Gold and Flame |Ron Weasley Smutfic| |+18|

0: Oro

— Quiero... romper.

Me encontraba en una parte alejada de la Madriguera. Con la compañía de Hermione Granger. Mi futura ex novia.

Me encontraba muy nervioso. Tenía miedo de la reacción de la castaña. La ultima novia que tuve, Lavender Brown, no reacciono muy bien a la ruptura. Y definitivamente Hermione era mucho más explosiva.

Aunque ella era más razonable que ella, pero el miedo era demasiado grande. 

La mire con aprensión. Ella se había quedado estática. Con los ojos muy abiertos. Me rasque la nuca nervioso mirando hacía otro lado. Quería que esto acabase ya. 

— ¿Por...? —las palabras no le salieron. Se aclaro la garganta—. ¿Porqué?

— Siento que... esto no esta funcionando.

Note que sus ojos se cristalizaron todavía sorprendida. Ya me estaba esperando lo peor. Y eso era o su enfado, o qué llorase. No sabría qué hacer, seria muy incomodo intentar consolarla.

Ella se tapo la ca boca con las manos. Como si quisiera gritar. Jugué con los pulgares incomodo. Sus ojos estaban húmedos. Veía las lagrimas brotar en sus ojos. «Mierda»

— Hermione... —murmuré—. Lo siento, pero de verdad... esto...

Se seco las lagrimas y apretando los puños dijo con un hilo en la voz.

— Déjalo Ron.

Se fue de ahí secándose las lagrimas. ¡Definitivamente era mejor que me gritase! Joder... Ahora Ginny y mamá me iban a mirar mal. Mierda.

Me fui hacia la casa lentamente, sin querer llegar a ella. Ahora me tocaba cargar las miradas.

Respire hondo. Dos días después de la ruptura, la familia Delacour iba a reunirse con mi familia para "terminar" la boda de Fleur y Bill. Mamá me había pedido que los esperase, sin dirigirme una mirada de reproche cuando me lo decía. 

En efecto, Ginny se había enterado, se lo había dicho a mamá y ahora todas las mujeres de la casa lo sabían. Ademas de Harry. 

Por lo menos, ninguno de mis hermanos mayores se había enterado. Ya tenia suficiente con las miradas que me dirigían las dos pelirrojas. Por lo menos Harry no me dijo nada malo. Aun así se paso casi todo el día consolándola.

Una familia de cuatro personas apareció unos metros más lejos. Pude ver la silueta de dos mujeres esbeltas, una más alta que la otra. Una de ellas tendría que ser la madre. Luego había dos mas bajas, que tendrían que ser Grabielle y Monsieur. Todos tenían unos andares llenos de gracia.

La figura que no tenia clara era que que se encontraba de la figura mas baja. Era esbelta y el pelo se movía a su alrededor como flotando. Aunque no le viese todavía la cara, estaba seguro que tenía parte veela.

Por fin distinguí a la familia. Había tres mujeres y un hombre. Las tres mujeres tenían el pelo platino, menos la desconocida que era más oro. Y el padre tenía el pelo de color castaño y bigote pronunciado.

Cuando estuvieron enfrente mío. Admire la belleza de la desconocida. Los ojos eran de un color celeste, más brillantes que el propio cielo. Tenía una expresión un poco tímida. Pero sonreía co naturalidad.

Respire hondo, saliendo de mi ensimismamiento. Pero no fue buena idea, mis fosas nasales de inmediato, se llenaron con su olor. Olía, prácticamente a azúcar y fresas. Aún así conseguí saludarles y dirigirme con ellos a casa.