" Cyber Love " [Carligor]

Un poco de mi.

● Igor es una persona normal.

● Cambio de edades para que concuerden los tiempos.

● Angust. (Violencia)

~

La mañana de su cumpleaños número 23, estaba siendo demasiado tranquila, mucho para su gusto.

Se levantó de su cómoda cama, revolviendo su cabello y caminó hasta la puerta, sorprendiendo se al encontrar una caja afuera de su habitación.

Muy curioso la cargo y la dejo en sobre su cama para abrirla, con calma.
Solo al quitar las tapas de cartón encontró un sobre perfectamente sellado con unas siglas que no conocía.

Adentro del sobre venían varias hojas con instrucciones, consejos, demasiada información. Hasta que el la ultima página venía su nombre, leyendo atentamente.

《"Igor Chernyshev, eres de los pocos afortunados en obtener una alma gemela. Como sabrás el tiny adentro de la caja será a quien más debes cuidar y querer como si fuese el objeto más valioso del mundo. Tendrás el tiempo necesario para convivir con el pequeño hasta que encuentres a su versión humana.
Disfruta de esta maravilla que nos regala la vida, por cierto no puedes cambiarlo ni devolverlo. El destino así lo deseó.
Atte: Oracle."》

Aún más sorprendido miro la hoja, aturdido saco el papel de plástico que envolvía la cápsula. Una pequeña y moderna casita se veía en el interior.

Busco unas tijeras y corto las esquinas de la caja, revelando por completo la casita, admiraba lo bien detallada que estaba, los adornos y las pequeñas plantas que servían de decoración.

Al interior se escucharon unos ruidos, pacientemente espero a que el tiny se mostrara.

La puertecita se abrió, revelando un pequeño rubio cenizo de ojos azules, vestía muy formal y con mucho estilo.

— uhm... Bienvenido eh...— Igor aún seguia en shock, se suponía que a los 15 te llegaba tu tiny incluso había olvidado todo del asunto.

El pequeño le sonrió feliz.— Yo soy Carlo Gambino, por favor tratarme bien!

Era demasiado adorable, no pudo resistir ante su ternura y asintió.— Yo soy Igor.

Su convivencia al principio fue un poco incómoda por parte del ruso, no sabía que hacer en una situación así, hace tiempo habría estado muy feliz por recibir semejante regalo.

Le tenía cariño a Carlo, pero dudaba de sentir otro sentimiento. Con esa idea se empezó a alejar del pequeño por su bien.
Todos los días estaba ocupado y no prestaba atención a lo que el mini necesitaba.

Así que el rubio llamaba su atención haciendo cosas diferentes para impresionar, solo quería un poco de tiempo, pero al ser cruelmente ignorado su pequeño corazón dolía de tristeza.

Apagando la ilusión que tenía, culpando se de que pasaría lo mismo que con ella, repitiendo la historia.

Igor cada vez estaba muy estresado y agobiado entre la universidad, el trabajo, los problemas con sus padres aumentaban y sus hermanos le recordaban siempre que tener al tiny era un error en su vida.

— ¿Que voy a hacer contigo?, Dios no puedo con esto... Es demasiado.

Carlo miraba desde su casita como Igor se lamentaba de cuidarlo, talvez la mejor decisión era irse y dejarle. — Igor solo quería que salvaras a mi yo humano...

En su pequeña mochila guardo varias cosas muy importantes, espero a cuando fuera de madrugada y salió de la casa mientras lloraba en silencio.

Dejando como recuerdo un pequeño peluche que Igor le compró al día siguiente de conocerse.