-Jungkookie, prueba la comida -murmuró Taehyung dando unas palmadas en la espalda del mencionado quién se negaba a salir de su lugar-
El castaño asomo sus galaxias notando que él contrario llevaba en sus manos los platos de comida esperando a que tomará uno.
-Son muffins de chocolate, de los que te gustan -volvió a decir Kim logrado hacer que el contrario se separe un poco de él-
Jungkook tomó uno de los platos y aún sentado al lado de su pareja comenzó a comer lo que su madre había preparado, de vez en cuando sonaban los truenos pero el pelinegro siempre lo sabía antes y tapaba sus oídos.
-Aaaa -dijo el más bajo con sus labios abiertos poniendo un pedazo de muffin en frente del contrario, Taehyung río y abrió su boca recibiendo con gusto la comida-
-Antes yo pensaba que no podríamos ser amigos -comenzó a hablar el castaño captando la atención de su pareja- En la escuela eras muy ruidoso y siempre estabas gritando o riendo, eso me lastimaba y por eso pensé que no podríamos tener una conversación sin que yo saliera con dolor de oídos -explicó con vergüenza mientras masticaba un pedazo de pan, el pelinegro sólo se mantenía callado, escuchando con tranquilidad a Jungkook-
-Cuando nos juntaron para hacer el trabajo pensé que me iría mal, le rogué al prosefor Wang que me dejara hacerlo solo pero se negó, creó que ahora estoy feliz por eso -lo último fue casi un susurro, ya que le daba un poco de vergüenza-
Taehyung sonrió sintiendo sus mejillas arder, de igual forma se sintió un poco mal por cómo había sido con el castaño sin darse cuenta. Pero a la vez se sentía feliz por que su ahora novio estaba feliz por estar con él.
-Ahora eres menos ruidoso, me gusta eso de ti -el contrario no sabía porqué estaba soltando todo eso pero le gustaba que el Jungkook sea más abierto con él de lo que ya es-
-Si, intento no gritar mucho para no lastimarte tanto -confesó Kim poniendo una de sus no tan pequeñas manos en la cabellera del más bajo logrando ver una sonrisa tímida de parte de este-
Jungkook borro su sonrisa de su rostro y bajó su cabeza en silencio, el pelinegro se preocupo por el repentino cambio de humor y pasó una de sus manos por la mejilla del chico haciendo que lo mire.
-¿Qué sucede? -indagó con un tono de voz suave para no asustar al castaño, notando como los ojos de este se comenzaban a poner rojos y el agua se adueñaba de ellos-
-T-tengo miedo -respondió con miedo y su voz rota, mientras sentía la mano del contrario iba a su diestra y entrelazaba sus dedos-
Taehyung fue interrumpido por un trueno que hizo que la luz se fuera, el castaño tapo sus oídos y se aferró al contrario intentando soportar el molesto zumbido provenientes de este.
De repente el cuerpo debajo de Kim comenzó a temblar con fuerza y los sollozos del chico se hicieron presentes, Jungkook estaba teniendo un ataque de pánico muy fuerte que apenas podía respirar.
-T-taehyungie...-mencionó señalando su garganta, la sentía cerrada y el aire comenzaba a escaparse de sus pulmones-
El pelinegro no sabía que hacer, tenía al chico pidiendo ayuda pero no sabía cómo hacerlo, hasta que llegó la señora Jeon con unos dulces en sus manos junto a Jennie. La madre de Jungkook cargó a su hijo y sacó de un cajón una bolsa de papel para después ponérsela en la boca al chico que comenzó a respirar en esta.
Jungkook se movió incómodo en el lugar con su madre, quería estar con Taehyung mientras se recuperaba, al parecer la mayor lo notó y con desconfianza llevó a su hijo con el pelinegro poniéndolo a un lado, para enseñarle a Kim como ayudar al chico.
Taehyung puso la bolsa en la boca del castaño y ayudó a que controlará su respiración mientras murmuraba palabras bonitas en sus oído tapando el sonido de los truenos, las madres salieron del cuarto quedándose sentadas en frente de la puerta cerrada.
-¿Estás mejor? -preguntó el pelinegro quitando la bolsa de la boca chico para darle un poco de agua y refrescar su garganta-
Jungkook asintió sintiendo las últimas lágrimas caer por sus mejillas rojas, abrazo el cuerpo de su novio asegurándose de que los dos estuvieran cómodos en la cama.
-No te vayas -pidió el castaño quedando dormido en el pecho del contrario-
-No lo haré.
-Promtelo -pidió poniendo perezosamente su dedo meñique en frente de su novio aún con sus ojos cerrados, Kim lo miró para después sonreír y entrelazar los dedos-
-Lo prometo.
Así la pareja quedó dormida en la cama del castaño con sus dedos entrelazados haciendo que aquel hilo invisible se uniera, junto a dos madres viendo todo desde el marco de la puerta y con sus celulares tal vez llenos de fotos sobre los dos desde diferentes ángulos, fotos cuales acabarían en un marco.
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-Jungkookie -llamó con un tono suave al mencionado quién seguía durmiendo plácidamente a un lado-
-No quiero -se quejó dándole la espalda al chico para poder seguir durmiendo sin molestias, algo que no se logró-
-Tú mamá nos trajo el desayuno -dijo Kim mientras movia el cuerpo del contrario, logrando despertarlo-
Jungkook se sentó en la cama, tallando uno de sus ojos sin saber lo tierno que se veía ante los ojos de su pareja. Taehyung le entregó la comida al chico en la linda bandeja de madera.
-Mañana nos vamos de viaje -comenzó a hablar el pelinegro tomando un poco de jugo, mientras que el contrario lo miró con sus mejillas llenas-
-No me gustan los viaje de curso -dijo Jeon con una mueca, desde siempre la escuela donde iban planeaban viajes cuando terminaba un curso, pero nunca le gustó ya que era mucho ruido y la mayoría de veces no iba-
-¿Por qué no?, son la cosa más divertida -musito el contrario viendo al más bajo con sus dientes estancados en un pedazo de pan-
-Mucho ruido, no me gusta -respondió con una suspiro y reposo su cabeza en el hombre del más alto,-
Está vez no iba a faltar solo por que su madre se lo pidió o por que el pelinegro estaría ahí con él, para cuidarlo de cualquier ruido que pudiera lastimarlo, se lo había prometido desde que anunciaron el viaje en el aula. Kim nunca promete algo si no lo cumpliría.
-¿Por qué tenías miedo ayer? -se atrevió a preguntar, no le había dicho el porque ya que la lluvia los interrumpió-
Jungkook dejó su comida a un lado y volteo su rostro, evitando encarar al contrario, Kim suspiro y pasó una de sus manos por la mejilla de su novio, logrando ver la cara del chico con un puchero. Taehyung dejó un leve beso en la mejilla del castaño logrando convencerlo.
-Ahora dime, ¿por qué tenías miedo?
Las galaxias de Jeon se inundaron de agua cuando em chico por fin habló.
