Capítulo siete.

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—¿Vas a ayudar a Harry a tener una cita con Malfoy?

—Si así es, él mismo me pidió apoyo así que no pude negarme. —contestó Percy a su novio.—Además realmente creo que ellos dos se complementan bien.

—Si tu lo dices, yo no veo muy interesado a Harry.—Oliver iba a su lado con su maleta y la de su novio como se había hecho costumbre.

—Yo no lo estoy obligando Oliver, si le dije que creía que Draco gustaba de él pero no lo estoy obligando a que tenga una cita.

—No digo que tu lo obligues, solo también note como lo mira Malfoy y no creo que Harry vaya hacerle mucho bien a ese chico.

—Hablaré con él para que no le haga daño pero no los puedo guiar en su vida.

—Lo sé, igual eres muy lindo haciendo esto por él.

El castaño beso su mejilla haciendo a su novio sonreír, Oliver siempre lo ponía feliz.

[...]

Ron tenía una mirada crítica mientras su hermano terminaba de acomodar todo, el pelirrojo menor estaba como guia para apoyar a Percy que todo se viera perfecto para la cita de Harry con Draco, así que solo estaba parado diciendo que debía acomodar y comiendo parte de la comida del picnic.

—Deja eso, tu no eres mi cita.—se quejó Harry quitándole el pastelillo que tenía su mejor amigo.

—Me quieres más que al idiota con el cual tendrás la cita, así que aguantate.—Ron volvió a tomar su pastelillo para comerlo.

—Dejen de discutir, ya terminé así que es hora que Ron y yo nos vayamos, Malfoy ha de llegar en cualquier momento.

—Gracias por todo tu apoyo Percy, lo que hiciste es genial.

—No tienes que agradecer.—dijo Percy acercándose al menor.—Solo prometeme que si no va bien esto, o si no te gusta Draco en realidad debes dejarlo en paz, no es justo que juegues con sus sentimientos ¿okay?

—Lo prometo, solo quería darle una oportunidad además que realmente me gusta, o mínimo físicamente.

—Está bien, espero que todo salga bien. Te dejo para que tengas tu cita, vamos Ron.

El menor se despidió y no muy alegre se alejó de ahí junto a su hermano.

Harry miró todo lo que había hecho Percy para apoyarlo y sonrió, en realidad parecía la cita perfecta y por alguna razón estaba esperando que a el rubio le gustará todo lo que estaba preparado. Alguien aclarándose la garganta detrás de él hizo que volteara para ver qué pasaba.

—Ya estoy aquí Potter.—Harry simplemente lo miro, el rubio se veía tan bien con la ropa elegante que tenía y a pesar de todo no parecía fuera de lugar, se veía perfecto.—¿Potter?

—Oh si Hola, que bueno que vinieras.

—¿Vamos a tener un picnic entonces?

—Pues si, es lo que planeé pero si no te gusta supongo que podemos hacer otra cosa.

—No, el picnic me gusta.

El rubio pasó a lado de Harry y se sentó en la manta que se encontraba extendida para que estuvieran ellos dos, el moreno aun nervioso hizo lo mismo para poder iniciar su cita.

—Percy me apoyo con la comida así que espero te guste lo que traje.—dijo Harry al notar el incómodo silencio que se había formado alrededor de ellos.

—Si están bien.—Draco tomó uno de los bocadillos e inició a comerlo con elegancia y clase como todo lo que hacía. El moreno intentó imitar algunas acciones para no verse como un mal educado pero estaba completamente seguro que fracaso.—¿Y ahora qué? ¿Sólo nos sentamos frente al otro para comer en un silencio incómodo?

—No, se supone que deberíamos charlar pero supongo que esta cita no está saliendo bien.

—Eso pasa cuando sales con alguien que no te gusta, se que te desagrado Potter, solo quería saber hasta qué punto ibas a llevar tu broma.

—Te dije que no es una broma, te pedí salir porque Percy cree que gustas de mí y después de lo que pasó con Oliver creo que quiero intentarlo con alguien que sí se fije en mí. He notado como me miras o te preocupas si algo me pasa, por eso te pedí la cita.

Draco lo miró entre dolido y sorprendido antes de dejar lo que estaba comiendo y ponerse de pie.

—¿Te vas?

—Por supuesto que me voy idiota.—contestó el rubio demasiado molesto para sorpresa de Harry, estaba acostumbrado al tono burlón.—No soy un maldito juguete o alguien quien puedes usar porque rompieron tu corazón, así que si pensaste que podías usarme para tu conveniencia estás demasiado equivocado.

—¡No! No quise que pareciera eso ¿okay? Sonó mal lo que dije pero no te vayas.—Harry se puso de pie para poder acercarse al rubio para hablar.—No había notado que yo te gustaba, Percy fue el que sembró la duda y empecé a analizar nuestros encuentros y tus actitudes hacia mi. Y no te invite a salir por todo eso, fue porque realmente me gustaría conocer al Draco que cree que valgo la pena como para gustar de mi.

El más alto se lo quedó viendo por lo que parecieron horas, pero para alivio de Harry el rubio relajó sus facciones y soltó un suspiro.

—Pero yo no te gusto, esto no va a funcionar con solo uno interesado, se que te gusta Oliver y que por cualquier cosa que él pueda darte vas a hacerme a un lado y enserio no me quiero quedar para ver eso.

—Pero creo que si me gustas, no como Oliver pero se que no va a pasar nada con él porque nos llevamos demasiados años, y quizá no estoy enamorado de ti pero sé que quiero besarte y no parar nunca.—dijo Harry dejando completamente sorprendido a su cita.—Nunca antes me lo había planteado pero los últimos días no puedo sacarte de mi cabeza, te busco con la mirada solo para ver lo lindo que eres, imagino que sería ir a clases contigo tomados de la mano y poder conocer al verdadero Draco y no el que aparentas. Y se que ofrezco poco y lo más seguro es que lo rechaces pero quería dejarte claro que no eres algo para superar a Oliver.

—Yo...bueno no se muy bien que responder a eso, no espere que dijeras algo así.—respondió el rubio.

—Puedes decir si quieres quedarte e intentarlo o prefieres irte.

—¿Realmente quieres besarme?—fue la contestación del rubio la cual dejó algo confundido a Harry pero asintió.—Entonces hazlo, si me gusta puede que me quede.

El moreno no sabía como Draco seguía teniendo ventaja a pesar de ser quien está enamorado, pero ahí estaba de nuevo reduciendo a Harry a un cúmulo de nervios.
El rubio lo miraba expectante esperando que hiciera algo como retractarse o salir huyendo pero para su sorpresa de ambos Harry lo besó.

Solo un choque de labios donde Harry claramente no tenía idea que hacer pero igual estaba intentando demostrar que lo que dijo fue en serio. Solo tardó unos segundos en que Draco se apiado de él, puso su mano en la mejilla del más bajo y empezó a llevar el control del beso, seguía siendo inocente y algo torpe porque solo tenían trece pero estaba siendo el inició de algo para los dos.

Los celos de un WeasleyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora