Epílogo.

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Santana Pov.

La mirada de mi madre pasaba de Brittany  a mí y viceversa. Nunca había visto tanta confusión en su cara, aunque era lógico, no todos los días tu hija muerta vuelve a la vida. Quinn y Rachel  tenían una expresión parecida, mientras Brittany  y yo intentábamos explicar todo.

— ¿Me estás diciendo que Brittany te mató, pero hiciste de ángel, ella pidió un deseo y has vuelto a la vida? —Busqué a Brittany con la mirada para pedirle ayuda, pero ella solo se encogió de hombros.
—Sí, eso he dicho—. Mi madre se llevó una mano a su frente. — ¡Es verdad!
—Pero entiéndeme hija, no podemos poner que resucitaste en el expediente.- dijo mi madre.
—Podría ser como Jesucristo, salvo que yo resucité a los cuatro meses—. Todos los presentes me miraron mal—. Vale no. Simplemente destruye el archivo, ya está.
—Bueno, no suena mal.- dijo mi madre.
—Mamá, reconoce que sin mí estarías perdida.- dije yo.
—Y tienes razón—. Mi madre se acercó a mí para abrazarme. Mientras abrazaba a mi madre miré a Brittany, que sonreía orgullosa. —Un momento, ¿entonces tú eras Sandra?
—Sí, yo inventé eso. Si le decía que era Santana me habría tomado por loca—respondió Brittany.
—Sí, te habría llevado directa a un lugar para locos. Aunque actualmente, lo más seguro es que me tengan que llevar a mí.- dijo mi madre.
—Pues a mí me parece guay. Mi mejor amiga murió y ahora está aquí conmigo. Espero que ahora no me evites tanto, no hay excusa—reprochó Quinn.
—No lo haré hermana. Algún momento tendremos que estar sin las chicas estas, ¿no? — Rachel  se levantó y se acercó a mí dándome un golpe, aunque me llevé otro también por parte de Brittany—. ¡Era una broma!
—Hija por Dios, compórtate. Lleva a tus amigas y a tu novia a dar una vuelta o algo, tengo trabajo que hacer.- dijo mi madre.
Las cuatro aludidas nos levantamos del sillón de la comisaría y salimos, dirigiéndonos al jeep.

— ¿Tu madre se ha referido a mí como tu novia? —Me preguntó Brittany mientras me impedía andar.
—Eso parece... ¿te molesta?- dije.
—No, ¡le encanta! Me manda mensajes continuamente hablándome de ti y ¡ay! —Rachel  paró de hablar debido a un pisotón de Brittany.
—Ignórala... no sabe lo que dice—dijo Lydia con una gran sonrisa.
—Centrémonos, pareja. ¿Dónde vamos a ir? El sol se está escondiendo ya—. Quinn parecía algo indignada, parecía que no le gustaba la luna o algo. Que chica más rara. De repente en mi mente, se me apareció el lugar perfecto al que podríamos ir. Cogí la mano de Brittany y ella me miró sonriente, sabía que ella estaba pensando lo mismo que yo.

—No te puedo hablar mentalmente, pero estoy seguro de que coincidimos en el lugar.- dije.
—Yo también lo creo. Sabes, aunque parezca mentira, creo que echaré de menos tu voz en mi cabeza.- dijo Brittany.
— ¡Siempre te asustaba! —Grité yo, dándole un pequeño empujón.
—Bueno es normal, eres una chica un poco rara—. Ahora fue Brittany la que me devolvió el empujón entre risas, debido a mi cara de enojo.
—Pero aún así me quieres—. Yo le di un beso en la punta de la nariz y al separarme, Brittany estaba colorada.

—Sí... —Yo sonreí y la acompañé hasta el jeep, donde Quinn y Rachel  ya estaban esperándonos.

...

—Santana, ¿de verdad nos has traído a un parque? —Preguntó con mala cara Quinn. Rachel  rodó los ojos.
—Claro, para ver la puesta de sol. A Santana y a mí nos encantó—respondió Brittany por mí, cosa que agradecí.
—Ay, ¡es tan romántico! Tendrías que aprender un poco de ellas, Quinn—recriminó Rachel.
—Vale, pero no me mates—. Quinn hizo una expresión muy graciosa, porque tenía cara de miedo, pero no era de verdad. Los demás nos reímos. —Está bien, veremos la puesta de sol.

Nos sentamos en la hierba los cuatro. El parque se encontraba vacío, lo teníamos completo para nosotros. Aunque la verdad, no es como si fuéramos a hacer algo más además de ver la puesta de sol. Yo decidí tumbarme en la hierba y al momento Brittany  hizo lo mismo, apoyando su cabeza en mi pecho.

—Podríais escribir vuestra historia. Estoy segura que mucha gente la leería—sugirió Rachel. Yo resoplé.
—Claro, seríamos el nuevo romance paranormal, los vampiros de hoy en día—contesté irónica.
—Yo siempre fui más de hombres lobo—. Agregó Quinn y yo le miré sorprendido. ¿Había leído algún libro de estos? —No Santana, antes de que lo preguntes. No he leído nada de esto, pero alguna que otra película sí he visto. Y yo entre un vampiro y una mujer lobo, prefiero ser un lobo.

—A mí me gustaría salir con una mujer lobo,Quinn. Ya estás investigando como convertirte. Ya lo estoy viendo, luego escribiré una novela, sí. ¡Y adaptarla al cine! O por lo menos a la televisión.- dijo Rachel.
—Rachel, te voy a encerrar yo misma en una casa para locos. Deja de alucinar—. Dijo Brittany rodando los ojos. Todos los sueños de Rachel  se vieron destruidos, que fue a "llorar" a los brazos de Quinn. Yo sonreí a Brittany.

—Esa es mi chica.- dije.
— ¿Lo soy?- dijo Brittany.
—Aún no pero... ¿quieres ser mi novia, Brittany Pierce? —Pregunté.
—Menos mal que me lo has pedido ya, no aguantaba más. Y sí, quiero serlo—. Brittany  se acercó a mí a darme un beso en los labios, uno que me dejó completamente atontada.

— ¡Vayan a un hotel! —Gritó Quinn.
— ¡Cásense! —gritó Rachel. Brittany  y yo nos miramos y empezamos a reír, nuestros amigas estaban locas. — Mirad, la puesta de sol.

Todos dirigimos nuestra mirada hacia el cielo. A pesar de ser el mismo cielo que el otro día, parecía diferente. Hoy el cielo era una mezcla entre azul y naranja, mientras que el otro día tenía un tono lila. Seguramente fuese así porque así, pero yo decidí interpretarlo. El del otro día era más oscuro simbolizando la tormenta, lo que estaba por venir. Hoy lucía calmado, porque todo había salido bien, porque estaba junto a Brittany. Lo más probable es que esto fuesen solo unas tontas teorías mías, pero me gustaban. Dejé de mirar el cielo para mirar a Brittany, justo como lo había hecho ella el otro día.

—Te estás perdiendo el atardecer—. Brittany levantó la mirada para mirarme, aunque no separó su cabeza de mi pecho.
—Ya he visto mucho tiempo el cielo. Prefiero ver lo que tengo en la tierra, algo que no creo que me canse de mirar—yo le di un beso en la cabeza.
—Gracias, Santana.- dijo ella.
— ¿Por qué? —Que yo sepa no había hecho nada.
—Por todo. Tú ayer me dijiste que te había salvado pero es una completa mentira. Yo era la que tenía que ser salvada. Conseguiste traerme de vuelta a mi vida normal, a una sin llantos.- dijo Brittany.
—Eso es porque tenemos una conexión. Un vínculo emocional—contesté sonriente.
—Eres mi ancla, Santana. Me has salvado. Espero que sigas ahí para poder hacerlo cada vez que lo necesite.- dijo Brittany.
—Lo estaré. Siempre encontramos la manera de volver con la otra. Y seguiremos así.- Dije yo.

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Y he terminado una historia más. Espero que ya hayan disfrutado mucho. Siento que la termine muy rápido,pero la termine.

Estaré trabajando en otra adaptación ya que esto de escribir ya me gusto.

Pero aún no se cuando se subiría,pero será en estos días.

Espero que les haya gustado,la historia.❤

Heaven is a place on Earth. (Adaptación Brittana)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora