Lo que trajo las olas de mar(Damian Wayne y Tu)

Hombre Misterioso

El caballero de la noche en cuanto escucho el nombre de la niña no dudo en indagar más sobre ella, había algo que le resultaba  extrañamente familiar pero para su desgracia en donde estaba no podía comunicarse y por consecuencia ingresar a registros para buscarla era inútil.

Al salir de la isla pudo volver a tener señal en su comunicador y pidió a uno de sus hijos, Timothy, que le ayudara a hacer una carpeta con toda la información relacionada a ____ pero de pronto, como un destello fugaz el rostro de unviejo amigo y compañero de colegio apareció de entre sus recuerdos.

Nathaniel Müller

TN

Estaba en una pradera llena de flores con un cielo muy azul y despejado, mis manos que eran mucho muy pequeñas y estaban siendo sujetadas por un par más grande una era fina, delicada con uñas ligeramente largas; la otra era todo lo contrario, de un momento a otro no sentí más la calides de aquellas  manos, al darme cuenta que estaba sola gire hacia mí espalda viendo muy a lo lejos a mis padres, se despedian con una sonrisa a contra luz del sol logrando encandilarme demasiado inpidiendome ver el rostro de mi madre pero no el de mi padre quien paresia decirme algo  que no escuchava, abrazaba a mamá y ella tan solo agitaba su mano suavemente...
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Sentía una opresión en el pecho como si el corazón me pesará y al abrir los ojos, podía sentir mojada mi cara, al llevar mis manos a mis mejillas descubrí un tenue rastro húmedo de lágrimas que seque.

—Cariño ¿estas bien?, te he estado llamando y no respondías-La mujer de la tiara con una estrella apareció en el pequeño cuarto dentro del yet.

—Oh, perdón, no se cuando me quede dormida-sonreí ligeramente mientras me estiraba.

Extendió una bolsa de papel sonriendo me de vuelta.

—Espero haber atinado a tus tallas.

Al abrir la bolsa había  ropa interior nueva, un vestido corto azul cielo con estampado de pequeñas flores rojas, de manga corta, unos zapatos blancos, la mire con emoción.

—¡¿Enserio son para mi?!-pregunte ilusionada ciertamente la ropa era  simple pero bonita, la mujer dijo entre risas  un si.

—Te esperaremos afuera, ¿de acuerdo?-yo solo pude asentir repetidas veces con emoción.

Me deshice de mis viejas ropas, me puse el vestido atando los lasos que llevaba en la cintura terminado por los zapatos me acerque a una puerta que daba a un pequeño baño, lave mi cara y cepille mi pelo con mis manos, saliendo a con los demás.

Estábamos en lo que paresia ser, según lo que me explico mi padre, un puerto de carga para barcos que me imagino que aterrizaron la nave aquí por que así no llamarian la atención, el cielo estaba gris con señales que que lloverá pero gracias a Dios creo que no se compraría  a las tormentas tropicales que aguantaba en la isla, mire con detenimiento a todos y vi que faltaba uno, el hombre murcielago.

—Ja yo sabía que le quedaría bien ese color-Flash dejó de hablar con él hombre de capa roja.

Todos me  miraban con atensión y sonrisas en los rostros.

—Si, se ve muy tierna, nadie sospecharia que logró ella sola sacarnos de la jugada-Aquaman soltó una carcajada cruzando los brazos.