Kuroko no Basket: KagaKuro one-shots

Grupo de estudio

Kuroko Tetsuya.
—¡Kuroko!, espabila, estás en las nubes, hombre—me grita el capitán.

"Y yo que culpa tengo si me he quedado atrapado después de ver el último mate de Kagami".

Para colmo, al final del entrenamiento se quita la camiseta y veo como una gota de sudor se desliza por su espalda, rozando cada músculo, y me dan unas ganas tremendas de atraparla para que deje de tocar toda esa piel vedada para mí.

—Kuroko kun...Kuroko kun...

—¿Eh?

Otra vez el capitán me distrae de mis pensamientos sobre Kagami, veo su gran mano moverse entre mis ojos y el cuerpo del pelirrojo, y me parece ver que Kagami me está mirando de reojo, sonriendo con una expresión extraña, creo que se ha dado cuenta de que lo miraba alelado.

—Quiero hablar con vosotros—nos dice el capitán—¡Eh, los de primero, a formar!

—¡Si Senpai!—gritamos todos.

—Tengo aquí los resultados de los últimos exámenes, y no son nada buenos. Dice el jefe de estudios que si esto no mejora, se acabó el campamento de baloncesto, en su lugar, tendréis clases de repaso.

Varios gruñidos de protesta se oyen entre todos nosotros, y el más afectado, parece ser Kagami.

—¡Tú Bakagami!, deja de protestar, eres el peor de todos.

—Si señor.

—Hemos pensado que os vamos poner a estudiar por parejas, ya que en general parece que os compenetráis bien, por ejemplo...¿Kuroko kun?

—¿Si?

—Tú vas con Kagami, él va mal en todo, y tus notas son aceptables, salvo en inglés, y ahí Kagami puede ayudarte a ti, ¿se entiende la idea?, pues aquí tenéis la lista y vuestras tareas, mirad con quien os toca, ¿está claro?

—¡Si Senpai!

El capitán reparte los papeles y todos los revisan para encontrar a sus parejas de estudio, pero yo tengo que cambiar de compañero, no puedo pasarme los próximos días pegado a Kagami, bastante tengo con verlo en los entrenos, no quiero pensar en quedarme a solas con él, o en que acabemos estudiando en su casa, en su cuarto, al lado de su cama...

—Kuroko kun—mierda, Kagami me llama, pero yo le hago un gesto y me acerco al capitán.

—¿Podemos hablar?, ¿hay alguna posibilidad de cambiar de pareja?—le pregunto.

—Es imposible, nos ha costado cuadrar bien a todos con los horarios, los entrenamientos y las asignaturas buenas y malas de cada uno.

—Es que...

—Vamos, Kagami y tú hacéis una pareja estupenda—replica Izuki con una risita y el capitán le da un codazo—quiero decir, para estudiar.

—Venga, en la pista os entendéis a la perfección, seguro que puedes enseñarle muchas cosas y él también a ti.

"Eso es lo malo, que puede enseñarme demasiado..."

—Es que creo que ya pasamos mucho tiempo juntos—le explico.

—Mejor, así se le pega algo de tu inteligencia...¿tú qué opinas, Kagami?, ¿tienes alguna queja de tu pareja?

—Es Kuroko, ¿por qué me iba a quejar?

El maldito me sonríe con una pose sensual sujetando su chaqueta del uniforme sobre su hombro, y disimulo mirando el papel que me han dado los Senpais.

—¿Esto es un club deportivo o un campo de concentración?—pregunto mirando los horarios con horror.

—No queremos gente idiota en el equipo, si queréis venir al campamento el fin de semana, es lo que hay.