🥀Capítulo número 4🥀

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•4•

-¿Entonces vienes? -pregunto desde el otro lado de la línea-

Me senté en el asiento frente del tocador y me saque los pepinos de los ojos mientras intentaba no reír a ver mi cara en el espejo

-¡Que si, Euge! -reí-

Eugenia era una mi compañera en biología y matemáticas, no nos habíamos cruzado en esa semana ya que ella estaba enferma y no se sentía del todo bien gracias a su periodo

Era muy gentil conmigo y su pelo era perfecto al igual que sus ojos, eran verdes claro y a la vez oscuros

Y como era finde semana me invitó a una pijamada en su casa.. y luego de pensarlo y pedirle permiso a mis padres acepté emocionada

-Trae tus cremas y maquillaje! Yo voy a hacer pochoclos o algo parecido -dijo entusiasmada-

Ella sabía que tenía cremas y todo eso ya que vino a casa un lunes y se fue ayer, osea jueves... a mis padres les había agradado y ella en ningún momento dejo de ser ella

Me peino y maquillo y yo luego a ella, en esa semana se quedaba a dormir y al otro día nos llevaban juntas al Cole

Sentía que nuestra amistad era sincera y pura, ella me contaba cosas privadas y yo igual

Dejé mi bolso en la cama y me metí a bañar mientras ponía de nuevo Briney de fondo, al salir me puse otro vestido rosado y colorado, me peiné y me puse mi perfume mientras me acomodaba mis zapatos con plataforma... Antes muerta que baja...

-Adiós mami -susurre luego de despedirme de papá-

-Adiós mi amor, ten, adentro hay chocolates -sonrío orgullosa-

Me entrego ese bolso y yo lo acepte contente y con hambre, me pare derecha y les sonreí

-Cuidate y no comas mucho -asentí-

Sabían que amaba el chocolate y su peor error fue darme el bolso justamente a mi

-Él domingo venimos por ti pasa ir a la iglesia -asentí de nuevo-

-¡Vale! -sonreí- Los amo ..

-Nosotros a ti cariño -respondío papá-

Una vez que entre a la casa ellos se marcharon mientras yo reía al ver a Euge bajar las escaleras con una mascarilla negra en la casa

-Hola! -dijo gritando- Lili levanté esto a mi cuarto -le dijo a la chica-

Ella le hizo lo que le pidió y desapareció rápidamente por las escaleras de mármol elegante

La casa parecía un castillo todo enorme, elegante y moderno como en las películas de mafiosos

-Venga! Vamos -tiro de mi mano luego de abrazarme-

Subimos las escaleras y entramos a uno de los tantos pasillos, en uno de ellos nos metimos y comenzamos a caminar hacia su habitación mientras hablamos de pavadas

A pensas pise el suelo de su cuarto ella me agarró y me sentó en una de silla fuerte a su tocador negro y comenzó a ponerme cremas, mías y suyas

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