prejuicios [BNHA]

capitulo 1

—porqué no intentas estudiar en la ua— yuki, mi compañero de piso, normalmente extrovertido y amable, pero no recomiendo enojarlo

—Ni loco, ya te dije que no quiero ser heroe— y no cambiaría de opinión ¿que sentido tenía ir con mallas de licra ajustadas combatiendo contra crímenes con una sonrisa que parecía ejercer un efecto negativo en los villanos?

—Porqué? De pequeño siempre querías ser heroe— infló los mofletes, un acto "tierno" que el sabía que ignoraría.

—porque haría de todo... Menos convertirme en lo que mas odio— me levante del sofá, es mi decisión ¿que más le da si voy o no voy a esa estúpida academia?

—por lo menos al curso de apoyo... Tus inventos son buenos— me lo pensaría, no por ser un héroe o ayudarlos, si entraba en la ua y estudiaba en esta no tendría ninguna clase de problema al intentar entrar en una empresa.

—me lo pensaré— la voz cansada que salió de mi boca alegró a mi compañero de piso

[...]

—paso— había investigado y había encontrado unas cuantas opciones tan prestijiosas como ir al curso de soportes de la UA.

—De que pasas— dejó a un lado la comida para prestar atención a lo que yo decía.

—Paso de entrar a la UA— seguí comiendo como lo hacía antes pero un golpe en la mesa me hizo prestar atención al que se encontraba en frente mio.

[...]

—¿Como cojones terminé aquí?— la puerta fente a mi hera del curso de soportes, yuki había enviado uno de mis inventos y terminaron por aceptarme, aunque yo me había resistido a ir fuí arrastrado por mi supuesto amigo.

—Te vas a quedar ahí parado o que?— ni siquiera era el primer dia ¿Porqué cojones me aceptaban a mitad de curso?

Suspiré y entré al aula, mas bien taller, detrás de mi entró el chico que hizo aquella pregunta, tenía un pelo peculiar, al igual que sus ojos y esa cicatriz en su ojo parecía esconder una historia no del todo agradable.

—hmm quien eres? Eres alguien que necesita uno de mis bebes?— Por sus ojos puedo casi apostar que su quirck tiene algo que ver cosas de tamaños reducidos o ver a la lejanía, algo útil para las piezas pequeñas de inventos. Espera, bebes? No sabe respetar el espacio personal?

—Mei, no deberías hacer eso con cada persona que entra al taller— Genial ¿y este quien es?

—Mmm... Señorita, le importa alejarse?— hera realmente incomodo tener sus pechos apretados en mi.

El señor que le había reñido, supongo el profesor, la alejó de mi rápidamente.

—Disculpala, es muy....— la miró por un rato mientras ella esperaba enérgicamente un buen adjetivo que la elogiara— muy, muy— o no encontró la palabra que buscaba o se le dio por no decirla.— de todos modos, nunca te he visto por aquí y tu cara no me suena, ¿que te trae por este taller?

—Soy nuevo— retiré mi mirada de el— creo que el bicolor tiene mas prisa, atiendalo primero— y no miento, yo doy clase aquí, pero el se la saltará solo por esperar por una cosa sin importancia que se puede hacer luego.