04. Insinuaciones

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Bien, absolutamente había sido una mala idea aceptar ayudar al idiota de Seungyoun.

Wooseok tragó saliva, observando a las parejas disfrutarse en cada rincón de la habitación. Su brazo se enrolló instintivamente en el de Seungyoun mientras avanzaban hacia la mesa en que los hombres de antes se encontraban.

El chico castaño apretó los labios antes de hablar en voz baja: "Trata de no lucir tan pellizcado ¿Bueno?" Wooseok tragó saliva ante el espectáculo.

"Imposible, no estoy acostumbrado a esto. Ni siquiera en el bar gay que trabajo veo esta clase de cosas tan..." Se quedó en silencio cuando finalmente llegaron con los hombres.

"Veo que ya están aquí, ¿Gustan una copa de champaña?" El hombre de nombre desconocido, ofreció con gran entusiasmo. Su corbata estaba deshecha, su cara levemente sonrojada y sus ojos lucían vidriosos. Ugh, definitivamente había recibido un trabajito ahí abajo. Bien, eso explicaba a la chica que estaba arrodillada entre sus piernas. Asqueroso.

"Ya bebimos seis de ellas, pasamos por el momento." Seungyoun indicó con voz casual, evitando sonar rudo. Wooseok tragó saliva, no le gustó para nada la mirada del hombre sobre él.

Ugh, los escalofríos se apoderaron de su espina y amenazaron con quedarse ahí, por lo menos hasta que se fuera de ese lugar oscuro. Cielos, no debió aceptar, pero no tuvo otra opción, ya que Seungyoun prácticamente le rogó que lo ayudara con el contrato, prometiéndole que lo iba a dejar de molestar con este favor. Por ese lado estaba bien, no quería lidiar más con este chico, quien era un idiota de todas las maneras posibles y por lo demás tenía novia.

"¿Tienes el contrato?" El hombre de aspecto libidinoso preguntó. Seungyoun asintió. "Está en mi maletín señor Liu." Indicó con voz neutra.

El hombre sonrió amplio, luego Zhang habló con voz pasiva: "Tomen asiento, y mca saben cómodamente." Dijo con gran desplante, sosteniendo la cintura del chico rubio sobre sus piernas.

Seungyoun asintió, caminó hacia el sofá que rodeaba la pequeña mesita de centro y jaló a Wooseok para sentarlo sobre su regazo.

"Ugh, ¿Qué haces?" Éste se quejó en voz baja, sólo para que Seungyoun lo escuchara. Fingió estar sonriendo para evitar sospechas.

Seungyoun fingió darle un beso en el costado del cuello y le susurró al oído: "Sólo estoy siguiendo el patrón, ¿Acaso no ves como ellos están sentados? Relájate." Lo abrazó enrollando un brazo por la cintura y con el otro comenzó a sacar el documento que se iba a firmar. "La construcción del centro comercial en el lado norte tomará por lo menos alrededor de seis meses hasta un año. No obstante, como se discutió en reuniones anteriores, nuestra empresa garantiza la calidad de la construcción, también el diseño y la vanguardia de éste." Indicó dejando la hoja sobre la mesita.

El señor Liu, se inclinó y comenzó a ojear las hojas. Wooseok mordió su labio inferior con fuerza, sintiéndose bien incómodo al estar sentado en las piernas de Seungyoun, quien no se veía para nada molesto con esto. Ugh, el idiota lo estaba disfrutando, Wooseok lo podía apostar.

"¿A usted le gusta el diseño señor Wooseok?" Zhang preguntó de repente, observando con ojos brillantes a un nervioso Wooseok.

Diablos, el maldito viejo había sostenido una fijación con él. Fantástico, maravilloso. Mierda.

Wooseok tragó saliva, pero no tuvo que esperar mucho para que Seungyoun respondiera por él. Gracias Dios por eso, ugh. "Él no entiende de estos temas, sus intereses son otros." Dijo afianzando su agarre en la cintura de Wooseok. Su voz fue plana.

Zhang sonrió amplio antes de contestar: "¿Quiere que le muestre el diseño señor Wooseok? Los diseñadores de su pareja han hecho un buen trabajo." Se lamió los labios al acabar. Wooseok quiso vomitar y Seungyoun se tensó por completo. Wooseok no pudo ver la expresión de Seungyoun, pero no debe haber sido agradable, porque la mirada sonriente de Zhang cambió muy sutilmente, sus ojos se volvieron cautelosos y un poco sorprendidos. Mierda.

Secretario Personal {Seungseok}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora