Secretario Personal {Seungseok}

07. Ideas molestas

"¿Wooseok quieres un café o prefieres una taza de té?" Yohan, el jefe de Wooseok, señaló con voz amable. El muchachito tragó saliva y señaló lo segundo en el menú. Yohan asintió y luego miró a Hangyul. "¿Y tú?" Inquirió sonriente.

"Después de cenar prefiero matar las grasas con un té de finas hierbas, ¿Tendrán aquí?" Hangyul contestó, acomodándose al pequeño Dohyon, hijo del jefe, en su regazo. Yohan oprimió los labios antes de hablar.

"Um, no está explícito en la carta. Iré a preguntar al mesón, regreso enseguida." Contestó con voz encantadora, levantándose de la silla para ir al lugar mencionado.

Hangyul le dio una larga e intensa mirada y luego puso su atención en Wooseok.

"Has estado muy callado, ¿Pasó algo anoche? Vi que no te quedaste a dormir y el pesado de Seungyoun dijo que te llamó temprano para que lo llevaras a un lugar." Señaló con voz baja. "Sé que es mentira, ¿Te hizo algo?" Indagó curioso.

"¡Manzana!" Dohyon escandalizó de la nada, lanzando un juguete en forma de aquella fruta por el suelo. Wooseok se agachó y lo recogió.

"No es nada." Contestó, entregándole el juguete al pequeño. Hangyul le alzó una ceja, no le creyó nada. Wooseok soltó un soplido. "Tuvimos sexo." Murmuró con voz mortificada.

"Okay," Hangyul susurró con una lamida de labios. "¿Lo tiene pequeño, verdad? De otra manera no me explico la cara de derrota." Soltó una risita divertida. Wooseok se sonrojó.

"¡Ugh, Hangyul!" Se tocó ambas mejillas a la vez. "No es eso, el tamaño está bien." Contestó avergonzado.

"¿Pero?" Hangyul curioseó mirándolo con interés. Wooseok exhaló.

"Pero no me gusta y siento que con esto no me lo voy a poder quitar más de encima." Se quejó escuchándolo reír. "Es atractivo, pero no me gusta su forma de ser. Si tan sólo fuera como el jefe, de seguro que me dejaría aplastar fácilmente por él." Continuó con una mordida de labio. Hangyul rió a carcajadas ahora, al parecer algo que había dicho le causó mucha gracia. "No dije nada gracioso, Hangyul." Wooseok murmuró con un puchero. El rubio a su lado besó la mejilla de Dohyon y respondió.

"Perdona, es que yo me imagino al jefe de otra manera." Se lamió los labios y prosiguió: "Debajo de mi cuerpo por ejemplo." Continuó con una risita, mirando hacia el lugar del chico en cuestión.

Wooseok divisó al jefe, era más alto que ellos dos, de una sonrisa encantadora, un buen cuerpo y sus manos eran grandes, muy bonitas.

"No sé de qué hablas, tienes deseos raros. El jefe es todo un semental. Aparte, es heterosexual." Comentó con una risita, escuchando la de Hangyul. Éste giró la cabeza otra vez y sonrió amplio al contestar.

"Heterosexual, por supuesto." Sus ojos brillaron, Wooseok no pudo evitar notar que estos transmitieron algo, pero de todos modos él era muy malo para descifrar las miradas de los demás. "¿Entonces cómo fue?" Hangyul regresó al tema inicial. "¿Supongo que fue consensuado, verdad?" Preguntó con un tono serio ahora. Wooseok asintió, todo lo que hizo fue por libre albedrío. Hangyul lo estudio en silencio, luego sonrió. "El chico es atractivo, ¿Por qué no le das un chance?" Curioseó con interés. Wooseok soltó una risita divertida, mortificación cruzó por su cara.

"Tiene novia, por lo demás, es un vividor. Se la pasa de cama en cama." Detalló con un soplido. El idiota era una peste,

Wooseok estaba seguro que lo quería sólo para satisfacer sus impulsos sexuales y cuando se cansara lo desecharía como papel de envoltorio, directo al tacho de la basura.

"¿Tiene novia?" Hangyul investigó asombrado. Wooseok asintió. "Es una chica muy bonita, hija del dueño de un conglomerado. Llevan como un año juntos." Explicó a detalle. Hangyul frunció el ceño, observando el rostro de Wooseok.