"PROPIETA NON ESCLUSIVA " Luca x Alberto - ONE-SHOT

"CHICA SOLITARIA"

No se asjafdjh no se que me fume , me puse a pensar como era la vida de Guilia antes de conocer a Alberto y Luca.

* lectura : corta 

* personaje principal : Giulia 

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--muchas gracias Giulia, nos vemos mañana-- dijo una mujer, quien recibía la entrega y a la vez buscaba en su bolsillo aquella bolsa de cuero en la que cargaba un par de monedas.

--no hay de que – soltó la pelirroja, recibió el cambio y con seriedad continuo las entregas restantes.

No es que tuviera muchas la verdad, a lo mucho serian cinco o talvez seis al día , luego de eso no tenía mucho que hacer , todos los días era lo mismo , es decir ,estaba : despertar, desayunar , comenzar las entregas ,descansar un momento en la plaza ,soportar las humillaciones de ciento pelinegro ,almorzar, e irse a aquel árbol que situaba como un lugar especial solo para ella , en el que miraba como muchos niños de su edad compartían y hacían vida social . ella era muy extrovertida sin embargo no podía hacer amigos.

Sumida en sus pensamientos, no se percató como frente suyo el joven que cargaba una chamarra color rosa en el hombro seguido por sus cómplices detuvo la carreta.

-- pero mira quien está aquí, Apestulia! Con... su olor a pescado putrefacto – le dijo imponente mientras asomaba levemente su cabeza hacia la carga de animales marinos que tenía aquel móvil de madera.

Nuevamente la rutina de todos los días, Ercole no desperdiciaba momento en el que pudiese humillarla y denigrarla sacando a la luz cada uno de sus defectos, el ver fallar a la pelirroja de alguna manera satisfacía su existencia.

Intento no demostrar miedo, y aunque tenía ganas de escapar y correr a los brazos de su padre , quien obviamente no tenía idea del acoso que recibía su hija , decidió permanecer firme .

Agacho la cabeza con el ceño fruncido y apretando los puños dijo con seguridad – déjame en paz por favor-

--¿Porque? ¿Herí tus sentimientos? - dijo el contrario vacilando, sabiendo que la menor se estaba fastidiando.

--lárgate! -- grito la menor esta vez levantando la mirada enfrentando, al contrario – solo me molestas porque tienes miedo de que este verano acabe con tu malvado imperio de injusticia! ¡no tienes más que molestar a niños menores que tu porque tu vida es miserable! -- dijo lo último con intención de regresar al manejo de la carreta y continuar con su camino. sin embargo, el mayor la detuvo sosteniéndola por el brazo.

-- ¿te crees graciosa? – el chico alto la empujo a la fuerza y acorralándola junto a sus compinches, la miro con furia extrema.

Giulia trago en seco – déjame por favor – trato de mantenerse serena

-- crees que es divertido burlarte de mí?¿ te parezco un payaso?!--

-- mentiría si digiera que no, pero eso debería decírtelo yo, no haces más que burlarte de mí , de lo que hago , como me visto , lo que me gusta ,das asco!–- replico la menor

Ercole estuvo a punto de arremeter con un golpe, sin embargo, uno de sus secuaces alerto que gente se acercaba .

Los pasos cada vez eran más fuertes, ambos giraron rápidamente hacia el origen del sonido, una Señora con su hijo en brazos paso tranquilamente observando despreocupada la escena que parecía totalmente inocente. cuando termino de pasar Ercole se reincorporo mirando de vuelta a la pelirroja.

-- El respeto se basa en jerarquía niña, y tú no eres más que una estúpida niña pesquera – empujo tan fuerte a la menor que cayó al suelo. seguido, se retiró chocando palmas con sus compinches que reían nerviosos, tal parece que ellos si tenían conciencia y sabían que lo que hacía su líder no estaba bien. sin embargo, el miedo y la cobardía evito que lo confrontaran por lo que solo se dispusieron a seguirlo con su papel de secuaces.

***

Llego con una cojera difícil de ocultar, ayudo a su padre a poner la mesa y ambos se sentaron a comer sin ninguna platica por medio. Era la primera vez que Ercole le había hecho un daño físico, si seguía así no faltaría mucho para que un día de estos le pegara, aun así , no podía hacer nada el azabache le ganaba en fuerza , edad y hasta... en cada carrera de verano... tan sumida estaba en sus pensamientos que no había probado bocado.

-- No piensas comer? - dijo su progenitor que la miraba con ese semblante tan serio pero que ocultaba un sinfín de emociones, a veces se preguntaba si era suficiente para su hija, tal vez debería quedarse en Génova con su madre para siempre, ya que aquí no parecía verse feliz. Aquí no tomaba más que un comportamiento errático, le preocupaba tanto que parecía que por más que intentase pasar tiempo con ella , no había reparo más que apartarse .

-- Claro que si padre , tengo mucha hambre! – dijo con entusiasmo fingido mientras tomaba una gran cucharada y la degustaba . cabe decir que su padre no cayó ante tal actuación .

Massimo no supo cómo reaccionar, no sabía cómo tomar la situación en general, cada segundo era frustrante, no entendía que le pasaba a su hija, pero claramente no estaba bien .

Todo el almuerzo se tornó tenso, hasta que Massimo tomo de nuevo la palabra.

-- Giulietta hablemos ---

La menor se percató de que su padre estaba tomando iniciativa, no quería contarle de sus problemas, seguro pensaría que era una tontería

-- no padre, no te preocupes, estoy bien! -- Solo estoy muy cansada por las entregas oh! Y esta cojera es solo porque me caí por ahí no tienes de que preocuparte – todo esto lo dijo mientras se levantaba abruptamente y lavaba su plato para escapar rápido de la situación.

Su padre no tuvo oportunidad de contestar siquiera, la pelirroja había salido huyendo a su habitación para desembocar en aquel árbol al que iba todos los días.

Allí suspiro con pesadez , miro el cielo donde la luna ya hacia aparición , se repetía a si misma que cuando gane esa competencia alfín recibiría el reconocimiento que merecía , sin embargo... no veía oportunidad a lado del joven de bigote extraños , era tan inútil convencerse a sí misma de que podía, la frustración era enrome , si darse cuenta las lágrimas ya se deslizaban por su mejilla , unas espinas invisibles apretaban su cuello , abrazo sus piernas y sollozando por ultimo solo escondió el rostro para pensar en otra cosa.

Esa chica pelirroja no tenía idea de que el día de mañana un dúo de jovencitos llegaría a su vida dándole la oportunidad que tanto necesitaba, y también una amistad que perduraría.