Alguien alguna vez dijo que para cantar tocaba romper todos los espejos de la casa. Nosotros le recomendamos salir de su casa y ahorrarse los espejos rotos. Procure que el día en el que vaya salir a cantar sea un día soleado y sin muchas nubes en el cielo.
Cuando esté afuera revise varias veces las instrucciones para oír una canción de Morat, memorizando así los versos y las estrofas con cuidado de no cambiar las palabras, no sea descubra los secretos que estas canciones esconden. Si usa camisa, desabotone los primeros dos botones del cuello hacia abajo; si usa abrigo quíteselo.
Separe los pies a la anchura de sus hombros, eleve la cabeza al sol y abra la boca. Espere en esta posición por lo menos siete minutos; esta es la mejor manera de calentar sus cuerdas vocales.
Canta las primeras notas de la canción. Si hoy el mundo silenciarse, si oye el pasar de los pájaros sobre las antenas satelitales, las olas del mar mediterráneo estallar contra la arena, el crujir de las hojas secas bajo los pies de un caminante distraído o los copos de nieve caer sobre algún automóvil en una autopista al norte, no se preocupe, lo está haciendo bien.
