Ojos que no ven... - Changlix

Three

Minho llevaba a rastras a Jisung por los pasillos del instituto, sin importarle las quejas del menor ni las miradas curiosas de los demás estudiantes.

Llegaron hasta los baños más alejados del edificio y al entrar habían 2 chicos lavando su manos, con una seña de cabeza Minho les indicó que se fueran y estos obedecieron sin rechistar, la mirada furiosa del mayor asustaba a cualquiera que lo viera, Minho reviso cada cubículo para cerciorarse de que no había nadie más en el lugar para cerrar con seguro la puerta principal del baño.

Jisung estaba parado en medio del lugar sin saber que hacer, viendo cómo Minho caminada de un lado a otro con una mano en su cadera y la otra pasando su cabello hacia atrás, la única vez que lo vio igual fue cuando el tenía 12 años y el mayor 14, le reveló que había dado su primer beso a uno de sus vecinos en una fiesta que había organizado su madre en casa, Minho se había molestado pero solo lo reprendió por hacer tales cosas a esa edad, como si no hubiera hecho cosas peores a los doce.

Pero esta vez era diferente, se le veía molesto, realmente enojado y a la vez con un poco de decepción en su semblante; Jisung comenzó a temblar cuando el mayor detuvo sus movimientos para pararse frente a él, con cierta distancia pero lo suficientemente cerca para ver la ira en sus ojos.

-¿Me puedes repetir la reverenda estupidez que dijiste allá afuera?-

-¿Que tiene? No soy virgen, y qué?- dijo Jisung con la mirada gacha.

-¿Como que "y qué", Jisung-ah?- respondió Minho con un tono de voz más alto.

-Tu no eres virgen tampoco y desde hace mucho antes que yo, ¿Cual es el problema?- soltó Jisung con molestia en su voz

-El problema, Jisung- Minho se acercaba al menor, este retrocedía a cada paso, quedándose sin espacio hasta que chocó con una pared, ahí fue cuando Minho lo apresó contra la pared con una mano al lado de su cabeza -Es que tu no eres yo, yo soy mayor y maduro, tengo conciencia de lo que hago con mi cuerpo, ¿Que sabrás tu de sexo con trece años?-

Jisung dirigió su mirada hasta los ojos de Minho, quien mantenía su expresión molestia pero con altanería en su mirar, Jisung no se dejo intimidar, estaba cansado de eso.

-Primero, tengo catorce estúpido, ¿Porque te importa tanto mi vida amorosa y sexual? No es nada del otro mundo- 

-Jisung me preocupas, aunque no lo creas solo no quiero que mi amigo salga lastimado y ya, es todo- mintió de la mejor manera Minho.

-Pues deberías de preocuparte menos, tu enojo no evitará que me acueste con alguien- dijo Jisung de manera relajada, sin darse cuenta que Minho, ante lo último dicho, apretaba su mandíbula de enojo.

Minho no midió su fuerza, su cordura se había ido y solo sus celos controlaban su raciocinio, una de sus manos fue a parar al cuello de Jisung, tratando con lo poco que le quedaba de paciencia no apretar de más, al menos lo suficiente para imponer su autoridad.

-¿Te atreves a decirme a la cara que te acostarás con quién sea?- dijo con voz grave pero calmada, con una calma la cual no sabía que tenía.

-¿Que t-tiene?- Jisung trataba de generar algo coherente, no porque le faltará aire, el estar tan cerca y en una posición poco favorable con Minho le ponía nervioso, demasiado -No debería i-importarte quien me folla o...o no-

-Me importa porque quien te folla no soy yo- dijo el mayor sin pensar.

Reparando en lo que dijo Minho pensó en que ya no había vuelta atrás, lo había confesado, lo hecho, hecho estaba.