PIENSA EN MARIPOSAS

Capitulo 4

Después de unos cuantos minutos , aparqué en la residencia Cullen , apagando el motor de la moto , me encamine a la puerta , dando unos golpes en ella.

Tenían razón , se escucha otro latido , y el olor de Edward es más fuerte ..........

Por favor no .......

Después de unos segundos , a mi vista llegó Rosalie , tras la puerta ser abierta.

—- Hola ...... rubia —la salude con una pequeña sonrisa— creo que ....... sabes el motivo no —- murmure , rascando mi cuello.

—- Ya se te extrañaba perro —- dijo dejándome pasar ,sacándome una risa.

Me adentre en la casa , pasando por el pasillo , hasta llegar a la sala , donde se veía a todo el clan , junto con Isabella en el sofá , con un aspecto demacrado.

—- Oh ........ buenas tardes , supongo —- salude algo incómodo.

—- Jacob ...... es bueno verte —- el primero en hablar fue Carlisle.

—- Vaya , hasta que le perro decide venir —- bromeó Emmet.

—- Hola ....... —- saludó débil la humana.

—- -suspiro- Saben me encantaría sentirme y tomar una taza de té con ustedes , pero no vengo por eso —- dijo tornándome serio.

Ni siquiera me anime a ver a Alice y Jasper , pero de reojo capte a Edward recargado en la ventana , con la mirada perdida.

De nuevo logre escuchar otro corazón , busque con mi mirada al creador del sonido , hasta que mi mirada cayó en Isabella.

—- No..... no me digas que ........ ¡oh Dios! —exclame , frotando mis manos en mi cara— que esto no imposible —- le reclame a Edward.

—- -suspiro- Ven conmigo —- respondió , caminando hacia la entrada.

Paseé por última ves por el clan , deteniéndome en unos orbes ámbar que me captaron , y logré encontrar desesperación en ellos , pero solo lo ignoré , dándome vuelta , para seguir al cobrizo.

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Después de unos minutos caminando en silencio, nos detuvimos en prado.

—- Y bien —- dije después de estar en silencio.

—- Créeme ... esto , también es sorprendente para nosotros , eso ......... la está matando por dentro , intenté hacerla recapacitar pero ....... no me escuchó  —- hablo con desespero , sentándose en el pasto.

—- -suspiro- Edward , estoy aquí para apoyarte si , la manada teme que esto sea un peligro —dije , arrodillándome frente a él— los ayudaré , esta bien , Isabella , hablaré con ella , pero , tenemos que respetar su decisión —- con algo de timidez , pose mi mano en su mejilla.

Él no replicó , y se acercó más al tacto caliente , dándole una sensación agradable , acercó sus pálidas manos a las caderas del contrario , acercándolo a su frío cuerpo , en un abrazo lleno de cariño , el cual fue correspondido , quedándose los dos en medio del prado , dejándose guiar por el afecto que recibían.

Sin notar que unos ojos ámbar los miraban desde la rama de un árbol , con una mirada indescriptible.