Cartas para Tae (KookV)

Final

Era un día soleado. No había ni una nube en el cielo, los pájaros cantaban, las flores parecían más radiantes que nunca.

Pero Taehyung no. Taehyung no brillaba, porque el único sol, la única luz que él quería a su lado, no estaba.

Jimin, su mejor amigo, se había ido hacía apenas unos minutos, después de haber pasado toda la mañana con él. Y es que Taehyung le había llamado esa misma mañana, llorando, al ver el titular principal de las noticias de ese día.

"Un total de 57 heridos y 18 muertos tras el último ataque declaran la retirada de las tropas coreanas del territorio donde se realizaba la actuación"

Era la tropa donde estaba Jungkook, y no había recibido ningún mensaje, ninguna señal de que estuviera bien. Al ver el número de fallecidos, entró en pánico, llamando así a Jimin, quien no dudo en ir a consolarle y decirle que aún no se sabía si Jungkook era uno de esos dieciocho.

Ahora, Taehyung, miraba el techo del salón, tumbado en el sofá. Ese sofá donde Taehyung y Jungkook habían compartido tantos momentos juntos, momentos de felicidad. Momentos que ahora nublaban los ojos de Taehyung de lágrimas al recordarlos. 

Estiró el brazo, cogiendo la fotografía, puesta sobre la mesita junto al sofá, de él y su novio en la playa, unos meses antes de su servicio. En ella salían sentados en la arena, Taehyung entre las piernas de su novio y apoyado sobre su pecho. Jungkook le abrazaba la cintura, mientras le besaba la mejilla. El atardecer tras ellos se mostraba brillante y espléndido, como su felicidad en aquel momento junto al mar.

Miró por la ventana y vio que justo en ese momento, un atardecer igual de bello se mostraba, anunciando el próximo final del día. Entonces suspiró, con pequeñas lágrimas escapando de sus ojos.

-Prometo que cuando vuelva, compraremos una casa mucho más grande que esta- le había dicho Jungkook entre besos, mientras bailaban junto al mar, simplemente balanceándose de un lado a otro.

Taehyung sonrió y cogió sus mejillas con amor.

-Pero a mí me gusta nuestra casa de ahora.

Entonces Jungkook había juntado sus frentes, ambos cerrando los ojos ante el contacto.

-Pero, amor, ¿no es una casa demasiado pequeña para formar una familia?

Y fue ahí cuando Taehyung sonrió, llorando de alegría ante la idea de una familia con su amado.

Taehyung recordaba ese día como si fuera ayer, cuando en realidad habían pasado meses. Suspiró una vez más, secando sus lágrimas y levantándose del sofá, decidiendo salir un poco a tomar el aire.

Abrió la puerta, siendo recibido por una ráfaga de aire fresco. Salió al patio frontal, simplemente admirando las vistas.

Justo en ese momento, un coche negro aparcó unos metros más adelante. Taehyung no lo había visto en su vida. 

Frunció el ceño extrañado, acercándose levemente para ver si lograba ver a la persona que bajaba del asiento trasero.

Estaba un poco más alto, un poco más delgado, pero más fuerte que la última vez que le había visto. Su pelo había crecido con rapidez, cayéndole sobre la frente de forma desordenada. 

Y sus ojos.

Sus ojos brillaron cuando vio a su amado, viéndole desde la puerta, sin poder moverse de la emoción.

El mundo se congeló, solo eran ellos dos.

Entonces Taehyung comenzó a llorar.

-J-Jungkook...- susurró, antes de correr como nunca hacia su novio, quien abrió los brazos para recibirle- ¡Jungkook!

Se lanzó a sus brazos, envolviendo sus piernas en su cintura, mientras que Jungkook envolvía sus fuertes brazos alrededor de su espalda. Ambos lloraban desconsoladamente, pues pensaban que ese momento jamás llegaría.

-P-Pensé que no te volvería a v-ver- dijo Taehyung, entre hipidos, todavía abrazándole fuerte. Jungkook asintió, pues él había creído lo mismo-. Temí q-que no volvieras a casa.

Jungkook lloraba, tanto que se le hacía difícil respirar. Separó a Taehyung de su cuerpo, todavía con las piernas de este en su cintura, solo para poder mirarle a la cara. Llevó una de sus manos a su mejilla, acariciándola y secando sus lágrimas.

-Pero ya estoy aquí, mi amor- dijo Jungkook, entre sollozos, con una sonrisa-. Ya podemos formar nuestra familia, mi vida.

Ambos sonrieron, antes de que Taehyung cogiera sus mejillas y se agachara para besarle, pues todavía seguía agarrado a él. Se besaron con tanto amor, que nuevas lágrimas aparecieron en sus rostros, de pura e inmensa felicidad.

Tras unos segundos, volvieron a abrazarse, Jungkook rodando con Taehyung entre sus brazos. Ahora reían y sonreían, pues estaban juntos de nuevo.

-Te amo- dijo Jungkook, provocando que la sonrisa en Taehyung se ensanchara aún más-. Te amo, y quiero de verdad estar toda mi vida contigo, Kim Taehyung.

-Yo también quiero, Jeon Jungkook- susurró, rozando sus narices, cerrando los ojos.

-Entonces vamos a casarnos- dijo, sin ningún tipo de vacilación. Taehyung le miró a los ojos con emoción-. Casémonos, por favor. Una ceremonia pequeña, con Jimin, Yoongi, nuestros padres, Namjoon, Seokjin, Hoseok, no hace falta mucho, solo-

Y entonces Taehyung le besó de nuevo, con el corazón acelerado ante la idea.

-Sí quiero, amor- susurró sobre sus labios-. Sí quiero.

Jungkook suspiró, atrayéndole por la nuca para besarle profundamente.

Esa noche fue oficial, Jeon Jungkook y Kim Taehyung estaban prometidos,

Pero más importante, estaban enormemente enamorados.

FIN

. . .

Espero que os haya gustado esta mini historia!! Estaba la idea en borradores, pero decidí publicarla mientras me encargo de el resto de historias :) Espero que hayáis disfrutado leyendo tanto como yo escribiendo. Un abrazo muy fuerte.