The Right Person || BrightWin || Libro #1

🐺Capitulo 28🐰

Win Metawin.

No era momento, pero tenía que explicarme la situación.

Suspiró, se le veía frustrado.

—¿Y entonces?— insistí de nueva cuenta

—Win, para. Necesito relajarme. ¿Podrías esperar un poco solo hasta que lleguemos a Estados Unidos?—

Lamentablemente no puedo esperar, soy muy impaciente.

—No, no puedo hacerlo, necesito una explicación— me crucé de brazos y hize un puchero

Bright giro los ojos y sonrió un poco.

—Si te explico todo ¿Me dejaras en paz?— asentí contento —. Pero antes, quiero algo—  sabía perfectamente lo que quería, pero me haré el tonto

—A ver dime ¿Que es lo que quieres?—

—Quiero muchos besos, ahora y todo el tiempo que estemos aquí— sonrió ladino y comencé a reír.

—Eres un…—me interrumpió

—Un simpático hombre que está por cumplir diecinueve años— sonrió un poco y también lo hice yo.

—Esta bien, te daré los besos que quieras ¿Contento?— asintió eufórico —. Bien, ahora quiero mi explicación

Su sonrisa se apagó un poco. Aún que me vio tiernamente.

—Bien, mi padre no sabía que me iría de Asia, se enteró más antes de lo que pensé. Así que mando a buscarme al aeropuerto y se armó todo el show. También tuve que sobornar un poco, de algo aprendí a mi padre. Y bueno eso es todo, ahora quiero mis besos.

—Esta bien, Está bien— mire hacia todos lados, por suerte no había muchos pasajeros y mi madre está muy atrás así que pude estar un poco tranquilo.

Me acerque a él lentamente y roce sus labios comenze moviendolos un poco, el no dudo en seguir mi ritmo.

Me tomo de la nuca y me apegó más a él. Ahora bright había tomado el control del beso
Comenzó introduciendo su lengua en mi boca, era algo hermoso el contacto, mi cuerpo vibra y no por calentura, si no que era algo mucho más fuerte, es como si bright y yo fuéramos hechos para estar siempre juntos, como cuando haces dos piezas las cuales son echas para estar juntas y formar un lindo rompecabezas.

Nos separamos por falta de aire, nos miramos y después sonreímos.

—Gracias– susurro

—¿Por que?— respondí un poco confundido

—Por este beso— volvimos a sonreír.

Decidimos dormir un poco, ya que el cambio de horario es muy grande así que tenemos que acostumbrarnos lo antes posible, no digo que en una hora, pero si en unos quince o veinte días.
No lo creo fácil pero tampoco imposible, son doce horas de diferencia, cuando tenemos que dormir aquí tenemos que despertar. Que agobiante.

[…]

Desperté y Bright seguía durmiendo.

Me quede viéndolo por unos segundos, su cabello levemente alborotado y la boca entre abierta, parece bebé, tan tierno e inocente. ¿Quien creería que este muchacho es un demonio impulsivo?

—Creo que un foto duraría más ¿No crees?— me sonroje al instante, pues me pillo mirándolo

—Cállate

Río leve y yo saque el celular sin que me vieran, para ver la hora casi las doce de la noche, son muchas horas de vuelo, supongo que estaremos mañana aterrizando por la tarde.