¡ Maldito Suppasit!

III

Estos días después de la llegada de Gulf, todo ha sido caos en la compañía, distintas empresas queriendo trabajar con nosotros y pidiendo a Gulf como rostro. No voy a negar que esto es bueno para la compañía ya que nuestras arcas crecen, pero me molesta reconocer que sea él quien genere este interés, sobre todo porque muchos de los que vienen quieren solo ver a Gulf sin interesarse en nuestras propuestas, como ahora que estamos esperando por Gulf ya que el cliente ha rechazado todas nuestras sugerencias de modelos y solo quiere conocerlo antes de firmar el maldito contrato. Veo que la puerta se abre y el aparece con su espléndida sonrisa iluminando a todos en la sala, por supuesto que menos a mí, a penas nuestras miradas se cruzan su sonrisa se borra y no puedo negar que eso me encanta

- Buenos días, disculpen la interrupción – dice suave mientras se quita el abrigo negro dejando al descubierto un hermoso conjunto que resalta su tono de piel

- No te preocupes hermano, te estábamos esperando – dice Brigth sonriente

- Gulf déjame presentarte al Sr Thanayut, quien quiere que seas el rostro de su nueva colección y que estés presente en el desfile de esta al final de la temporada de la Moda – dice sonriente Win mientras Gulf saluda cordialmente al cliente

- ¡OH, por dios! es un honor para mí que esté interesado en mi persona señor Thanayut – dice un sonrojado Gulf... debo decir que se ve hermoso.

- Por favor Gulf, llámame Tong somos casi de la misma edad – dice coqueteándole

- Está bien Tong, es un enorme placer conocerte, amo tu trabajo y la calidad de tus diseños– dice Gulf coquetamente

- Bien, ya que están hechas las presentaciones continuemos con la reunión – digo serio – Antes de que firme contrato con Gulf, debo advertirle que nuestro modelo aquí presente tiende a incumplir acuerdos, por lo que es mejor dejar bien claros los puntos para que Gulf no los olvide – digo sonriendo mientras siento la mirada furiosa de Gulf en mi

- Bueno si Gulf acepta ser el rostro de mi campaña podemos acomodarnos a sus necesidades; haremos todo para que te sientas cómodo hermoso – dice mientras le sonríe descaradamente. No puedo creerlo, ¿acaso los ciega con esa cara de inocente?...

- Sr Thanayut, es mi deber informarle para que después no haya reclamos injustificados – digo molesto

- No tienes de que preocuparte Tong, soy muy responsable con mis trabajos y si existiera algún inconveniente no dudo que podríamos llegar a algún acuerdo – dice guiñándole un ojo. Lo observo asombrado ¿acaso todo lo malo que dicen de Gulf es cierto? ¿Sería capaz él de meterse con todos para llegar dónde está? ¿En qué clase de hombre te has convertido Gulf?... No, el Gulf que yo conozco no puede ser ese tipo de persona.

Sigo observando su interacción y no me sorprende ver a Thanayut sonreír de oreja a oreja sin dejar de ver a Gulf, que al moverse se le ha abierto más su camisa dejando ver claramente la piel de su torso, vuelvo a mirar al maldito cliente que esta embobado mirando mientras se muerde el labio inferior y se acomoda en el asiento. No aguanto más, me levanto rápidamente y acercándome a Gulf giro su silla poniéndolo frente a mi abrochando apresuradamente los dos botones que de su camisa mientras le susurro

- Deja de exhibirte de esa manera, en esta empresa no cerramos así los contratos – digo furioso

- No me digas... ¿acaso no los cierras metiendo mano a las zorras en tu oficina?- me enfrenta – ¡Tú no tienes moral para juzgarme Mew! – se gira ignorándome y devolviéndole una hermosa sonrisa al cliente.

- Si ya todos los puntos están acordados me retiro... le enviare la copia del contrato a su abogado Sr Thanayut... – digo y me retiro saliendo veloz de la sala de juntas.

Ingreso a mi oficina furioso, caminando de un lado a otro tratando de botar toda la tención de mi cuerpo, ¿Por qué mierda me importa que se exhiba el idiota de Gulf?.... ¿Acaso no sabe comportarse?... ¡maldita se Mew, que te tiene que importar que otros lo observen!... Estoy en medio de mis pensamientos cuando la puerta es abierta por Win quien ingresa y se sienta en el sillón a observarme.

- ¡Di lo que tengas que decir Win y retírate! Porque no tengo tiempo ni ganas de hablar – digo mientras camino pasando mi mano por mis cabellos

- ¿Qué fue todo eso Mew? cualquiera que te vea diría que estas cuidando lo tuyo... ¿pero Gulf no es tuyo?... así que ¿me explicas? – dice mientras se acomoda apoyando la espalda en el sillón... Si te digo que ni yo mismo lo sé ¿me creerías? – Pienso- mientras intento tranquilizarme e inventar algo creíble.

- Mira Win, sé que tú lo adoras y que él es el hermano de Brigth – suspiro – Pero lo que observe allá dentro me molestó, porque el muy idiota de tu amigo casi se le estaba ofreciendo al cliente y ¡maldita sea, esta es una compañía decente no un maldito prostíbulo!... Te juro que estoy comenzando a creer todo lo que dicen de él – me levanto y camino a mi escritorio – Tal vez cuantos favores a debido pagar para llegar a donde está... - me giro y al levantar mis ojos, mi voz se pierde encontrándome con el rostro sorprendido de Gulf

- ¡Oh por dios Mew! – oigo decir a Win. Pero mis ojos no se apartan del rostro asombrado y dolido de la puerta. Lo veo ingresar a paso lento y acercándose a mi escritorio sin apartar sus ojos de los míos me dice

- ¿Eso es lo que piensas de mi Mew? – su voz sale suave y triste

- ¡Mew discúlpate ahora mismo con Gulf! – dice Win parándose a su lado observándolo asustado

- Gulf... yo no quer... - trato de disculparme pero una gran bofetada me interrumpe y tocando mi mejilla izquierda lo miro asombrado, viendo la furia en sus ojos y las lágrimas correr por sus mejillas

- Escúchame bien Mew Suppasit, ¡yo jamás... jamás me rebajaría de esa manera para salir adelante!... me he esforzado cada maldito año para llegar donde estoy y no voy a permitir que tu ni nadie ensucie mi nombre difamándome de esa manera – habla apuntándome y golpeando mi pecho con su dedo índice – Y ahórrate tus estúpidas disculpas por que no las aceptaré... ¡¡Puedes irte a la mierda Maldito Suppasit!!.. tú y todos aquellos que hablan mal de mí; porque yo no vivo para ti, ni para nadie – dice volteándose y saliendo rápidamente de mi oficina... dejándome ahí sintiéndome como la mierda.