Limerencia Obsesiva

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Cuando la luna deje de brillar, las gotas dejen de caer, cuando el mar se vuelva desierto y el desierto en simple polvo, entonces ahí, comprenderás lo que es el sentimiento de soledad.

Nunca había comprendido esta frase que tanto me repetían hasta que tu promesa se convirtió en un simple recuerdo.

Acostadas una al lado de la otra, aun recuerdo esa infantil pregunta como si la acabara de pronunciar; Aunque no podemos prometer un por siempre, al menos promete que mañana estarás.

Y el mañana llego, anunciando lo que más me temía, tu partida.

¿Dónde quedó tu mañana?

Creo que simplemente se evaporó junto al por siempre.