Milagrosa y desastres

CAPITULO 11; La Princesa Enojada.

Nota del autor;

Nada de esto me pertenece bla bla bla ... pero lo que si me pertenece son mis historias ... XD

Es posible que haiga errores ortográficos en esta historia.

Advertencia; Este capítulo contiene materia sensible para algunos lectores (Advertidos).

Este capítulo cuanta con la colaboración de GomezG91535528

Para Una mejor comprensión de la lectura se ocuparán las siguientes expresiones en ciertos momentos como;

= 'pensamiento'

= *- llamada telefónica/aparatos eléctricos/bocinas

= ▲- 'hablan Demonios/kwamis'

En el cuarto de Rose se podía ver a esta sentada en su cama mientras bebía con desesperación una botella de agua, odiaba admitirlo, pero dejarse llevar por sus emociones le pasaba factura, aunque no podía negar que le encantaba oír la voz de su novia cuando la hacía llegar al cielo.

Esperando poder resistir un poco más el dolor que sentía en la cabeza, así como el del pecho que empezaba crecer fuertemente, aunque realmente creía que era por el "ejercicio realizado" y la velocidad y lo fría que estaba el agua que tomaba.

-Oye linda-dijo tiernamente Juleka mientras empezaba a acariciarle la espalda amorosamente

-No te habías puesto tan enérgica desde mi cumpleaños-dijo con una sonrisa

-Que no le puedo mostrar mi amor, a la dueña de mi corazón-dijo Rose con una voz cariñosa, relegándose a Juleka con la esperanza que no viera el dolor reflejado en su rostro.

-Oye sabes quería preguntarte algo que había estado pensando desde hace poco-dijo Juleka mientras se enderezaba haciendo que Rose también lo hiciera-Te has preguntado como seria estar con un chico, pues estaba pensando que podríamos conseguir un...-aunque Rose solo había logrado oír hasta "chico", pues después de esa palabra que solo hizo que aumentara el dolor en su pecho, pues después de eso solo oía...

)) - Bii... - ((

Rose sentía un hueco en su estómago, mientras sentía que todos los malestares que la agobiaban aumentaban de golpe, sin más remedio se apresuró a abrir el cajón de su bureo buscando su medicina con desesperación, pero todas las cajas dentro de este estaban vacías, pero de repente todo a su alrededor se volviera borroso antes de caer en el suelo al desmayarse...

Asustada Juleka se levantó de la cama y sujeto entre sus brazos a Rose, y sin importarle que solo traía sus pantis puestos.

- ¡Señora Lavillant, Señora Lavillant! -grito mientras entraba en pánico y veía a Rose tener un ataque epiléptico- ¡Señora Lavillant, por favor venga rápido...! -...

=hospital académico centro de parís=

En la sala de espera del hospital, se podía ver a Juleka la cual vestía su ropa habitual la cual consistía en una camiseta negra sin mangas con un cuello alto y sobre esta una blusa manga corta de encaje traslúcida oscura con un motivo floral. En sus manos traía unos guantes oscuros con detalles de encaje traslúcido, así como unos leggins morados y con tenis negros con suelas y agujetas blancas, pero al contrario de sus colores habituales que consistían en el negro y morado oscuro, traía puesta una cazadora rosa la cual le quedaba muy chica.

Juleka veía el piso, perdida en el blanco azulejo del hospital sin notar como una mujer mayor la cual, era de cabello rubio que le llegaba a los hombros, esta vestía una bata de hospital con un gafete de su nombre "Doctora en jefe, Agathe Lavillant", la cual se le acerco con un café caliente en sus manos.