Tiny Tan ||Taekook|| ADAPTACIÓN

✨ Dieciocho✨

El lugar estaba plagado de criaturas mágicas. La fiesta era una celebración de aniversario de una pareja de destinados, era una fiesta al amor y a la magia por lo que los pequeños Tiny's corrían de un lado a otro celebrando la unión de esos dos corazones.

Había autitos transportando a más de una pareja de Tiny's, también había meseros que atendían hasta el más absurdo de sus deseos. Los Tiny's se caracterizaban por ser caprichosos. Había juegos mecánicos donde los pequeños disfrutaban y un sin fin de atracciones para entretener a los pequeños seres mágicos.

La magia podía sentirse en el aire pues, aunque los Tiny Tan eran las únicas criaturas mágicas invitadas, había hadas, elfos, ninfas, anjanas, duendes, sílfides y un montón de otras criaturas que habían llegado a acompañar. Estás se mantenían fuera del ojo humano pero varios de ellos eran conscientes de su presencia.

Todo gracias al guardián.

Hoseok caminaba por el lugar saludando a todos y hablando sin parar. Para ninguno era extraño aunque debería serlo, Hoseok conocía a todos y cada uno de los presentes que estaban emparejados y con un Tiny Tan al hombro, nunca nadie pensó en preguntar, la mayoría asumió que se conocían a través de alguien más.

Pero era el guardián que buscaba la forma de siempre cuidar de aquellas criaturas de las cuales estaba completamente enamorado.

Tomó una charola con postres y salió al jardín. Dentro de aquel recinto la música se escuchaba alertando el ambiente, los festejados sonreían y los emparejados celebraban con ellos.

Todos mostraban su felicidad.

- Hacía tanto tiempo que no había tanta magia junta - habló una pequeña hada sentándose en el regazo del guardián.

Tener a uno de los guardianes de las criaturas les hacía tanto bien, les llenaba de paz y seguridad. Se sentían plenos a su lado.

- Lo sé, me hace feliz saber que hoy es posible.

- Hay algo extraño en el ambiente - mencionó una pequeña Driada mirando a su alrededor.

No es como si fuera muy difícil de adivinar pero la verdad era que, después de tanto tiempo de no mantener contacto con los Tiny Tan, ahora les hacía un poco complicado saber qué había cambiado.

- Sí pero no es nada por lo que deban preocuparse.

- Si no es nada de qué preocuparse entonces estamos bien - dijo Anjana sentándose a un lado de Hobi.

Las criaturas pequeñas eran las que estaban cerca, las más grandes, aquellas que protegían los bosques, la naturaleza y a los más pequeños, se mantenían en su sitio cuidando y aguardando que todo estuviera bien.

Pasaron varios minutos contemplando el cielo y las estrellas, la noche había caído y el guardián se sentía pleno.

Hasta que hubo un revuelo escuchándose cerca. Había un gran autito transportando a seis Tiny's, los conocía como al resto y sabía que las cosas podrían perder su calma por algunos minutos.

- ¡Necesito respuestas! - gritó un pequeño de cabellera rubia. Su compañero, aquel pequeño azabache de tez clara, se aferraba al torso del contrario con una mano mientras que con la otra trataba de no caer. Podía ver como Suga conducía a toda velocidad y Chim junto a Jinnie brincaban en la parte trasera comiendo algunos bocadillos, RM se mantenía sentado en el asiento del copiloto aferrado con ambas manos para no caer.

Cosa que fue inútil porque el autito que los transportaba se trabo y después se volcó a un lado haciendo que sus integrantes cayeran.

Kookie lloraba aferrado al cuerpecito de V mientras Jinnie y Chim reían a carcajadas, Suga se dejó caer sobre el pasto rendido y asustado mientras que RM trataba de ponerse de pie.

- Deberías ser más responsable al conducir Suga - el guardián reto suavemente al irresponsable conductor.

Se acercó y tomó uno a uno cada Tiny, los acomodo en sus brazos y caminó con ellos hasta volver a su lugar. Mientras unos se acurrucaban, otros suspiraban, sólo uno se mantenía inquieto y molesto.

- Tranquilízate V, te hará daño - hablo Hobi una vez que se acomodó en su antiguo sitio.

Una ninfa tomó a Jinnie y la hizo bailar con ella girando de un lado a otro. Chim brincaba pidiendo ser el siguiente pero Suga se había aferrado a su espalda sintiéndose adolorido después del accidente. Anjana tomó a Kookie en sus brazos y comenzó a mecerlo como si de un bebé se tratara, RM se colocó a lado del hada y la miró detenidamente, le encantaba poder ver de cerca a otras criaturas.

- ¿¡Porque hay varios Tiny's emparejados sin su lazo!? - grito V con molestia pero más que nada terror.

V estaba muy asustado, él sabía lo que eso significaba y no le gustaba.

- No es lo que piensas...

- ¡Lo que pienso en que es irresponsable! ¡Todos ellos desaparecerán al no unirse con sus destinados correctos, el hilo rojo se desvanecera y todo habrá terminado para aquellos seres!

- Las cosas han cambiado V. Tú eres de los pocos Tiny's que han logrado que sus humanos se acepten y se unan. Hay tantos pequeños que no corrieron con tu suerte así que las reglas están cambiando. No podemos permitirnos perder a más de ustedes.

- ¿Qué quiere decir con eso? - preguntó Suga después de ser abandonado por Chim para ir a bailar con las ninfas.

- Quiere decir que el orden ha cambiado. Ustedes llegaron cuando las almas de sus humanos se cruzaron y establecieron la conexión, nosotros estamos aquí cuando nuestros humanos crearon un vínculo, ahora nuestro trabajo es que conecten correctamente, que trabajen por ello - explicó RM.

Él había sido de los pocos Tiny's que sabía demasiado del mundo humano y de su función como imán. Él había visto su lazo y lo había seguido, le había costado mucho trabajo encontrar los dos extremos correctamente pues los hilos rojos se cruzaban unos sobre otros pero cuando lo logró supo que el humano que representaba era destinado de una chica y no de Seokjin. Así como logró averiguar que el destinado de Seokjin era una de las personas que más daño le había hecho cuando era niños.

RM agradecía que las cosas cambiarán, si bien, Seokjin y Namjoon no eran destinados naturales bien podían complementarse y crear el lazo.

Tenía fe en ello.

- Entonces...

- Quiere decir que ya no existe el riesgo de desaparición si no se unen o tardan en aceptarse, tenemos un poco más de vida en el mundo humano.

V pensó en aquello y no sabia que sentir. Por un lado le molestaba saber que él fue de los últimos en tener un destino natural lo cual significaba desaparecer en cualquier momento si los humanos negaban su conexión pero por otro lado le alegraba saber que los Tiny's tenían más oportunidades de vivir sin riesgos.

Ya habían perdido a tantos de ellos que jamás podrían volver.

- ¿Será fácil crear un lazo para ellos? - pregunto V con curiosidad.

Aun cuando Namjoon le había caído mal apenas lo conoció, sabía que él y Seokjin merecían ser felices. Esperaba que pudieran serlo.

- Todo depende de cuanto lo quieran ellos - respondió Hoseok sabiendo que todo iría bien para ese par.