero hacer esto... - Bajó la mirada.
- Pues ni modo, hicimos un trato, y no lo vas a romper.
La chica solamente se dedicó a asentir.
Habían pasado dos semanas de que la albina había comenzado a prepararse para gobernar aquel pequeño lugar. La chica ya no podía con todo aquel trabajo, era estresante para ella, pues nunca había estudiado con tanta intensidad.
En estos momentos ella se encontraba caminando sobre la nieve lentamente para descansar un rato del trabajo que estaba resolviendo.
Nuevamente, llegó a aquel pico de la montaña, y se dedicó a observar el horizonte, apreciando y recordando aquella libertad que alguna vez obtuvo. Pero pronto, un recuerdo cruzó por su mente.
- ¿Y quién dijo que quería detenerte? Por mi, hasta a tu muerte le restaría importancia - Comenzó a caminar hasta llegar a su lado, pero un jalón de su parte terminó deteniendo su andar, ya que el azabache juntó sus labios con los suyos sin su consentimiento.
- Al menos esta vez ya no fué un accidente - dijo al separarse, aunque no le tomó importancia ya que la chica se encontraba en estado de shock.
El de cabellos azabaches, siguió caminando para salir de la aldea, pero la albina ni se inmutaba, veía como de a poco se alejaba y ella se quedaba ahí parada.
- Tú fuiste la única chica que no estaba detrás mío, lo cual era sorprendente, ya que soy irresistible, pero aún así, me trataste como una persona más y no por el único sobreviviente del clan Uchiha... - el chico sonrió para voltearse y seguir caminando hasta desaparecer de los ojos de la chica - Fuiste diferente... - Susurró hacia él mismo.
La chica llevó sus dedos hacia sus labios recordando lo que el chico había hecho.
No quería estar ahí, aunque había realizado un trato con su tío... Iba a escapar a como diera lugar.
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