Amistad sospechosamente cercana

Patinaje

Domingo, hoy se suponía que visitaramos a nuestras madres.

Al llegar al apartamento no estaban allí, solo había una nota pegada en la puerta con cinta adhesiva y unos boletos para una pista de patinaje. La nota decía:

Para Izuku y Shoto

Izuku no dudó en tomar la nota y leerla en voz alta.

"Hijos nuestros. Últimamente no han tenido mucho tiempo libre, así que decidimos prepararles una cita."

"Oh" soltó al terminar de leer la oración junto a un color carmesí en sus mejillas.

Terminó de leer el mensaje

"Esperamos que se diviertan. Con amor:  sus mamás."

"Parece que los dioses te han escuchado Shoto."

"De qué hablas?"

"No que querías tener una cita?"

"Jamás dije eso."

"Pero lo pensaste." Dijo mientras cruzaba sus brazos.

Cojí los boletos que Izuku aguantaba y caminé hacia el ascensor con el corriendo detrás de mi para alcanzarme.

"Porque te fuiste derrepente."

"No deberíamos malgastar el preciado tiempo de nuestra cita ahí, verdad?" Respondí sonriendo mientras entrábamos al elevador. Se sonrojó tanto que parece una fresa.

Mi sonrisa se volvió más visible y decidí darle un beso.
Fue un beso torpe.

Izuku parecía poder desmayarse en cualquier momento, lo cual me hizo entrar en pánico.

"Amor, estás bien?"

"S-si" sus ojos son espirales, literalmente.

Llegamos a la planta de abajo, la puerta se abrió. Izuku no se movía del lugar, así que lo cargé hacia afuera de el elevador.

Esperé un minuto, al ver que no sé calmaba, decidí volver a cargarlo y llevarlo hacia la pista de patinaje por mi cuenta.

Un rato después volvió a la normalidad y lo bajé.

Caminamos por unos minutos, hasta nos perdimos un poco, pero lo arreglamos con Google maps.

De lo lejos vimos a un gran edificio, en ese edificio está la pista.

Me viré al sentir miradas encima nuestro, pero no logré ver a nadie. He sentido esas miradas por un buen rato, nos estarán persiguiendo?
Le resté importancia al asunto y entré al edificio junto junto Izuku.

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"Casi nos atrapan imbéciles!" Dijo un rubio de ojos rojos, atrás de una muralla.

"Perdon, pero como coño se supone que supiera que se voltearía, Katsuki?" Respondió una muchacha de baja altura.

"Si tuvieras más cuidado no te habría visto, kirbi."

Un chico de cabello rubio con un rallo negro intervino en la conversación. "Chicos, chicos, calmense."

"Tu callate pikachu."

"Callense, todos ustedes." "Tu no me dices que hacer mesa de crafteo!"

Shinso, un muchacho de pelo morado con ojeras miraba la peléa de sus amigos Momo, Denki, Ochaco, y Katsuki. Aunque no está seguro sobre ser un amigo de la bomba andante.

"Oigan" empezó el chico, interfiriendo en la pelea "Porqué tengo que acompañarlos? Además, porqué los perseguimos? Y, por cierto, esta ropa nos hace ver como acosadores."

"Porque dices eso.?" Preguntó la pelinergra. Shinso la miró de forma incrédula. Todos ellos tenían puesto un sweater negro y una gorra de el mismo color. No podían verse más sospechosos.

"Amigos." Dijo Denki

"Que pasa?" Preguntó Ochaco.

"Los perdimos."

La del pelo castaño fue rápidamente hacia la entrada "Entren, rápido." Dijo al caminar.

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Al terminar de ponernos los patines caminamos hacia la pista. A Izuku se le dificulta caminar con ellos, pero lo está haciendo bastante bien. Al entrar a la pista y alejarme un poco de la entrada de ella, noté que el tenía problemas al patinar, se aguantaba de él borde del lugar.

Me acerco a él.

"Amor, todo bien?"

"Si, no te preocupes por mí."

Lo miré por un momento.

"No sabes patinar?"

"No, no. Solo necesito acostumbrarme a estar en patines, no te preocupes por mí, tu sigue."

"Si quieres te ayudo."

"No, tu vé. Estoy bien."

Suspiré. Es tan testarudo.

Tomé su mano y lo llevé conmigo, patinando hacia el centro.

"Shoto, me voy a caer!" Exclamó.

Paré en el medio de la pista y lo abrazé. Inmediatamente se acurrucó contra mí.

"Tienes frío?"

"Un poco. Pero estoy bien." Respondió mirándome con su típica, pero hermosa y gran sonrisa.
Detalles como esto hacen que me vuelva a enamorar de el a diario.

Me alejé un poco de el sin soltar su mano.

"A donde vas?" Preguntó preocupado.

Que lindo.

"Te enseñaré a patinar, no será más difícil que pelear contra villanos, así que no tengas miedo.

"No tengo miedo." Respondió al momento intentando verse intimidante. No pude evitar reír, me recuerda al patito con un cuchillo.

"Ven amor, empezemos."

Nos movimos un poco, casí se cae, pero logré agarrarlo. Quedamos en silencio por un momento, tampoco nos movemos.

Izuku se empezó a parar de forma derecha "Gracias."

"De nada" Respondí "Continuemos."

Fuí al lado de él y le expliqué como moverse. Después de unos 10 minutos dejó de caerse y pudo moverse por su cuenta.

Patinando juntos dando vueltas por toda la pista, Izuku aveces perdía el balance y se aguantaba de mí desesperadamente. Nos divertimos mucho, pero una hora después nos cansamos.

Nuestras barrigas rugen.

Nos cambiamos los zapatos y salimos del lugar, caminando hacia la ciudad.

Hola chicos

Espero que les haya gustado ;)

Hasta la proxima <3