CAPITULO 3
El ambiente en la habitación se volvió tenso, la mirada penetrante de Xiao Zhan podría atravesar a Yibo, quien no podía ni siquiera mirarlo de reojo, se encontraba tan intimidado tan solo con su presencia que se sentía avergonzado de devolverle la mirada.
-Lamento si mis amigos fueron demasiado duros contigo, son un poco brutos – Hablaba mientras daba lentos pasos hacia ellos- ¿te hicieron daño? – su mano sostuvo su mentón por un momento-
Al ver que no había ninguna respuesta lo soltó y se dio vuelta de nuevo y camino hacia el ventanal, con las manos en su espalda – Puedes irte, en mi auto, está un sobre con dinero, llévaselo a mi padre y no quiero verlos por aquí hasta mañana en la tarde o tal vez hasta que yo les llame ¿entendieron?
Se escucho un contundente "si jefe "para después abandonar aquel lugar dejando solo a esos dos apuestos jóvenes, uno rodeado de un aura perversa y otro apoderado del miedo, había un silencio incomodo, nadie decía nada, solo se podía escuchar la tenue lluvia golpeando los vidrios del enorme ventanal.
-Creo que quieres saber por qué hice que te trajeran aquí – el silencio se había roto con un tono lleno de perversión- ven, vamos a beber algo, prepara algún trago
Xiao Zhan camino hacia una Mini cantina alado de su enorme sala de estar y se sentó en uno de esos bancos color negro azabache, sin dejar de mirar a Yibo
-s...señor, se supone que – se podía escuchar lo nervioso que estaba- que debo estar en el trabajo, yo no hice nada, tal vez se equi...- un carraspeo de garganta lo interrumpió-
-Tu eres Wang Yibo ¿No? Deja de hablar y ven aquí – señaló la barra- prepara algo que tenga whisky, rápido – el tono que Zhan utilizaba naturalmente sonaba amenazante e imponente, haciendo que cualquiera que hablara con él se sintiera pequeño y obligado a hacer cualquier cosa que él dijera-
Dio un gran trago de saliva antes de caminar hasta aquel pequeño bar, observo cada una de las botellas y mezcladores y solo se le ocurrió preparar un Venetian Beauty, un coctel que consistía en brandy de cereza, un poco de jerez, whisky y cerezas. Xiao Zhan era un evidente fanático del whisky, tenía una gran colección de botellas de las mejores marcas y gran variedad de cosas con las que se podían hacer sofisticados cocteles.
Comenzó a hacer la mezcla de todos los ingredientes y los vertió en un pequeño vaso de cristal, al ver esto Xiao Zhan lo interrumpió – Por qué solo estás haciendo uno – en vez de sonar como una pregunta sonó como un tipo de advertencia y enseguida preparo otro
-A qui tiene – sus miradas aún no se habían cruzado y eso estaba alborotando los nervios de Xiao Zhan-
- Por qué carajo estás tan asustado – le dio un sorbo al coctel de tono rosado – esta delicioso – sus labios se curvaron hacia riba dejando a la vista una sonrisa coqueta- sabes, hoy tuve un día realmente horrible – dijo sin despegar la mirada de su pequeño vaso-
Parecía una conversación unilateral, no había respuesta de la otra persona y esto estaba cansando la paciencia del no tan tolerante joven Zhan – No sabía que eras tan callado – lo miro de reojo- ¿no piensas hablar? – No hubo respuesta – esa noche en el bar, no me despegabas los ojos de encima, realmente creí que harías un agujero en mi cuerpo con tu penetrante mirada – por fin se levantó del banco en el que se había mantenido sentado hasta el momento y camino hasta Yibo, parándose justo alado de él- deberías beberte eso, realmente no quiero enojarme contigo – le susurró muy cerca del cuello, provocando un escalofrió en esa zona erógena de Yibo-
Las manos temblorosas del más joven tomaron el vaso y lo llevaron hasta sus labios, haciendo que bebiera de un solo sorbo todo el líquido que este contenía – Qué es lo que quieres – tal vez se había cansado de la situación o el alcohol le había dado el valor de decir sus primeras palabras en toda la noche-
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Whisky Flavored Kisses //YiZhan//
FanfictionLos besos con un ligero sabor a whisky pueden llegar a ser los mas adictivos, si los combinas con una historia pasional entre un simple estudiante y un integrante de la Mafia Wang Yibo conoció a la persona equivocada en el momento menos indicado, e...