Nanami Kento - one shots (+18)

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Créditos Fanart: @oretsuu en twitter.
Advertencia: Contenido sexual explícito, Narrador omnisciente, Protagonista sin especificación de nombre.
Cantidad de palabras: 3103

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Ibas llegando media hora antes de lo normal a tu casa, como siempre tu esposo ya debería estar en casa.

Abriste la puerta principal de tu hogar, todas las luces del living y la cocina estaban encendidas pero no había ningún ruido. Al ya estar dentro caminaste por el living y te dirigiste a la cocina ya que normalmente siempre está ahí Nanami. Pero la cocina estaba vacía aun así tu mirada se dirigió al mesón, el cual tenía un salmón descongelándose y a su lado una ensalada ya preparada.

Saliste de la cocina, ya sabias donde estaba, caminaste por el pasillo en dirección a tu habitación.

Tu habitación estaba a oscuras y en silencio, excepto por una nítida luz la cual se podia observar por el borde de la puerta del baño, la cual no estaba completamente cerrada, acercándote pudiste escuchar con claridad la ducha encendida.

Abriste la puerta del baño con mucho cuidado, sin generar ningún tipo de ruido, solo asomaste tu rostro. Sabias con que te ibas encontrar, pero verlo era mil veces mejor que solo imaginarlo.

Nanami estaba bañándose, debajo del chorro de agua con los ojos cerrados, estaba parado de lado por lo que podías ver su perfil, tu mirada empezó analizar sus detalles. Su mandíbula y pómulos tan marcados, su manzana de adán la cual se notaba aún más si uno la mirada desde el lado.

Tu ojos bajaron por su piel, sus pectorales por alguna razón se veían más grandes desde el lado, el agua caía a través de su pecho, haciendo más apetecibles esos grandes pectorales. Sus musculosos y marcados brazos, se dedicaban a esparcir el shampoo por su cabellera rubia.

Sentías como inevitable te empezabas a calentar, verlo desnudo, enjabonarse, con los ojos cerrados. Pero no todo era perfecto, la ducha era de vidrio, pero el vidrio de la mitad hacía abajo era polarizado por lo que solo te dejaba observar un poco más abajo de sus pectorales –por que compramos esa ducha?– pensaste.

Sin esperar más, afuera del baño te desnudaste dejando todas prendas sobre la cama. Volviste al baño abriendo la puerta esta vez lo suficiente para poder pasar, pero aun así sin hacer ningún ruido.

Cerraste la puerta al ya estar dentro, caminaste hacia la ducha y con cuidado abriste la puerta de vidrio de la ducha, Nanami escucho el ruido de la ducha abriste por lo que de inmediato abrió los ojos y al verte sonrío.

Lo miraste e inevitablemente bajaste tu mirada por su cuerpo.

—Ulalala~— dijiste al ya poder ver todo lo que querías e inevitablemente sonreíste.

—Esa malvada sonrisa dice mucho— dijo riendo entre dientes y estiró sus brazos dando entender que entres junto a él y lo abraces.

Ambos se abrazaron quedando totalmente apegados uno al otro, quedando debajo del chorro de agua, tu cuerpo con rapidez ya estaba totalmente mojado.