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MinSeok despierta en un hospital, lo primero que ve es a su papá omega que está durmiendo en un sofá esperando que su hijo despierte. Luego recuerda lo que pasó antes de cerrar los ojos, en ese momento entra JongDae con dos cafés, uno para su suegro y uno para él. JiYong despierta algo preocupado. 

—Papá, JongDae —mira a ambos —. ¿Qué pasó? ¿Dónde están mis pequeños cisnes? —pregunta con los ojos húmedos. 

—Los dejaré para que hablen —JiYong le da un beso en la frente y presiona su mano en signo de apoyo. 

Los signos vitales del omega cada vez se ven más alterados. 

—JongDae, ¿qué pasó? ¿dónde están nuestros bebés? —pregunta asustado. 

—Alguien tiró una gran piedra de construcción a nuestros huevos… nuestros bebés están… —JongDae se seca las lágrimas mientras que su esposo comienza a alterarse mientras llora.

—Perdóname por llevar a nuestros huevos al estanque, perdóname por no protegerlos —no quiere el abrazo que su marido le está dando, se cree culpable. 

—Escúchame, no fue tu culpa —JongDae toma su rostro para que lo mire —. No eres culpable de nada. 

—Pero no puede protegerlos —las lágrimas le nublan la vista. 

—A ti también estuve a punto de perderte y no lo quiero imaginar, después de eso, te desmayaste y tu corazón estaba tan débil que tuve miedo de que no lo soportaras —JongDae solo pudo estrechar a su esposo entre sus brazos. 

MinSeok se deja abrazar esta vez, necesita mucho apoyo de su esposo. Las lágrimas no dejan de brotar, el pequeño cisne está muy dolido al igual que el lobo. El lobo también está sufriendo, sus pequeños polluelos ya no están. 

—Minnie, no es tu culpa lo que pasó —JongDae le recuerda mientras besa sus mejillas húmedas por las lágrimas. 

—Pero si no fuera porque yo quería ir al lago, mis polluelos estarían aquí —JongDae trata de calmar al alterado de MinSeok. 

Su pequeño esposo apenas y puede balbucear una palabra de lo herido e intranquilo que está. Comienza a alterarse más y es entonces que JongDae deja de abrazarlo para pedir un tranquilizante. 

—Iré por el médico Son —JongDae sale con prisa de la habitación, mientras el cisne comienza a moverse bruscamente lastimándose con la intravenosa. 

JongDae no tarda en llegar con el médico y con algunas enfermeras que junto a JongDae lo intentan calmar para que el médico administre en el tubo de la intravenosa un tranquilizante. Con el pasar del tiempo, el cisne va cerrando los ojos. 

—Dormirá un par de horas, le recomiendo señor Kim que lleve a su esposo a un psicólogo, lamento su perdida —dice antes de retirarse. 

JongDae asiente y cuando todos han dejando la habitación observa a su esposo y él también llora, ha fingido fortaleza todo este tiempo. Después de unos minutos, JongDae sale de la habitación con los ojos rojos y se encuentra con su suegro. 

—Ya está más tranquilo —JongDae avisa a su suegro. 

—Mi pobre niño —a pesar de que es el mayor, JiYong lo trata como el menor —, ¿quieres ir a descansar? Tú tampoco te ves muy bien —JiYong está preocupado. 

—Estoy bien, tengo que hacer algo primero, ¿puedo encargarles a MinSeok? —JongDae le pregunta a sus suegros, SeungHyun acaba de llegar con un té para su esposo. 

—Claro, ve. 

(...) 

JongDae camina por los pasillos de la compañía de KwangJae, todavía no la hereda de su padre. JongDae está tan furioso que puede llegar a matar al águila. 

El cisne y el lobo || ChenminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora