🔸Era solo un boceto🔸
🔸Un personaje de relleno que sólo aparecía en una linea de aquella novela que tanto le gustaba a sus compañeras🔸
🔸Ni siquiera era conocido en la primera o segunda línea de tiempo de aquella novela🔸
🔸Un niño nacido, sin se...
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Tranquilo Anton, piensa en la biblia.
Estás en tu lugar feliz, tu lugar feliz.
-¿Seguro que no te duele nada? -escuche como me preguntaban por undécima vez
Su voz seguía suave y preocupada pero me cabreaba que me siguiera preguntando sobre eso.
Alcé mi vista para mirar a la persona que me había salvado.
Juraría ver pequeños signos de sudor salir y como si hubiera orejas de perro imaginarias sobre su cabeza, su cola imaginaria se movía de un lado a otro pero estaba agachada.
Clifford.
-¿Quién? -lo escuche preguntar y vi como ladeaba la cabeza
-¿Uh? -murmure
Oh, Dios.
¿Lo había dicho en voz alta?
Joder, que vergüenza padre mío.
Rápido Anton, hazte el loco.
-Nada, nada -negué rápidamente y dándole mi mejor sonrisa para tranquilizarlo- estoy bien y te digo con sinceridad de que no me duele anda- le volví a decir
Cielos.
Le tuve que responder por undécima vez lo mismo.
Lo vi suspirar aliviado y me sonrió.
-Me alegro, debes tener más cuidado por donde va... -explica con una pequeña sonrisa y yo solo pude asentir con la cabeza.
Créeme, tendré más cuidado.
Tanto cuidado que ni me notaras.
Bien, ahora solo debía irme.
-No me gustaría que el príncipe Antonius saliera lastimado -indica preocupado
Esperen.
¿Cómo dicen que dijo?
- ¿Me conoces? -me pregunto con un toque de curiosidad
No podía dejar salir la sorpresa, la desesperación y las maldiciones venenosas que querrían ser expulsadas de mis labios.
-Por supuesto -afirma hasta que vi una expresión de sorpresa en su rostro- ¡discúlpeme! - exclamo
Me sobresalte.
¡Es que no pude evitarlo ya que él se arrodillo frente a mí!
Aun no estaba acostumbrado a esto y sinceramente no sabía si me acostumbraría alguna vez.
Además de que Felix es el primero que se arrodilla frente a mí de esa manera.
