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"Entonces, Ben tuvo una cita con Nelliel".

Tia estaba en la sala de estar de la casa Tennyson. Las Tres Bestias estaban todas sentadas, cada una con una expresión de enojo en su rostro.

"No puedo creer que esa perra se nos haya adelantado", gruñó Apacci enojado.

Mila Rose y Sung-Sun no dijeron nada, pero las miradas en sus caras mostraban claramente que sentían lo mismo. Tia suspiró al verlo.

"Puede que a ustedes tres no les guste, pero Nelliel es parte de nuestro ... pequeño grupo. Ustedes tres tendrán que aceptar esto".

Las chicas miraron al suelo. Sabían que su ama tenía razón, pero eso no mejoraba las cosas. Podían tolerar tener que compartir a Ben entre ellos y con Harribel-sama. Pero Nelliel, Nelliel era literalmente la quinta rueda en su opinión. Tal vez el hecho de que Nelliel los puso de los nervios cuando era niña fue otra razón.

Tia luchó contra el impulso de suspirar de nuevo. Sabía que iba a necesitar algún ajuste, pero era lo mejor. Quizás tener que compartir con Ben podría enseñarles a todos a llevarse bien entre ellos. Decidió llevar su presencia a otra parte y subió a la habitación de Ben. Así era como lo había dejado antes de irse a su cita. Por supuesto, la cita fue tan repentina después de todo. Tia sonrió un poco al recordar la noche anterior, la sensación de que su amado la abrazaba tan estrechamente pero seguía siendo tan tímida. Esperaba no haberlo hecho sentir incómodo con un movimiento tan audaz. Después de todo, todavía tenía dieciséis años.

Pero entonces sus cavilaciones fueron interrumpidas por un rasguño en la ventana. Confundida, Tia se volvió y vio un gato negro en la ventana, manoseando el cristal. Tía se tomó un momento para preguntarse cómo llegó un gato allí, se acercó a la ventana y la abrió. El gato saltó dentro en el momento en que ella lo hizo.

"Hola, pequeña", dijo Tia en voz baja. "¿De donde vienes?"

Luego, para su sorpresa, el gato pareció sonreír. "Hola, Tia", respondió con voz masculina.

Tia se sorprendió por esto. ¿Un gato que habla? Seguro que había visto muchas cosas extrañas antes, pero ...

"¿Te conozco?"

"Sí, pero no me has visto en esta forma antes", dijo el gato. "Soy Yoruichi."

"¿Y… Yoruichi? No sabía que pudieras convertirte en un gato."

"Hay muchas de mis habilidades que no conoces", dijo Yoruichi.

"¿Pero por qué suenas como un hombre?"

"Efecto secundario de la transformación", explicó Yoruichi. "Aunque es divertido cuando le muestro mi verdadera forma a la gente por primera vez". Ella se rió entre dientes. "El pobre Ichigo casi sufre un infarto."

"Me lo puedo imaginar", dijo Tia. "Entonces, ¿qué te trae por aquí, Yoruichi?"

Yoruichi miró alrededor de la habitación, luego a la puerta. Tia se dio cuenta de su preocupación y se acercó a cerrarla. Una vez que lo hizo, Yoruichi saltó a la cama.

"Ya hablé de esto con todos los demás en Los Soledad, pero estabas inconsciente en ese momento", le dijo Yoruichi a Tia. Luego pasó a explicar lo que ya les había dicho a todos los demás. Sobre cómo la Sociedad de Almas le tenía miedo a Ben debido a todas las cosas que hizo y podía hacer, sobre cómo su plan de buena voluntad para convertir a Hollows en Arrancar podría confundirse con un juego de poder, y todo lo demás. La conversación se contó en voz baja para no molestar a la familia Tennyson y al final de la misma, Tia se sintió triste.

"Lo siento, pero tienes derecho a saber", le dijo Yoruichi. "Los Central 46 están lo suficientemente molestos porque tú, Arrancar, estás en el mundo humano y fue pura suerte que Yamamoto los convenciera de que no harías nada".

Hollow 10Donde viven las historias. Descúbrelo ahora